Con Cristina condenada

Kicillof quiere evitar la "unidad forzada" con Máximo, mientras LLA y el PRO no aprovechan

La pretensión de independencia del gobernador bonaerense parece esfumarse tras la prisión domiciliaria a la expresidenta y el mayor ganador parece ser Máximo Kirchner. Del otro lado, LLA y el PRO no avanzan en Provincia.

Cristina Fernández de Kirchner estará en la boleta del peronismo kirchnerismo renovador, ya sea con un nombre figurativo en el papel que los representará o con un holograma al estilo de Perón y Evita en tiempos pasados. 

Esta es la intención y la decisión de Máximo Kirchner y su grupo estrecho de estrategas de cara a la negociación que se abre frente al Movimiento Derecho al Futuro de Axel Kicillof, obligado, si mantiene la unidad, a quedarse en el pasado.

Los debates que se dieron durante la semana que duró el duelo por la condena contra la expresidenta fueron jugosos por los conceptos escuchados y las lecturas que, posteriormente, cada protagonista realizó de lo que aún hoy se conoce como Unión por la Patria

La mayoría dejó en claro que la unidad está en riesgo, que el futuro debería continuar con cambios de nombres y estrategias y que las realidades provinciales difieren, y mucho, de lo que se concentra en la Provincia de Buenos Aires, donde los Kirchner desean mantener su herencia.

"Imagínate una lista de unidad en las ocho secciones electorales. El único ganador sería Máximo Kirchner. ¿Cómo seguimos el día después?", se preguntaba con una respuesta obvia un ministro de Axel Kicillof quien, para su construcción de futuro, necesita sobreponerse al pasado del cual fue parte neurálgica.

"Vos tenes que ver cómo se comentan las cosas en los grupos de intendentes o de la sección... Cuando aparece la cuestión política, que la convoca Axel, los de La Cámpora ni responden y, cuando convoca Gustavo Menéndez en representación de Cristina, los otros ni se meten. ¡Ni siquiera comparten miradas diferentes sobre esos temas políticos!", describe uno que tiene la posibilidad de ver esa 'no interacción' diariamente.

En la juntada realizada el martes en La Plata, algo que se hace con cada vez más frecuencia entre los intendentes kicillofistas y el gobernador, además de coordinar como movilizarían al día siguiente a Plaza de Mayo, lo otro en concreto que se decidió fue transformar el lema camporista "Nada sin Cristina" en "Nada con Máximo".

De ahí que la romántica -y a su vez forzada- idea de la unidad penda hasta el último día de un hilo. Son muchas las "traiciones" anotadas de uno y otro bando para guardarlas en un ropero hasta que no ocupen más lugar. 

Además, los actuales actores no pueden semejarse a los de hace un par de décadas, quienes pacientemente trabajaban, a través de terceros, para que la sangre nunca llegara al río. Ahora quedaron expuestos directamente los herederos del kirchnerismo, acostumbrados a ser funcionarios y candidatos a merced de la protección que ella irradiaba.

La gran diferencia entre uno y otro bando es la solidez de cada espacio. Mientras que La Cámpora es monolítica, sin diferencias en métodos y objetivos, el Movimiento Derecho al Futuro es algo en construcción con retazos provenientes del propio cristinismo al que ahora combate, representantes del peronismo tradicional y actores vinculados más con la opinión pública que con la política tradicional. 

Por eso cayeron como una bomba en el aún nonato "axelismo" las opiniones de una de sus principales figuras, el ministro Gabriel Katopodis, quien expresó, camino a la marcha, que "vinimos acá porque nos une Cristina", pero cuando le preguntaron si la mejor figura era Axel Kicillof él contestó: "Nooo... la mejor figura es lo que vamos a ver acá, toda esta gente movilizada... Todo esto lo ata Cristina".

Esa mirada fraguada, romantizada, de la unidad es la que le impone cautela al resto de los diseñadores del MDF sobre cómo seguir. En esta misma línea se incluyen varios intendentes y ministros, como Cristina Álvarez Rodríguez, que no ven futuro con emancipación del pasado. Todo lo contrario. El miedo a perder una elección o un distrito pesa mucho más que el derecho al futuro.

¿Y en el oficialismo? Los libertarios también se tensionan

Algo parecido sucede en la interna de La Libertad Avanza bonaerense. La tensión no es nueva, pero va escalando, y solo se puede contener ante la posibilidad de una victoria electoral del oficialismo que integran. Si no fuera por eso, todo sería más escandaloso que los bailes de Cristina en el balcón.

El paralelo radica en lo discursivo y metodológico. Mientras que Las Fuerzas del Cielo son lo más parecido a La Cámpora que tiene Javier Milei, el armado tradicional de los territoriales de Sebastián Pareja es más inorgánico: sus coordinadores provienen de viejas estructuras locales a las que se le sumaron algunos especialistas en la trascendental política del Conurbano. 

Estos dos mundos no pueden convivir en los diferentes territorios y siempre hay correlato de esa puja. Los primeros son bancados por Santiago Caputo, los segundos, por Karina Milei.

La batalla mediática, por supuesto, la ganan los primeros. Con más "fierros" económicos y administrativos, saben cómo hacer para que las bombas que ellos tiran hagan mucho más ruido que los estructurados por la hermana presidencial. "Unos tienen los fierros del Estado, nosotros la ponemos de nuestro bolsillo", siguen quejándose los territoriales.

Uno de los leading case más atractivos se da en Tigre, donde Nicolás Scioli, el hermano de Daniel, fue puesto como candidato sin hablar con los habitantes originarios o, en este caso, quienes venían trabajando en el mundo libertario desde hace tiempo. 

Además de lo que venían planificando Segundo Cernadas, Claudio Baumgarten y José De los Ríos, ahora se suma el empresario liberal Rodolfo Hyland, quien compartió con buena parte de la cepa mileísta una comisión empresaria política en Madrid hace solo quince días. 

En quince días Hyland también abrirá su local partidario, aunque para todas las terminales libertarias provinciales "lo de Tigre ya está definido desde mucho más arriba. Nadie se puede meter".

Esta semana se vio otro avance material en la fusión que pretenden hacer La Libertad Avanza con el PRO. Allegados a Cristian Ritondo asumieron en las oficinas del PAMI de Williams Morris y Morón, manejadas por antiguos referentes libertarios. 

Pero parece que en lo político las cosas van mucho más lentas. No solo no hay acuerdos entre ambos partidos, sino que, lo peor, no hay mensajes. En este caso, el único que debe darlos es Karina Milei y, por más que Ritondo dialogue con Santiago Caputo, es El Jefe quien decide. Por eso el próximo lunes, ya necesitados de definiciones, los intendentes del PRO se reunirán para buscar una alternativa a este punto muerto inducido. Como dice Pareja, "los pagamos muy caro", y ahora pretenden que salgan menos.

La semana que viene, en La Plata, habrá un acto en el que presumen que participará Javier Milei bajo la leyenda "libertad bonaerense", en lo que representa un avance para conformar un acuerdo opositor en la Provincia.

¿Por eso habrá ido este jueves Cristian Ritondo hasta la capital bonaerense? ¿Pedirá que no lo dejen solo en caso de que lo inviten a participar de la fiesta libertaria? Dato nada menor. El exintendente Julio Garro, la figura más relevante del PRO local, no estuvo por ahí. 

Temas relacionados
Más noticias de La Libertad Avanza
Noticias de tu interés

Compartí tus comentarios

¿Querés dejar tu opinión? Registrate para comentar este artículo.