

Internet, esta red que se percibe ubicua e igualitaria, está dando un paso central para que la realidad se aproxime más a esa percepción. La gobernanza de Internet comenzó una nueva etapa luego de la afirmación del gobierno de Estado Unidos de transferir las funciones de coordinación central de Internet que detenta la Internet Assigned Numbers Authority (IANA). En la cumbre NetMundial que se realizó en San Pablo con el objetivo de consensuar los lineamientos que ordenarán el uso y la gestión de la red a partir del 2015 se continuó este proceso.
Si bien los distintos representantes del modelo multiparticipativo los gobiernos, la sociedad civil, la comunidad técnica, representantes de la academia y el sector privado ,abogamos desde hace tiempo por una gobernanza abierta, participativa y tecnológicamente neutra, la vuelta de hoja en la historia de Internet ha tomado más fuerza a partir del escándalo de espionaje denunciado por Snowden. Los gobiernos que fueron víctimas volvieron la vista sobre este asunto y lo empezaron a tomar más en serio. Sin duda, el rol que deben ocupar los Estados en la administración de la red dentro de sus fronteras es el punto más álgido de la discusión, ya que están aquellos que impulsan la libertad y otros que controlan los contenidos.
Cabase comparte la posición presentada por Argentina en la cumbre, que entiende que la gobernanza de Internet se trata de una política pública que debería conjugar el respeto por los derechos humanos con las políticas internacionales que la comunidad técnica fue desarrollando desde los inicios de Internet. Esto implica considerar que quienes hacemos Internet todos los días, desde los que tienden las redes, pasando por los que dan conexión en cada hogar, escuela, hospital o empresa, hasta quienes la llenan de contenido debemos participar de la Gobernanza. Apoyamos una gobernanza basada en principios democráticos y en función de nuestra Constitución Nacional, y hemos promulgado nuestros 10 Principios que debemos cumplir y en los que expresamos desde hace más de 2 años nuestra postura. En este sentido, adherimos a la cooperación para permitir que todos los países, en especial los que se encuentran en vías de desarrollo, puedan desempeñar sus funciones y responsabilidades en lo referente a la política pública internacional de las cuestiones relacionadas con Internet.
Internet es una herramienta clave para el desarrollo socioeconómico de los países y su rol en el proceso de enseñanza y aprendizaje ya es indiscutido, por estas razones, no debemos perder de vista sus impactos cuando estamos empezando a escribir las nuevas pautas para su crecimiento mundial.










