Después de haber vendido la operación local de Chery, el grupo Macri pisa el acelerador con JAC, la otra marca china de autos que representa en el país. Con el impulso del cupo a la importación sin arancel de vehículos eléctrico que abrió el gobierno de Javier Milei, la empresa develó los lanzamientos de modelos que hará durante el segundo semestre de 2025.
Sin embargo, la mayor novedad es el anuncio del montaje local de vehículos eléctricos y a combustión -entre ellos, una pick-up-, que se sumarían al camión chico que, desde mayo, ya se ensambla en La Plata, a través de un acuerdo entre Sideco y la empresa local Ralitor, una terminal que, desde 2021, hace productos de ese tipo de otra marca china, JMC.
"Como parte de su estrategia a nivel nacional, Sideco revela las novedades de JAC Motors para el segundo semestre del año: vehículos híbridos, eléctricos, a combustión y la incorporación de producción nacional son algunas de las propuestas para el mercado argentino", informó la empresa de la familia Macri a través de un comunicado.
"Con el objetivo de continuar creando futuro en el sector argentino, la empresa Sideco anuncia el lanzamiento de una nueva etapa para su marca más joven y pujante: JAC Motors", agregó.
En los '80 y la primera mitad de los '90, Socma llegó a fabricar uno de cada dos autos que se vendían en la Argentina. Su músculo automotor, Sevel, fue licenciatario de Fiat y de Peugeot hasta el retorno directo de esas marcas en el país (1996 la italiana; 1998 la francesa).
La vuelta a la industria automotriz fue una espina clavada que Franco Macri, recién, se pudo sacar en 2007, cuando concretó su sociedad con la automotriz china Chery, anunciada desde, por lo menos, un par de años antes.
Ese retorno del rey del negocio automotor siempre tuvo como norte la radicación de una fábrica de vehículos. Se analizó, para eso, la utilización de una ex planta de Sevel en Berazategui y, años después, hubo idas y vueltas con Jorge Capitanich para radicar una fábrica en Chaco.
Entre tanto, el proyecto arrancó con el montaje del auto chico QQ y el SUV Tiggo, modelos que se ensamblaron hasta 2015 en Overol, otra planta de la época de Sevel que Macri conservó en Uruguay. Las restricciones a la importación que hubo en la Argentina desde 2011 y la llegada de Chery con una planta directa a Brasil en 2017 -lo que Macri quería evitar- definieron la suerte.
Franco Macri falleció en marzo de 2019. Nunca pudo ver cumplido su sueño de volver a fabricar autos en la Argentina. Ya desde hacía unos años, el negocio automotor -junto con otros- era supervisado por su hijo Gianfranco, uno de los hermanos de mayor afinidad con Mauricio, el ex presidente de la Nación. En enero de 2022, la posibilidad reflotó cuando el gobierno de Alberto Fernández, en el marco de una visita suya a China, anunció -a través de su embajador en el país asiático, Sabino Vaca Narvaja- que Chery instalaría una planta para producir vehículos eléctricos en la Argentina; muy probablemente, en Santa Fe. No ocurrió.

El mes pasado, Socma anunció la transferencia de Chery a Grupo Corven, que pasó a ser su nuevo licenciatario en el país. La marca, que llegó a vender más de 6000 unidades en 2017 y 2018, registró sólo 558 en 2024, según datos de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara). Fue un crecimiento del 26,5%. Entre enero y mayo, se patentaron 334 unidades, 80,5% más que un año antes.
Sideco conservó otras marcas chinas. Entre ellas, JAC, que sumó en 2017. Con 124 patentamientos, escaló más de 120% el año pasado.En cinco meses de 2025, van 256, un crecimiento del 653%, de acuerdo con los datos de la cámara.
Su gama actual está compuesta por cinco modelos: la SUV compacta S2 FL, la mediana JS4, la subpremium de siete asientos JS8 PRO Flaghip+, la pick-up JACT8 y el utilitario JACX200. Según lo anunciado, sumará la nueva versión PRO de la JACT8, el SUV compacto JS6 en versiones a combustión e híbrida, la pick-up JACT9 (combustión y eléctrica) y el hatchback compacto eléctrico E30X, con el que tendrá su primera presencia en el segmento B. En la primera tanda de cupos que asignó el Gobierno para importar híbridos o eléctricos sin arancel, la marca se adjudicó 300 unidades.
"Además, como parte de su compromiso por el desarrollo a nivel nacional, la empresa planea ampliar su proceso industrial iniciado este año con el vehículo comercial JACX200, con la incorporación a la línea de producción de su pick-up eléctrica, eléctricos y a combustión", prometió la empresa, en relación al acuerdo que tiene con Ralitor.
Por ese convenio, en mayo, comenzó a ensamblarse el camión compacto X200, de JAC, a un régimen de 15 unidades al mes. Ralitor, importador de Shineray y JMC, fabrica allí desde fines de 2021 el Shineray T30, otro camión compacto.
En caso de avanzar, por ejemplo, con una pick-up, no sería la primera marca china que ensamblaría un vehículo de ese tipo en el país.En marzo, trascendió la intención de Corven de construir en el país una fábrica de pick-ups para otra marca china, Foton.














