InversiónExclusivo Members

Luz Azul amplía su fábrica para lanzar nuevos productos y empezar a exportar a un país clave

La pyme bonaerense invirtió u$s 900.000 para ampliar su planta de Azul. Empezará a producir una variedad de quesos más rentable y hasta busca proveer a otras empresas. Además, pone su primer pie en el exterior y abrirá un local en Paraguay

La pyme láctea Luz Azul invirtió u$s 900.000 en su planta para ampliar sus líneas de producción, empezar a producir nuevos productos y, finalmente, concretar su expansión regional. La empresa con base en Azul, provincia de Buenos Aires, abrirá su primer local en Paraguay durante el primer trimestre del año y seguirá con su estrategia de expansión mediante el sistema de franquicias en la Argentina.

A pesar de que hoy las exportaciones no son rentables para las empresas locales por, entre otras cuestiones, el tipo de cambio, la ampliación de la fábrica se proyectó pensando en el mercado internacional.

Para remodelar su fábrica -en la que actualmente tiene una capacidad de producción de 80 mil litros de leche por mes-, la compañía hizo una inversión de u$s 600.000. La obra implicó la ampliación en más de 1000 metros cuadrados (m2) y la mejora edilicia de la planta, con un nuevo sector en el que trabajará en su próximo desafío: ser la mejor marca de quesos con ojos, es decir, fontina, pategrás y gruyere.

"Son quesos más rentables, pero más difíciles de hacer ya que requieren de una línea especial. Además, tienen buen valor de venta y márgenes de rentabilidad más altos. La inversión estuvo focalizada en esta línea para producir este tipo de quesos con valor agregado", señaló Gabriela Benac, gerente general de Luz Azul.

En este sentido, Luz Azul readecuó sus procesos según las normas que establece Senasa para obtener la habilitación para exportar, otro gran propósito de la firma. "La idea es empezar a exportar a los países limítrofes, poniendo el primer pie en Paraguay", anunció Benac, al mismo tiempo que confirmó que será una franquicia y que los productos se enviarán directamente desde su planta en Azul.

"Si bien hoy el precio internacional hoy no sirve porque, con un dólar bajo, no estamos tan competitivos para exportar, queremos estar preparados para cuando se normalice la situación", adelantó la ejecutiva y deslizó que, si bien no será inminente, la firma podría expandirse a otros países de la región, como Chile y Brasil.

Por otro lado, la empresa bonaerense destinó u$s 300.000 a la instalación de 646 paneles solares que brindarán una potencia instalada final de 357.7 KWP. "A partir del incremento cuadriplicado de la factura de luz -pagábamos $22 millones-, decidimos invertir para lograr un ahorro económico y apostar a este tipo de energía renovable, algo en lo que estamos convencidos que será el futuro", dijo Benac.

Además, los fines de semana, cuando la fábrica no está operativa, la energía se transfiere a la red nacional. 

Afilar procesos y reducir costos, la fórmula para repuntar las ventas

El año pasado estuvo marcado por una fuerte recesión económica que rondó el 20% en términos generales. En el caso de la pyme láctea, si bien el último trimestre del año ayudó a recuperar meses más flojos, las ventas acompañaron la inflación.

"Diciembre terminó con ventas entre 25% y 30% superiores contra el mismo mes de 2023. Fue un repunte muy fuerte. Sin embargo, el año fue durísimo, de muchísima inflación y sobre todo ajuste en la parte de márgenes de rentabilidad", reveló Benac.

Una de las claves que, según la emprendedora, incidieron en los resultados de la empresa fue el hecho de tener venta directa, ya que hace que las transacciones se mantengan mucho más que si estuvieran en los supermercados, por ejemplo, donde hay más opciones para elegir.

"Sabemos que, de cara a 2025, tenemos que ser muchísimo más eficientes en todos los aspectos. Vamos a recortar al máximo la parte de gastos y trabajar mucho en el control. Creemos que va a ser un año mejor, pero tenemos que estar muy afilados", señaló.

Luz Azul tiene un promedio de apertura de locales mediante el sistema de franquicias de entre 10 y 12 tiendas anuales. Hoy, con un total de 70 locales a la calle, proyecta abrir otra docena el año que viene.

Cada franquicia requiere una inversión desde u$s 65.000, y tiene un acompañamiento personalizado durante 45 días por parte de la empresa. De los 70 que la marca cuenta en la actualidad, todos registran ganancias, con una rentabilidad aproximada del 15%. "Los franquiciados siguen apostando a Luz Azul, hay algunos que tienen hasta 5 locales", concluyó Benac.

 Hace una década, Luz Azul era una lechería que empleaba a 15 personas, procesaba 14.000 litros diarios de leche y su cierre era inminente. En 2012, fue Gabriela Benac quien se hizo cargo de la empresa mediante un alquiler con opción a compra de la compañía que, en ese entonces, estaba manejada por la Cooperativa Eléctrica de la Ciudad de Azul.

 La principal razón de este cambio de rumbo fue una apuesta a la que la emprendedora llama "directo de fábrica" y que se refiere al crecimiento de la empresa mediante franquicias, capacitación y una fuerte apuesta en la imagen y comunicación de la marca, además de garantizar calidad y precios económicos en la mayoría de sus productos.

Temas relacionados
Más noticias de Lácteos Luz Azul

Las más leídas de Negocios

Las más leídas de Apertura

Destacadas de hoy

Noticias de tu interés

Compartí tus comentarios

¿Querés dejar tu opinión? Registrate para comentar este artículo.