Cómo hacer pastel de calabaza en 10 simples pasos: perfecto para Halloween

Se acerca la época más temible del año: Halloween. Una de las tradiciones más populares es la decoración de calabazas, pero si después de terminar te preguntas qué hacer con sus restos, esta receta es perfecta para ti.

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La fiesta de Halloween nace en la Edad Media en el pueblo celta como paso a la época más oscura del año por el inicio del invierno. Por entonces se creía que para esa fecha se abría un portal al inframundo donde los espíritus podía entrar al plano terrenal.

 En la actualidad la Noche de Brujas o también llamada Día de Todos los Santos, se festeja con decoraciones especiales, disfraces de terror y reuniones con amigos y familias.

Como cada vez falta menos para el 31 de octubre, puedes empezar a practicar una deliciosa comida para compartir en la mesa en la celebración de Halloween. Este pastel de calabaza dejará a más de uno con la boca abierta, ¡y no del susto sino por su sabor!

Cómo hacer pastel de calabaza

Esta preparación es muy fácil de hacer y es ideal para aprovechar los restos de calabaza luego de crear una de las típicas decoraciones.

Ingredientes

• 200 grs harina
• 80 grs mantequilla
• 4 huevos
• 20 ml agua
• 130 grs azúcar
• 1 kg calabaza
• 350 ml leche
• 1/2 cuchara canela en polvo
• 1/2 cuchara jengibre en polvo
• 1/2 cuchara nuez moscada en polvo
• 1/2 cuchara nuez clavo en polvo
• 1 pizca sal

Preparación

1. Lo primero es preparar la base del pastel. Para ello, colocar en un bol la harina tamizada, la mantequilla, 30 gramos de azúcar y sal. Mezclar con las manos hasta tener una textura arenosa.
2. Añadir 1 huevo, el agua y amasar hasta obtener una masa homogénea. Refrigerar por una hora.
3. Estirar la masa fría con un rodillo, pasar a un molde previamente untado con manteca. Recortar los bordes sobrantes y pinchar el fondo con un tenedor para que no se infle al hornear.
4.   Cocinar en el horno a 180 grados durante 30 minutos o hasta que esté dorada y reservar.
   
5. Para el relleno partir la calabaza en dos y hornear al menos por una hora a 180 grados. Esperar que se enfríe para no quemarse y pelarla.
6. Cortar la pulpa en trozos y triturar en batidor hasta obtener un puré.
7. Al puré añadir la leche, el resto de la azúcar, las especias, los 3 huevos y sal. Volver a triturar para tener una mezcla suave.
8. Verter la mezcla en el molde cubierto con la masa ya cocida.
9. Precalentar el horno a 220 grados. Introducir la preparación y cocinar durante 10 minutos. Luego bajar la temperatura a 180 grados y dejar cocinar por 30 minutos más.
10. Retirar del horno, dejar que se temple, cortar y ¡disfrutar!