Estados Unidos declaró como ave nacional a una especie que esperó ese reconocimiento por más de 200 años: ¿por qué se tardó tanto?
Este animal es símbolo del país desde 1782, pero no había sido reconocida oficialmente hasta ahora. El pedido fue impulsado por legisladores de Minnesota, estado que tiene gran cantidad de población de esta especie.
Estados Unidos finalmente otorgó el título de ave nacional a una especie que había quedado en espera por más de dos siglos. Este reconocimiento llega tras años de debates.
¿Por qué se tardó tanto en tomar esta decisión? Conoce los detalles de este emblemático anuncio que resalta el valor simbólico de esta ave en la historia y cultura estadounidense.
¿Cuál es la especie que Estados Unidos declaró como ave nacional tras 200 años?
El emblemático águila calva, símbolo de Estados Unidos desde 1782, finalmente recibió el estatus oficial de ave nacional. Este reconocimiento histórico se concretó gracias a una ley firmada por el presidente Joe Biden en la víspera de Navidad.
La iniciativa legislativa tuvo un fuerte respaldo de representantes de Minnesota, estado que alberga una de las mayores poblaciones de águilas calvas en el país.
¿Por qué no se reconocía al águila calva como ave nacional estadounidense?
A pesar de ser un símbolo de Estados Unidos desde 1782, el águila calva no ha sido reconocida oficialmente como ave nacional hasta ahora. Varios factores contribuyeron a este retraso:
- Oposición histórica: Benjamin Franklin criticó al águila calva, llamándola un ave de "mal carácter moral".
Su inclusión en la ley fue posible gracias a años de esfuerzos de conservación y valoración de la especie. Foto: archivo El Cronista México
- Simbolismo dividido: para algunos, representaba fuerza y libertad, pero otros dudaban de su idoneidad.
- Falta de legislación: aunque aparecía en monedas y documentos oficiales, nunca se promovió una ley para otorgarle el estatus de ave nacional.
Águila calva: un símbolo protegido y rescatado
Gracias a la Ley del Emblema Nacional de 1940, el águila calva pasó de estar en peligro de extinción a ser un ejemplo de éxito en conservación. En 2023, nuevas disposiciones reafirmaron su estatus como símbolo nacional, destacando su relevancia ecológica y cultural.
Este emblema vivo es un recordatorio del compromiso con la protección de la fauna nativa y el equilibrio ambiental.