

Los anticuerpos que combaten el coronavirus yque son capaces de bloquear la variante Ómicronpersisten cuatro meses después de una tercera inyecciónde la vacuna contra el coronavirus de Pfizer-BioNTech, según un nuevo estudio publicado en el Washington Post.

El estudio de laboratorio, que aún no ha sido revisado por pares y tendrá que ser replicado y ampliado a un periodo más largo, da una primera pista sobre la durabilidad de la protección de la vacuna contra el coronavirus, ya que una línea clave de defensa inmunitaria permanece intacta.
Además, la investigación apunta que no sería necesario el refuerzo de una cuarta vacuna de inmediato, un planteo que se viene ampliando en varios países ante las nuevas variantes del coronavirus.
"Esto es muy, muy nuevo para el sector", dijo Pei-Yong Shi, microbiólogo de la rama médica de la Universidad de Texas en Galveston, cuyo equipo analizó los anticuerpos en la sangre de personas vacunadas contra un virus similar a la variante Ómicron en colaboración con científicos de Pfizer.
"Eso demuestra realmente que al menos hasta cuatro meses, después de la tercera dosis, sigue habiendo una actividad neutralizadora sustancial contra Ómicron", explicó al Post.
Se sabe que los anticuerpos disminuyen en los meses posteriores a la vacunación. Pero la variante Ómicron suscitó especial preocupación porque incluso en el mes posterior a la segunda dosis de la vacuna, cuando los niveles de anticuerpos que combaten el virus deberían estar cerca de su máximo, los anticuerpos capaces de bloquear el omicron eran mínimos, e incluso indetectables en muchas personas.
Y además, esos anticuerpos bloqueadores de Ómicron eran aún menos evidentes en el momento en que las personas estaban a punto de recibir una tercera dosis, indicaron los investigadores.













