

La Administración de Seguridad y Salud Ocupacional de Estados Unidos (OSHA, por sus siglas en inglés) emitió un ultimatum que exige ya sea la vacunación contra el Covid-19 o que se realicen pruebas semanales a los trabajadores de empresas con 100 o más empleados.
Las reglas de OSHA son un pilar clave del impulso del presidente Joe Biden para aumentar las tasas de vacunación a nivel nacional. Biden ya había ampliado las reglas a los trabajadores y contratistas federales, que entrarán en vigencia dentro de cinco semanas y que exigen estar vacunados sin ofrecer la alternativa de tests. Las reglas de OSHA, aunque menos exigentes, esencialmente extienden ese esfuerzo hacia el sector privado.
El requisito de OSHA entrará en vigencia este viernes, y la primera fecha límite de cumplimiento está fijada para el 5 de diciembre. Los trabajadores deben estar completamente vacunados antes del 4 de enero o se someterán a los tests Covid.
Los empleadores que no cumplan podrían ser citados por la agencia y enfrentar una multa de hasta u$s 13.653 por cada infracción grave. Un incumplimiento intencional -es decir, un empleador que ignora deliberadamente la medida- podría resultar en una multa de hasta u$s 136.532.
También se anunció el requisito de vacunación para trabajadores de la salud de los cerca de 76.000 centros de Medicare y Medicaid. La aplicación también comienza el 4 de enero.













