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¿Madrid se dio por vencida con las cotorras argentinas? El gobierno local anunció que no seguirá con el plan de exterminio de las aves invasoras

Durante dos años de campaña, la cantidad de estas aves invasoras disminuyó de 13.000 a 10.000 ejemplares.

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El gobierno de Madrid parece haber cambiado su postura respecto al control de las cotorras argentinas y de Kramer que han invadido la ciudad. Según declaraciones del delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, el Ayuntamiento decidió no continuar con el plan de exterminio debido a que la población de estas aves se encuentra en un "equilibrio estable". 

Esta decisión plantea interrogantes sobre el manejo de estas especies invasoras y sus posibles implicaciones para el ecosistema urbano madrileño.

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¿Madrid finalizó el plan de exterminio de las cotorras argentinas? 

Según información publicada en El País, el Ayuntamiento de la capital de España  comunicó su decisión de no continuar con el plan de exterminio de las cotorras argentinas y de Kramer, destacando que la población de estas aves se encuentra en un equilibrio estable en la actualidad. 

Durante los dos últimos años, la campaña de control redujo la colonia de estas especies invasoras de 13.000 a 10.000 ejemplares, representando un descenso del 30%. Esta acción también ha generado una disminución notable en las quejas vecinales.

El contrato firmado para esta campaña, con una duración de dos años, finalizó en mayo del año pasado y logró reducir la población de cotorras según lo previsto. 

Las cotorras argentinas representan una amenaza para las aves autóctonas y la biodiversidad urbana.(Foto: Wikimedia Commons - Enrique González) 

En la actualidad, no se ha considerado la necesidad de disminuir nuevamente la presencia de estas aves invasoras ni se ha planeado firmar un nuevo contrato al respecto. Según fuentes del área de Medio Ambiente, no se proporcionaron detalles sobre la distribución actual de las cotorras por distritos ni sobre las áreas donde se llevó a cabo el control.

El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento, Borja Carabante, defendió la actuación municipal, afirmando que mantuvo los índices establecidos por los servicios técnicos para garantizar el descanso vecinal y la protección de la biodiversidad. 

Además, señaló que la sobrepoblación de cotorras representaba un riesgo para la seguridad de los ciudadanos, debido a la instalación de nidos voluminosos en las ramas de los árboles. 

Estos nidos, de hasta 200 kilos, podían provocar la caída de ramas y desplazar a otras aves autóctonas, como los gorriones. 

El contrato de la campaña explicó que Madrid albergaba la mayor concentración de cotorras argentinas en España, según el censo de la Sociedad Española de Ornitología (SEO) Birdlife. 

Antes de las acciones de control, el barrio con mayor población de cotorras era Abrantes, seguido de Ciudad Universitaria, Las Águilas y Lucero, y Casa de Campo. Las empresas encargadas del servicio, Matinsa y Dypsa, llevaron a cabo diversas acciones, como la revisión de nidos, esterilización de huevos y retirada de nidos que representaban un riesgo.

Sin embargo, algunos vecinos denunciaron que durante la campaña se utilizaron perdigones de aire comprimido para matar a las aves, lo que generó controversia. 

El Ayuntamiento confirmó que esta acción se realizó en situaciones excepcionales y bajo autorización de la Comunidad de Madrid. Aunque se emplearon carabinas de aire comprimido en circunstancias específicas y recintos acotados, no se proporcionaron detalles sobre la cantidad de aves que fueron eliminadas de esta manera.

La decisión del Ayuntamiento de no continuar con el plan de exterminio sugiere un cambio de enfoque en la gestión de las especies invasoras. (Foto: Freepik) 

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Alternativas para la gestión de las cotorras argentinas

Ante la decisión del Ayuntamiento de Madrid de no continuar con el plan de exterminio de las cotorras argentinas y de Kramer, se plantean alternativas para gestionar la población de estas aves invasoras de manera sostenible. Algunas de las posibles acciones a considerar son:

  • Programas de educación ambiental: promover la conciencia sobre el impacto de las especies invasoras en el ecosistema urbano y fomentar prácticas responsables por parte de la comunidad.

  • Control de natalidad: implementar técnicas de esterilización de huevos o captura de ejemplares reproductores para reducir la tasa de reproducción de las cotorras.

  • Fomento de hábitats alternativos: crear espacios adecuados para las cotorras en áreas designadas, como parques urbanos, para disminuir su presencia en zonas residenciales.

  • Monitoreo continuo: realizar seguimientos periódicos de la población de cotorras y evaluar la efectividad de las medidas de control implementadas.

  • Colaboración con expertos: trabajar en conjunto con biólogos, ornitólogos y otras instituciones especializadas para desarrollar estrategias más efectivas y éticas de gestión de las cotorras.
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Comentarios

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  • M

    monovestido

    21/04/24

    Me alegro mucho y felicito al gobierno municipal. Era un acto cruel e inhumano. Las cotorras son animales inteligentísimos que no tienen la culpa de estar aquí. Lo mejor que se puede hacer es educar a la población sobre su biología y paliar los posibles efectos negativos. Son animales que han llegado para quedarse y querer poner puertas al campo es muy poco inteligente.

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    • CHH

      Carlos Hermida Hermida

      23/04/24

      Es una pena que no se pongan en manos de especialistas que controlan plagas sin causarle daño alguno, tanto las Palomas como las Cotorras son un grave problema, diría un problemón, en pequeños bosques o parque se juntan cantidades brutales y casi no dejan dormir en el caso de las cotorras y las Palomas es parecido no hacen ruido pero ensucian edificios y autos, la ciudad no es su habitat y generan molestias y gastos, no se debe matarlas, hay otras aves que se pueden introducir y controlan el territorio y deja de haber Palomas y Cotorras, lamentablemente el ser humano es el responsable, son lindos animalitos en cantidades controladas, muchos son Plaga, con quirquinchos (un pájaro negro no tan agradable, es muy territorial como el Buho aunque a muchas personas no les resulte agradable espantan a las especies que se sienten cómodas cuando las mantienen sin esfuerzo. Debe ser penalizado dar de comer a las Palomas, es común que lucren con vender alimento para Palomas en las Plazas, eso debe combatirse, sin darles de comer, si no hay basura y hay otras especies que controlen el territorio no hace falta matarlas, se equilibran solas, tambien en edificios Públicos y Aeropuertos en lugares altos esta bien grabar o plotear la silueta de un águila que las disuade a irse, se abarata el mantenimiento de la Ciudad en lo que hace a limpieza y no arruinan la pintura de los autos, las aves son migratorias, es muy lindo ver cada especie en su temporada pero que hagan su habitat en la ciudad de ninguna manera. Las grandes restauraciones de Edificios son producto de que ahi se instalan aves endémicas que parasitan a la ciudad, por eso se debe concientizar a la población que no las alimente, la naturaleza las creo para que ellas lo hagan por si mismas, es desagradable ver peronas que dedican su vida a dar de comer a palomas o gatos se convierten en una plaga por la cantidad y entorno es dificicil de tenerlo en condiciones de limpieza normal. Sin usar métodos crueles como el aire comprimido o el pegamento en la rama de los árboles, hay espinillos de plástico transparentes que desalientan a las aves a quedarse en determinados lugares, no las lastima solo las incomodan y se van.

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