

El miércoles se viralizó un video en donde se ve cómo una patota, supuesta agrupación de vendedores ambulantes de la zona, amenaza y golpea al comerciante del partido de Merlo que tiene un local mayorista de golosinas.
"Me duele todo, pero tuve suerte de que no me rompieran nada. Lo importante es que estoy vivo", dijo la victima en diálogo con Infobae.
El comercio está en la dirección Jujuy 1100, en el Oeste del Conurbano Bonaerense, a tan sólo una cuadra de la estación de Merlo del Tren Sarmiento. Gran parte de sus clientes está compuesto por vendedores ambulantes, quienes compran los productos y luego los ofrecen en las formaciones o en los andenes.
El lunes, alrededor de las 13.30 hs, el kiosquero se sobresaltó por el ruido de vidrios cayendo en el piso: habían roto la puerta de su local, donde él estaba trabajando. Apenas levantó la vista, se encontró con caras conocidas, un grupo de entre seis y ocho hombres, clientes habituales, y algunos menores de edad.
Los agresores decidieron filmar la situación y difundir las imágenes en las redes sociales a modo de intimidación, en donde se ven unos pocos segundos de un ataque que, en realidad, duró al menos 15 minutos.
En el video se escucha como uno de los agresores dice: "andate de Merlo, no te queremos acá", "cerrá el negocio, acá manejamos nosotros, te vamos a matar" y "matalo, matalo".
Con la representación del abogado Javier Baños, ex fiscal de Morón, la victima hizo la denuncia por el ataque y el video se convirtió en una prueba determinante en la investigación a cargo del fiscal Fernando Capello de la UFI N°2 de Morón.
En el escrito que presentó en la fiscalía, el agredido individualiza a seis de los atacantes con nombre y apellido: "son todos clientes míos. Los conozco porque trabajan en el tren. A mí nunca me habían intimidado, pero sí a conocidos. La verdad es que nunca imaginé que fueran a hacerme algo, pero cuando los vi entrar así, me paralicé y se me pasaban mil cosas por segundo en la cabeza", dijo a Infobae.

"Lo que se ve en el video fue solo un ratito. Después siguieron, me agarraron entre ocho y me pegaron muy fuerte". Las identidades de los agresores, por ahora, se preservan por el momento para no entorpecer la investigación del fiscal.
Además de agredirlo, la patota que lo atacó también se robó cerca de $ 350.000 en efectivo y otros $ 300.ooo en mercadería. "Me rompieron todo el local también. Tenía tanta bronca que no me dolía nada pero al otro día no podía más", dijo la victima.

Según los documentos que se entregaron a la justicia, los agresores ya son conocidos en el barrio y se manejan como una suerte de mutual que agrupa a los vendedores ambulantes que trabajan en la zona y en los vagones del Sarmiento.
Baños sostuvo: "Son una verdadera asociación ilícita. Son los que manejan todo ese negocio. Algunos de ellos son los propios vendedores ambulantes, pero a muchos los usan de carne de cañón, como fuerza de choque".
También declaró ante el fiscal Capello una comerciante de Morón que fue agredida por la misma patota el lunes en su local de Uruguay al 70 donde, sin embargo, la agresión no escaló porque había Policía en el lugar, la cual intervino rápidamente.












