

Por Matías Fuentes y Florencia Radici
Villavicencio
La tradicional marca de agua mineral cumplió su primer centenario en 2004 y lo festejó con la promoción Cien años, que culminó con dos mega-festivales que concentraron a 45 mil personas. Tradicional dueña del market share en su categoría, comenzó a embotellarse en 1903, aunque no era considerada un producto de consumo masivo, sino que se la asociaba con la medicina y se vendía en farmacias. El grupo francés Danone adquirió al grupo Cartellone en 1999 la embotelladora de agua mineral Villavicencio y las 72 mil hectáreas en donde se ubican las vertientes cordilleranas. Allí se encuentra, además, el Hotel Villavicencio, construido en 1940, actualmente en remodelación y con planes de ser abierto este año, con a una inversión de u$s 6 millones. Para la empresa, los años pasados no son un peso, sino un factor que favorece la relación con los consumidores.
Molinos Río de la Plata
La alimentaria argentina nació en 1902 como un desprendimiento de la exportadora de cereales Bunge & Born para ingresar en el sector de alimentos industrializados, en particular harinas industriales. La clave de su éxito fue la diversificación de sus productos: a medida que pasaron los años, el portafolio se fue ampliando e incluyó la adquisición y creación de famosas marcas, como Vitina, Vienissima, Matarazzo, Granja del Sol, Pindapoy, Don Vicente, Fritolim y Lucchetti, entre otras. Desde 1999 está controlada por el empresario Gregorio Perez Companc, que posee una participación del 63,7%. El patrimonio neto de Molinos al 31 de diciembre de 2007 ascendía a $ 1021,2 millones. En el segundo trimestre de 2007 registró beneficios que superan en 20 veces a los de igual período de 2006, gracias a los márgenes en los negocios a granel y la expansión de las ventas.
Ledesma
La diversificación fue una de las claves en el negocio de Ledesma, que este año cumple sus 100 años. En 1908 nació bajo el nombre de Compañía Azucarera Ledesma, pero hoy es un complejo agroindustrial que también provee jarabes, alcohol, papel, cuadernos y frutas, entre otros tantos productos que se suman al azúcar. Es una de las empresas argentinas que conservan a su presidente desde hace más de 30 años: Carlos Pedro Blaquier asumió el 1970, luego de pasar por diferentes funciones ejecutivas dentro de la compañía. Con respecto al look & feel de sus productos, hizo un refreshing de los nombres de acuerdo al crecimiento de sus categorías y, en 2002, transformó el tradicional paquete de azúcar, que ya contaba con 60 años.
Frigorífico La Pompeya
Su marca estrella, Fox, nació en 1899 de la mano de Gaetano Graziosi. Gracias al éxito de las ventas y los premios que obtuvo, el negocio se expandió y se fundó en 1958 el Frigorífico La Pompeya. Como hace más de 100 años, el producto estrella es el jamón crudo tipo "parma" y Fox es el nombre con que todavía comercializan los productos premium. Como dato curioso, vale decir que en la década del '30 la marca llegó a tener su propia tira cómica en el diario La Nación, llamada Las aventuras del Chanchito Fox. Con una facturación superior a los $ 50 millones, la firma de capitales nacionales aplicó una estrategia de integración vertical hacia atrás, sumando la cría de animales y faena propia.
Bodegas Trapiche
Haber sido fundada en 1883 convierte a Trapiche en la bodega más antigua de Mendoza: su historia se remonta a un viñedo llamado El Trapiche, en Godoy Cruz, donde se inició la elaboración de vinos finos a partir de cepajes importados de Chile. De la mano de su fundador, Tiburcio Benegas, fue pionera en la apertura a los mercados del exterior: en 1889 obtuvo su primer premio internacional en Francia. Los cambios de accionistas no lograron opacar su trayectoria ni su reconocimiento como bodega de alta gama. En la década del '70 pasó a manos del grupo Pulenta, que conservó el control hasta que uno de los primos, Luis Alfredo Pulenta, les recompró las acciones a sus parientes. Así, en 2002, Pulenta se las vendió al fondo norteamericano Donaldson Lufkin & Jenrette Merchant Banking (DLJ), que reconvirtió todos sus negocios en el segmento vitivinícola, creando el Grupo Peñaflor.
Bodegas Lavaque
El caso de Bodegas Lavaque es diferente al de otras bodegas: no solo capeó todas las crisis económicas, sino que es conducida por la quinta generación de la familia fundadora. En 1889, Félix Lavaque elaboró en el Cafayate el primer vino de alta calidad de esa región, usando los viñedos que su padre había comenzado a plantar desde 1870. La segunda generación instaló una red de distribución mediante una flota de carros con toneles. En 1930, Gilberto Lavaque, el menor de los hijos, creó Bodegas Lavaque San Rafael de Mendoza. Como empresa de tradición argentina, pasó por todas las crisis económicas del país, aunque su premisa siempre fue aplicar la máxima de que "crisis es oportunidad". Durante el uno a uno, incorporaron la tecnología necesaria para competir en los mercados internacionales.
Hesperidina
La tradicional bebida tiene varios hitos: se cree que fue la primera marca que hizo publicidad en la vía pública, al anunciar durante casi tres meses que estaba llegando "La Hesperidina", un misterio que se resolvió el 24 de diciembre de 1864, cuando en el diario La Tribuna apareció el aviso anunciando el aperitivo a base de cáscaras de naranja amarga. Además, el 27 de octubre de 1864 se convirtió en la Marca Registrada Nº 1. Si bien durante muchos años dejó de comercializarse, fue adquirida y relanzada en junio de 2005 por la compañía Tres Blasones, que ideó para una campaña publicitaria moderna, pero manteniendo el tradicional envase con forma de barril, apuntando a un público de jóvenes de entre 21 y 30 años que sólo la conocen por su renombre.
Licores Peters
La empresa lleva más de 140 años en el país produciendo bebidas espirituosas, aunque su primera brand conocida fue la ginebra Llave. Fundada en 1867 por dos hermanos alemanes que no dejaron descendencia, su actual propietario es el grupo Márquez. Posee una planta industrial en Caseros donde produce más de 75 bebidas, incluyendo licores, vodka, aperitivos, refrescos sin alcohol e, incluso, un energizante para acompañar los tragos. Para mantenerse actuales apelan al marketing directo, con acciones puntuales como la organización de fiestas o el esponsoreo de eventos. El objetivo es empezar a exportar los licores, ya que la única relación actual con el exterior es a través de la venta de alcohol a granel a empresas de Italia y Francia.
Magnasco
Fundada en 1855, se dedica a la elaboración y comercialización de productos derivados de la leche y la explotación agrícola. En la década del '40, el 75% de las exportaciones lácteas del país eran de esta compañía. Netamente familiar, la empresa es dirigida por la cuarta y quinta generación de descendientes de los hermanos italianos Luis, Fortunato y José Magnasco. Luego de 20 años de vender sus productos exclusivamente en el exterior, volvió a estar presente en el mercado local.
Banco Galicia
Un grupo de empresarios españoles lo fundó en 1905 y se convirtió en el primer banco privado argentino, aunque en ese momento su nombre era Banco de Galicia y Buenos Aires. A partir de 1948, pasó a su etapa de crecimiento y desarrollo. Durante décadas, la presidencia estuvo en manos de la familia Escasany. En 1926 la asumió Manuel Escasany y 76 años después se despedía del mismo puesto su nieto Eduardo. El Galicia compitió contra bancos internacionales y, al mismo tiempo, rechazó varios intentos de compra en los '90 y optó por colocar acciones hasta casi superar el 50% de su capital entre inversores, pero manteniendo la mayoría de votos en manos de accionistas locales. Hoy, el 93,6% de sus acciones en circulación son propiedad del Grupo Financiero Galicia, conformada por miembros de las familias Escasany, Ayerza, Braun y la Fundación Banco Galicia.
Quilmes
Otto Peter Bemberg fue el responsable en 1887 de crear la Cervecería y Maltería Quilmes. La primera tirada de cerveza fue en 1890, cuando la fábrica que había construido recibió energía eléctrica. A lo largo de los años, interactuó con los gobiernos de diferente manera: en 1923 se ofreció como garante para que el Estado pudiera emitir deuda en el exterior. Y en los '50 fue expropiada por el gobierno de Juan Domingo Perón. El eslogan que la hizo famosa, "el sabor del encuentro", es de los '80, cuando el consumo de cerveza había disminuido, y sirvió para relanzarla y que volviera a estar vigente. Actualmente, comercializa marcas como Quilmes Cristal, Iguana o Stella Artois, entre otras. Además, distribuye las bebidas de Pepsi, las aguas Glaciar y Nestlé y las bebidas Gatorade y Tropicana. En mayo de 2002, el grupo AmBev adquirió el 37% de la sociedad y completó la operación en 2006, cuando el Grupo Bemberg vendió el total de su participación.
Estrada
La primera editorial argentina nació el 27 de noviembre de 1869 bajo el nombre ngel Estrada y Cía. Sus productos son reconocidos: repuestos Rivadavia, manuales Estrada y cuadernos espiralados Arte son algunos. En 1890, ngel Estrada creó la primera fábrica de papel del país, La Argentina, que mantuvo su producción por 25 años. Hasta 1938 conservó su estructura familiar, pero se lanzó a cotizar en la Bolsa en 1940 y todavía continúa haciéndolo. Para la compañía, el riesgo de que una marca quede vieja se minimiza innovando los productos y adaptando los mensajes: por ejemplo, la brand más antigua, El Nene, fue elegida para lanzar los juegos didácticos. Hoy mantiene una venta anual aproximada de 1,5 millón de unidades y es la industria papelera argentina que más materiales escolares exporta. En 2007, la compañía emprendió un camino de concentración de sus negocios en productos de papelería, por lo que se deshizo de su división editorial, vendida a la estadounidense MacMillan en u$s 11 millones, y de la marca Pelikan, que, a cambio de u$s 5 millones, retornó al portafolio de la malaya Pelikan Internacional Corporation Berthad.
La Nación
Bartolomé Mitre tenía 48 años cuando fundó La Nación, pero ya había sido gobernador de Buenos Aires y presidente. Entre 10 amigos juntó un capital de $ 800 mil y el 4 de enero de 1870 salió la primera entrega del diario, con una tirada de 1.000 ejemplares. Tuvo cinco clausuras entre 1870 y 1901, más la obligación de reducir sus páginas y su tirada. A medida que pasaron los años fue modernizando también su tecnología: incorporó las linotipias en 1901 y la electrónica ingresó en 1980. La dirección del diario siempre estuvo en las manos de algún descendiente de Mitre, incluso hasta ahora con su tataranieto, Bartolomé Mitre, y la otra rama de la generación, los Saguier, encabezados por el presidente del directorio, Julio Saguier.
Grimoldi
En 1895, el inmigrante italiano Alberto Grimoldi abrió una zapatería en Buenos Aires. El negocio familiar tuvo sus épocas de esplendor: en el local de la calle Florida llegó a vender 1.000 pares de zapatos por día. A principio de los '90 incorporó marcas internacionales como Hush Puppies, Kickers o Merrell. Así, en tres años pasó de facturar $ 8 millones a sumar ventas por $ 75 millones. Actualmente, comercializa sus productos a través de dos canales: locales operados por la empresa (cinco cadenas de negocios minoristas que suman 70 comercios) y la red mayorista, que vende a través de comerciantes independientes. Es una de las pocas empresas que, incluso más de 100 años después, aún se mantiene en manos locales.
Alpargatas
Es otra de las brands tradicionales del país. En el año 1850 existían en la Argentina talleres familiares que confeccionaban alpargatas en forma manual. Uno de ellos era el del vasco Juan Etchegaray, que se unió con Douglas Fraser, proveedor de yute y fabricante de máquinas trenzadoras, para mecanizar e industrializar la confección de alpargatas. En 1885 formalizaron la sociedad y Alpargatas comenzó a crecer: a los cinco años expandieron las operaciones a Uruguay y en 1907 a Brasil, donde conformaron Sao Paulo Alpargatas. A lo largo de su historia, la compañía lanzó marcas reconocidas por el consumidor argentino, como Flecha, Pampero y Topper. Si bien la crisis de 2001 la golpeó, pudo renacer gracias a la reestructuración de su deuda. En octubre de 2007 fue adquirida por Camargo Correa, que controla la filial brasileña de Alpargatas. Así, llegó a un acuerdo con un grupo de accionistas comandado por el fondo Newbridge Latin America para adquirir el 34,5% de la firma, en u$s 51,7 millones, más otros u$s 33 millones destinados a adquirir el resto de las acciones, que cotizan en la Bolsa porteña. Además del tradicional calzado, también tiene una división textil especialidad en denim.
Grupo Roggio
Benito Roggio llegó a la Argentina desde Italia en 1889 y se instaló en Córdoba. Trabajó con su padre y su tío hasta que en 1908 se independizó y formó una empresa contratista de obras, centrada en ese momento en la construcción de residencias para familias. La llegada de sus hijos le dio un nuevo impulso a la compañía, que comenzó a desarrollar obras mayores, como iglesias u hospitales. La diversificación llegó en los 70 con construcciones emblemáticas, como los estudios de ATC y el Estadio Mundialista de Córdoba, entre otras. Además, inició la actividad de servicios de limpieza y recolección de residuos a través de la recordada firma Cliba. Finalmente, durante la década de los 90, ganó numerosas licitaciones, como la construcción y concesión de rutas y peajes y la operación integral de la red de subtes y el ferrocarril Urquiza. Así, a tono además con sus operaciones internacionales, en 1995 se consolidó como el holding Roggio, que este año cumple su primer siglo.
Industrias metalúrgicas Pescarmona S.A. (IMPSA)
Hacia 1907, Enrique Pescarmona fundó en Mendoza Talleres Metalúrgicos Pescarmona. La firma fabricaba repuestos de hierro fundido, equipos para la industria vitivinícola y compuertas para canales de irrigación. Durante la década del '40, los negocios se ampliaron y la familia creó Construcciones Metálicas Pescarmona, que emprendió el diseño y construcción de estructuras metálicas y equipos electromecánicos. Finalmente, en 1965, nació Industrias Metalúrgicas Pescarmona S.A. (IMPSA), que diversificó sus actividades hasta llegar a ser uno de los líderes en la industria de generación hidroeléctrica en el país. A más de 100 años de su fundación, IMPSA es uno de los grupos locales con más actividad en todo el mundo. Las producciones metalúrgicas de principios del siglo pasado dieron paso a las soluciones para la industria energética. Esta expansión de sus servicios le abrió las puertas del mercado internacional: posee oficinas y establecimiento industriales en la Argentina, Brasil, Chile, China, Colombia, Ecuador, India, Malasia, Filipinas, Estados Unidos y Venezuela. IMPSA es uno de los principales desarrolladores de proyectos energéticos, principalmente hidroeléctricos, y su presidente, Enrique Pescarmona, es uno de los empresarios más influyentes del país.
Bodega La Rosa
Fundada en 1892 por los hermanos franceses David y Salvador Michel en El Cafayate, Salta, la bodega La Rosa es una de las más antiguas del país. De la unión de uno de sus creadores con la familia Torino nació la marca insignia de la finca: Michel Torino. La bodega estuvo en manos de la familia hasta principios de los '90, cuando fue adquirida por Lávaque y, en 1999, pasó a formar parte del grupo Peñaflor, en una operación cercana a los u$s 15 millones. Con el tiempo, La Rosa amplió su oferta con diferentes varietales y apeló a la tecnología para complementar los métodos tradicionales de producción. Sus vinos son exportados a más de 50 países. En diciembre de 2007, la bodega festejó sus 115 años en la industria del vino con el lanzamiento de una línea premium de edición limitada. Fue una producción de 4.000 botellas cosecha 2006 con la etiqueta CXV Cientoquince que se comercializaron en vinotecas especializadas y restaurantes exclusivos, en donde también se pensó un menú especial para acompañar el vino.
Dellepiane
Nació como una importadora de whisky, gin, té y otros productos de origen británico en 1989 y hoy, a 109 años de su creación, continúa en manos de la cuarta generación de la familia fundadora. En 1909 comenzó con la elaboración propia de bebidas alcohólicas y en las primeras décadas del siglo XX bautizó Tres Plumas a un coñac, marca que luego abarcaría toda su familia de licores. Con el tiempo, la compañía amplió su catálogo con cócteles, vodka, gin y otras bebidas sin alcohol como granadina y jugo de limón. En la actualidad, Dellepiane exporta a América latina, España, Italia y Corea del Sur, y en los últimos años se alineó a la tendencia internacional con la producción de la bebida energizante X4.










