

El ministro de Finanzas, Luis Caputo, admitió ayer que tiene "sensaciones encontradas" respecto a gravar la renta financiera, al asegurar que si bien es un impuesto que está en otros lugares del mundo, en el corto plazo no dará beneficios.
"El tema de la renta financiera lo estamos analizando. Tengo que reconocer que tengo sensaciones encontrada ya que si bien es justo porque está en todo el mundo, no sé si es el mejor momento porque de corto plazo no nos va a dar algún beneficio", analizó.
El funcionario, que participó del CFO Summit organizado por El Cronista y la Revista Apertura, no descartó que el Gobierno vaya a colocar deuda antes de las elecciones, como así tampoco después de octubre, y destacó que "las necesidades financieras del año que viene van a ser menores".
Aseguró además que el Gobierno trabaja para lograr la aprobación de la Ley de Mercado de Capitales después de los comicios, cuyo fin es "conectar el capital con los proyectos", pero también garantizarle al inversor "que hay un marco jurídico que lo protege". En esa línea, aseguró que "se va a insistir mucho en su aprobación porque es una ley clave para tener un desarrollo sostenido, equilibrado y a largo plazo", ya que "no hay ningún país desarrollado sin un mercado de capitales desarrollado".
A su vez, Caputo reconoció que los resultados de las PASO, que fueron beneficiosos para Cambiemos, "dieron tranquilidad a los inversores y al propio Gobierno".
Por otro lado, el ministro se refirió al riesgo país, destacó que bajó de 1400 a 375 unidades y sostuvo que seguirá bajando porque "se van a seguir cumpliendo con las metas fiscales". En este sentido subrayó: "Las necesidades financieras serán menores el próximo año y nuestro objetivo es que a partir del año 2020 la deuda empiece a decrecer".













