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Los bonos argentinos vuelven a iniciar la semana con fuertes subas. El rally se extiende y la deuda alcanza máximos de mayo de 2022.

El factor global ayuda a la deuda local, sin embargo, el trade electoral es el que más empuja a los bonos.

El mercado sigue especulando con un cambio de Gobierno que impacta tanto en bonos como en acciones.

Bonos con ganancias

Todos los tramos de la deuda argentina abren con subas el martes. El Global 2029 sube 2,3%, al igual que el Global 2030 que avanza 2,35 por ciento.

En el tramo medio, las ganancias son más moderadas, con subas de 1,8% en el Global 2035 y de 1,3% en el Global 2038. Finalmente, los Globales más largos muestran subas de 1,7% en el Global 2041 y de 1,4% en el Global 2046.

Con las ganancias recientes, los bonos suben entre 3% y 5,5% en los últimos días, a la vez que se registran ganancias de más de 11% en el último mes.

Los factores detrás del rally

Los analistas de Portfolio Personal Inversiones (PPI) señalaron que, a la hora de explicar el rally actual, no se puede dejar de pasar por alto el escenario internacional.

"Las buenas noticias respecto a los precios en Estados Unidos fortalecieron la posibilidad de que la Fed afloje las riendas de su política monetaria contractiva. Así, los índices emergentes presentaron también interesantes verdes en las últimas jornadas", dijeron.

Con las ganancias hasta los valores actuales, los bonos muestran avances de entre el 50% al 59% en los distintos tramos de la curva desde octubre hasta la actualidad.

En el mismo periodo, los bonos de mercados emergentes subieron más del 9 por ciento.

En ese sentido, desde PPI agregaron que durante la semana pasada los mercados emergentes percibieron flujos entrantes por alrededor de u$s 1400 millones, lo cual contrasta frente a la salida por u$s 270 millones de la semana previa.

Si bien el factor global es importante, también hay variables locales que permiten entender el avance actual de los bonos.

Es decir, el contexto global, con tasas a la baja permite que la deuda mejore, aunque también existieron factores domésticos que habilitaron el rebote.

"Nuestro monitoreo de la serie de precios de los bonos argentinos ajustados por la tendencia emergente y el beta de los bonos reflejó una nueva compresión del riesgo idiosincrático", remarcaron desde PPI.

Entre los factores locales, el trade electoral viene siendo gran protagonista dentro del rebote, combinado con otros argumentos que explican la suba.

Entre los otros factores que explicaron el rally de las últimas semanas en los bonos se destaca la compra de la deuda en dólares para cobertura cambiaria, la mayor demanda de renta fija local para aprovechar los pagos de cupones y las compras de fin de año, con la intención de mostrar la foto de diciembre para la presentación de Bienes Personales.

Sim embargo, el rally continuó y se extendió a lo largo de los primeros días del 2023.

Los analistas de Grupo IEB agregaron que vienen siendo semanas positivas para la deuda argentina, que en buena medida acompañan los rendimientos de los activos a nivel mundial.

Sin embargo, remarcaron que el dato de inflación de la semana pasada volvió a indicar una desaceleración en términos anuales, lo que podría ofrecer alivio en el corto plazo para los activos de renta.

"Bajando a tierra nuestro análisis realizado en la sección economía, un escenario más constructivo puede dar lugar a valores más atractivos de los bonos argentinos", dijeron.

¿Potencial alcista?

En una visión de mediano plazo, los analistas muestran consenso de que la renta fija argentina sigue encontrando potencial alcista.

En lo que no hay consenso generalizado es en cuanto a qué bono podría tener mayor suba hacia adelante.

Los analistas de Banco Mariva advierten que la tendencia a corto plazo de los bonos soberanos se podría ver afectada principalmente por el sentimiento del mercado en el extranjero.

Sin embargo, consideran que los factores idiosincrásicos tienen un ritmo lento e impulsan su recomendación de compra a mediano plazo.

"Por ahora vemos oportunidades en valores relativos en la curva y una oportunidad de compra direccional, pero a medio y largo plazo, es decir más allá de las elecciones presidenciales de 2023. Los riesgos crediticios que recaen sobre los Globales 2029, 2030 y 2038 lucen excesivos en comparación con la curva", dijeron.

En ese sentido, desde Banco Mariva remarcaron que esos bonos se ubican en una mejor posición relativa contra los demás bonos dentro de la curva.

Por su parte, Juan Manuel Franco, economista jefe de Grupo SBS, coincide en que existen riesgos de corto plazo provenientes del contexto global, aunque considera que la tendencia de mediano plazo se mantiene.

"Creemos que tanto este rally como el mayor tightening monetario de la Fed a nivel mundial y su efecto sobre la renta fija podría limitar en el corto plazo el upside de estos papeles. No obstante, esto, reiteramos que seguimos siendo constructivos en Globales a mediano plazo, incluso luego del rally", dijo.

En ese sentido, Franco explicó que los ejercicios teóricos que aplican desde Grupo SBS apuntan a que, incluso en escenarios de estrés hacia 2024, los retornos totales en dólares de los Globales pueden superar los tres dígitos.

"Nuestros top picks son el Global 2035 (GD35) y el Global 2041 (GD41). Dicho esto, vemos espacio para trades de corto plazo dentro de la curva pasando parte de las posiciones en otros Globales hacia el Global 2030 (GD30)", comentó.

Finalmente, Javier Casabal, estratega de renta fija de Adcap Grupo Financiero, le ve buen potencial a la deuda en el mediano plazo a causa de mejores expectativas inflacionarias y el trade electoral.

En ese sentido, centra su atención en la deuda de mayor plazo.

"Si se disipa la preocupación externa respecto a la inflación, y a nivel local, seguimos avanzando hacia el escenario de candidatos moderados que se reconfiguró a partir de la salida de la oferta electoral de Cristina Fernández de Kirchner, los bonos soberanos en dólares pueden volver rápidamente a los niveles vistos entre noviembre de 2021. En ese caso, los niveles actuales pueden ser más un piso que un techo", dijo Casabal.