Hace tres meses que Argentina entró en cesación de pagos y si bien se vieron caídas de hasta 18% en la renta fija durante agosto, los bonos lograron recuperar gran parte de lo perdido. Según explican en la City porteña, los inversores están enfocados en que en enero, ya sin la vigencia de la cláusula Rufo, el gobierno acordará con los fondos buitres, lo que le permitiría al país salir del default y conseguir financiamiento internacional.

Mientras que al Discount le restan recuperar 8,85% del 18% que había retrocedido, al Par le queda tan sólo el 3,8%. En cuanto a los bonos de corto plazo, aunque no fueron muy afectados por el default, todavía no volvieron a los precios de fines de julio. Para hacerlo el Bonar X debería saltar un 9,9% y el Boden 2015 ganar 5,7%.

De todas formas, cabe aclara que desde hace semanas que se especula con que algunos fondos estuvieron comprando bonos Par para acelerarlos, es decir, para adelantar el cobro de la deuda, una demanda que podría ser la causa de la recuperación que se vio en este papel.
Por otro lado, dado que para percibir el repunte genuino de los títulos públicos es necesario que no sufran la fluctuación del tipo de cambio, se toman los papeles que cotizan en dólares en la plaza estadounidense.

Ayer el Discount avanzó 1,1% y el Par subió el 0,9%. En tanto, el Bonar X y el Boden 2015 cedieron levemente, un 0,5% y un 0,4% respectivamente.

"Hace tres meses del default pero faltan dos meses para enero", resumió el analista de Mayoral Rubén Pasquali. Cada día que pasa es un día menos para que llegue a su fin la cláusula Rufo, agregó.

Lo mismo subrayó el director de Portfolio Personal Augusto Posleman. El especialista coincidió en que hay "un optimismo renovado sobre posibles negociaciones con los holdouts" desde que trascendió que el presidente del Banco Central (BCRA), Alejandro Vanoli, estaría retomando el contacto en Nueva York.

Para Pasquali, el mercado se asienta en tres pilares: el vencimiento de la Rufo, la apreciación del dólar y la proximidad de las elecciones presidenciales. Pero aclaró que dependerá del gobierno acordar con los holdouts, que el dólar sigue "pisado" por los controles oficiales, y que los años electorales generan mucha volatilidad.

Por su parte, Posleman dice ser menos optimista con respecto al pago a los fondos buitres, lo que no quita que vea al Boden 2015 como una buena inversión. "Rinde 15% y aunque se hiciera un canje seguirá siendo muy atractivo", aseguró.