El cepo cambiario, más que haber disuadido, parece haber fomentado el gasto de los turistas argentinos al exterior. Aún con las trabas para el acceso al mercado cambiario y el recargo del 15% que sostuvo la AFIP a los consumos en el exterior hasta ese mes, los argentinos revivieron el deme dos en los destinos turísticos del exterior y gastaron u$s 103 millones más de lo que ingresó por turismo receptivo.
Las cifras, publicadas con retraso a través de un adelanto de la Encuesta de Turismo Internacional que elabora el Indec, muestran los motivos que impulsaron a la AFIP a aumentar a mediados de marzo el recargo a los gastos hechos en el exterior pagados con plásticos del 15% al 20%, y a incluir los pagos en efectivo dentro de los consumos castigados con ese plus.
Los argentinos en el exterior pagaron un dólar subsidiado, en comparación con el precio al que se ofrece la divisa en el mercado informal y la virtual imposibilidad de acceder a la misma en el mercado formal, y no dieron descanso a la billetera.
El recargo del 15% a los gastos hechos con tarjeta en el exterior parece haber sido poco disuasivo. Mientras que en febrero el dólar blue promedió un precio de $ 7,86 en el mercado informal, el dólar turista implícito en las compras hechas con tarjeta castigadas por el recargo promedió apenas $ 5,77. Un dólar barato.
Durante febrero, los argentinos que viajaron al exterior gastaron algo más de u$s 311 millones, mientras que los visitantes extranjeros que llegaron al país ingresaron algo menos de u$s 209 millones en el mismo mes. El déficit resultante, de casi u$s 103 millones, es el más alto de la serie que publicó el Indec ayer, y que abarca los últimos 14 meses vividos bajo cepo cambiario. Es un déficit 176% mayor al que arrojó la balanza turística en el mismo mes del año pasado.
La suba en el gasto hecho por turistas no se vió afectada por la caída en la salida de viajeros. Mientras que en febrero de 2012 viajaron al exterior 267.861 personas, en el mismo mes de este año fueron 266.272 los que salieron del país. A pesar de la leve caída en el número, el gasto creció en más de u$s 16 millones.
El fuerte crecimiento del déficit turístico, sin embargo, se explica más por la caída en el ingreso de divisas por parte de turistas extranjeros: cayó casi u$s 50 millones entre febrero y mismo mes del año anterior.
En todo 2012, el déficit turístico fue de u$s 89 millones, mientras que en enero de este año el flujo fue superavitario, con ingresos u$s 30 millones mayores a los egresos.
