La desaceleración de la economía china podría poner fin a la prolongada alza de los precios del cobre, que también se combina con la mayor oferta del metal rojo.

Quizás más que cualquier otra materia prima, el cobre es emblemático del superciclo de precios que se extendió durante una década impulsado por el espectacular crecimiento de China. Incluso, mientras otros metales se debilitaron este año, los valores del cobre siguen altos.

Pero un creciente número de analistas y comercializadoras creen que la década de escasez de ese metal estaría llegando a su fin. Este parece ser un punto de inflexión para el cobre, comentó David Lilley, co-fundador de Red Kite, uno de los hedge fund líderes del mercado de metales. El mayor consumidor está tambaleando, y las mineras están empezando a elevar la producción.

International Copper Study Group espera un exceso de oferta de 458.000 toneladas el próximo año, el mayor superávit desde que comenzó a llevar registro en 2001.

Si la tendencia se mantiene, los precios podrían caer más, lo que podrán fin l período de ganancias estelares que disfrutaron mineras como Freeport-McMoRan y Antofagasta y afectará las economías de grandes productores como Chile y Perú.

La desaceleración de China, que representa 40% de la demanda global, es un factor importante. Pero el cambio más pronunciado en el mercado proviene del incremento en la oferta. La aparente incapacidad de la industria de aumentar la producción mantuvo los precios altos durante toda la última década. Pero las empresas ahora están respondiendo. La producción de Chile, el mayor proveedor mundial, aumentó 7,8% anual en los tres meses a agosto. Y el ICSG proyecta que la oferta se incrementará 6,4% el próximo año, el mayor avance desde mediados de los 90.

No hay duda de que la oferta de cobre está en alza, aseguró Mark Hansen, director global de metales en Noble Group, una comercializadora con casa matriz en Hong Kong. Sería razonable espera un crecimiento de 5% para el año próximo.

Las expectativas de una mayor producción en las minas se vieron reflejadas en el mercado físico para el mineral de cobre, conocido como concentrados. Las fundidoras probablemente en 2013 puedan cobrar a las mineras contratos anuales más caros, comentó Peter Willbrandt, CEO de Aurubis, la fundidora de cobre más grande de Europa.

Pasamos cinco años difíciles en la industria de la fundición. Pero ahora cada vez son más las minas que entran en funcionamiento y a las ya existentes les está yendo bien, concluyó.