La llegada de la segunda ola de coronavirus a la Argentina es inminente. El aumento de casos y el arribo de nuevas cepas del virus desde el exterior provocan que se hayan encendido las alarmas del gobierno nacional y también de las administraciones locales.

La provincia de La Rioja es la primera que toma una medida restrictiva con un fuerte impacto, ya que prohibió la circulación de personas entre la 1 y las 6 horas. Estará exceptuado, como sucedía en las primeras etapas de la pandemia, el personal esencial.

El gobierno de Ricardo Quintela tomó varias medidas tendientes al aumento de restricciones con el objetivo que disminuya la circulación de personas. El sector gastronómico deberá cerrar sus puertas a la 1 de la mañana.

Tampoco se podrán vender bebidas alcohólicas, a excepción justamente de bares y restaurantes. Esta medida tendrá vigencia desde el inicio del próximo viernes hasta las 8 de la mañana del lunes de la semana que viene.

Por otro lado, se suspenderán actividades deportivas, salvo las que sean parte de torneos nacionales o internacionales, según informaron desde el gobierno provincial.

En esta línea, también se interrumpirán todos los eventos que impliquen concentración de personas, ya sean organizados de forma pública o privada. Además, las reuniones sociales no podrán tener más de 15 personas.

Quienes quieran ingresar a La Rioja desde otras provincias argentinas deberán someterse a un "control preventivo de síntomas de covid-19". En el caso de que la persona tenga algún síntoma compatible, deberá realizarse un test y permanecer aislada.

En cambio, para quienes lleguen desde el exterior, será necesario realizar un test PCR y permanecer en aislamiento durante una semana. Luego de ese período deberán tener un test con resultado negativo para concluir el aislamiento.

Finalmente, en línea con lo planteado por las autoridades de Nación, la administración pública provincial estará eximida de concurrir a sus lugares de trabajo. Deberán continuar con sus tareas de forma remota, desde sus hogares.