

Con las PASO como prueba superada, el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, se convirtió en el primer candidato a presidente en exponer ante el Consejo Interamericano de Comercio y Producción (Cicyp). Eduardo Eurnekian, actual presidente de la entidad, le dio un buen pie en su discurso de recepción. El titular de la Corporación América dijo que se vienen "tiempos de cambiar improvisación por previsibilidad". Su invitado no dejó pasar la ocasión para darle una vuelta de rosca al controversial discurso que hizo tras la elección porteña, en el que planteó varios ejemplos de continuidad de algunas políticas kirchneristas, como la estatización de Aerolíneas Argentinas. Al ser consultado sobre qué haría con funcionarios clave designados por Cristina Kirchner, dejó en claro que hay rubros en los que aspira a un cambio total: "Espero que algunos tengan la dignidad de renunciar. No creo que el presidente del BCRA reúna los requisitos para estar en ese cargo, más allá de ser un militante. Lo mismo pasa con la procuradora Gils Carbó. Esperamos que eso suceda, sino vamos a recurrir a la opinión pública y a la Justicia para poner a gente idónea y responsable", sentenció.
La reacción fue inmediata. Buena parte de los 430 asistentes (fue el almuerzo más numeroso de los realizados hasta ahora) respondieron con un aplauso cerrado. El dato es que no fue el único: hubo otros cuando reiteró que no habrá más restricciones a las exportaciones regionales y cuando consignó que para avanzar en la lucha contra el narcotráfico hay que desbaratar los lazos de corrupción con algunos sectores de la política y la Justicia.
Entre los que lo escuchaban había una importante cantidad de dirigentes empresarios, economistas y diplomáticos. De hecho, una de las presencias más inusuales fue la de Noah Mamet, el embajador de Estados Unidos en Buenos Aires, quien debutó ayer en los almuerzos del Cicyp. También participó Noriteru Fukushima, el representante del gobierno de Japón, que aprovechó para intercambiar algunas palabras a solas con Macri y Eurnekian.
En la mesa principal estuvieron también los jefes de las restantes cámaras que integran el Cicyp, como Héctor Méndez (UIA), Carlos de la Vega (CAC), Jorge Brito (Adeba), Juan Chediack (Cámara de la Construcción), Adelmo Gabbi (Bolsa de Comercio) y Luis Etchevehere (Sociedad Rural). También fue de la partida Adrián Werthein (grupo Telecom). La entidad ya tiene previsto recibir a Daniel Scioli el 8 de octubre, y hasta ahora no tiene agendada una reunión con Sergio Massa.
El líder del PRO hizo una presentación breve antes del almuerzo, en la que aludió a la dramática situación de los inundados en la provincia de Buenos Aires. "No nos vamos a resignar a un país en el que se habla mucho del Estado, pero que está cada vez más ausente. El discurso choca con la realidad si no lo llenamos de contenido. No es lo mismo gastar que invertir", señaló. "Es cierto que el cambio climático impactó, pero lo real es que ha venido para quedarse y tenemos que prepararnos para esto", agregó. La primera pregunta del público fue al tema que nutrió todas las conversaciones previas: qué espacio hay para un acuerdo con Sergio Massa. La respuesta ya estaba ensayada: "Más de 60% de los argentinos estamos buscando una alternativa al gobierno. Y nosotros somos un vehículo para ese cambio". El líder del PRO reconoció que dialogan con todos, con UNA, Stolbizer y hasta con la izquierda. Pero no dio pistas de un acuerdo antes de la primera vuelta.
Macri, como era de esperar, habló del cepo al dólar. En el atril, no insistió con levantarlo el 10 de diciembre. Ante la prensa, reafirmó el plazo pero de manera menos tajante: dijo que los mercados se sobregiran y que no tiene una certeza total sobre el verdadero nivel de reservas. Pero también ratificó que aspira a un mercado de cambios libre, sin que ello implique habilitar una devaluación. Señaló que cuando se conozca que "triunfó el cambio", en octubre, puede incubarse un ingreso de divisas que aprecie el peso. "No creo en una devaluación artificial. La madre del atraso cambiario es la inflación, que esperamos bajar a un dígito en dos años".
Tampoco fue contundente al evaluar la necesidad de un ajuste fiscal. "Aerolíneas es una muestra de despilfarro. La salida es expandir la economía".














