

En la provincia de Buenos Aires todo el año fue y será electoral: empezó en marzo con el debate por el fin de las PASO, continuó con el cierre de alianzas y de listas de estas dos últimas semanas y tendrá sus dos eslabones finales -campañas mediante- en septiembre y octubre cuando millones de ciudadanos participen de los comicios para renovar las representaciones deliberativas municipales y legislativas, tanto bonaerenses como nacionales.
Ahora, mientras siguen apareciendo detalles sobre el cierre de las listas, comenzó el proselitismo puro y duro, con una pelea del fondo que parece poner como contendientes al gobernador Axel Kicillof por un lado y al presidente Javier Milei y su entorno, por el otro.
Desde el martes, el mandatario bonaerense se lanzó a la campaña con actos y declaraciones, siempre con discursos apuntados al impacto de las políticas nacionales en la provincia. "La Argentina atraviesa una política económica que no piensa en nuestra gente", dijo en un acto en Berazategui, acompañado por Verónica Magario y Mariano Cascallares, los dos primeros candidatos de Fuerza Patria en la Tercera Sección Electoral.
La nacionalización de la campaña parece ser un efecto buscado por ambos frentes, al menos en estas primeras horas. El primer cruce fue por la cesantía de 24 policías bonaerenses que fueron denunciados ante la Justicia Federal por urdir lo que desde el Gobierno provincial califican de "conspiración" que estaría dirigida por el comisario retirado y candidato libertario Maximiliano Bondarenko.
El Cronistapudo dialogar con fuentes que acceden al expediente y que relataron que la situación se inició con una denuncia anónima y "muy dateada" recibida en Asuntos Internos. "En general, se examinan con mucha atención porque esos casos podrían responder a problemas entre efectivos", se explicó.
En la denuncia que obra en la Justicia federal se adjuntaron pruebas documentales que van desde conversaciones de WhatsApp hasta "papers" con información que estaban construyendo los supuestos conspirados. Desde la Provincia entienden que el objetivo de los uniformados era doble: entregar información sensible a la ministra de Seguridad Nacional, Patricia Bullrich, y provocar una purga de mandos medios para ocupar lugares.

Aunque se sostiene que la figura de Bondarenko está como "director de la maniobra" desde afuera, se aclaró que la purga no se debe a la militancia política del excomisario, sino a la ilegalidad de las acciones cometidas: "Hay semiplena prueba de que hay delito, de una conspiración interna", se explicó.
La ministra Bullrich salió al cruce del gobernador y advirtió que se cesantea a 24 policías "solo porque cree que apoyan a Maximiliano Bondarenko". "Pura persecución política. No echó a los que atacaron TN. No echó a los que agredieron a Espert. Pero sí a quienes ponen el cuerpo todos los días para cuidar a los ciudadanos que viven en la provincia de Buenos Aires. Una locura total", señaló.
En horas de la tarde, Bullrich recibió a Bondarenko y, además de reiterar sus críticas al gobernador lo tildó de "inútil" que "odia a la policía". "Ellos no son capaces de poner a un policía en las listas", disparó.
El expolicía candidato, por su parte, dijo que se había reunido con sus compañeros a comer un asado "da la casualidad de que, justamente, fue una semana antes" de que lo nombran "candidato"
"Es el mejor ejemplo de lo que hace el gobernador con la policía en PBA, que hace años que es una cacería de brujas", dijo.
Mientras tanto, en la conferencia de prensa de este mediodía, el vocero Manuel Adorni mostró a sus espaldas un contador con una cifra que iba creciendo y que, según dijo, representa la deuda del gobierno de la Provincia con los hospitales nacionales.
Para la Nación, la deuda es de $400 mil millones: "Equivale al doble del presupuesto del Hospital Garrahan", señaló el portavoz. Hace pocas horas, el ministro de Salud provincial, Nicolás Kreplak, en declaraciones periodísticas, afirmó que este año se "habían facturado 1.300 millones y se han pagado 1.000, y el resto estaba en cola de pago".
Las últimas "perlas" del cierre
Este debate se da mientras la política sigue haciendo el inventario de ganadores y perdedores de las listas en la provincia. Si bien el cierre del pasado fin de semana fue tumultuoso para prácticamente todas las alianzas políticas, las luces se las llevó el peronismo.
Aunque el PJ ha sabido cerrar nóminas electorales a lo largo de siete décadas -algunas veces de manera violenta- hoy no existe nadie que haya participado en las negociaciones que pueda decir que todo fue "normal".
"Fue quizás el cierre más difícil de la historia de la Provincia", llegó a arriesgar un armador que estuvo en las deliberaciones finales. El riesgo de ruptura fue muy grande cerca de las 10 de la noche del sábado cuando desde el kicillofismo se pidió armar listas de emergencia que, en algunos casos, fueron entregadas a la Justicia electoral con el sello "Partido del Trabajo y la Equidad"(ParTE).

Esas nóminas, que aún se pueden encontrar en Internet, por ejemplo, muestran a Gabriel Katopodis como candidato a la Primera Sección electoral acompañado por Victoria Belloni y no por Malena Galmarini, como sucedió, finalmente, en la de Fuerza Patria.
La situación de boletas con candidatos en "espejo" pervivió durante todo el fin de semana, incluso después de que se sellara la paz, lo que reavivó los desencuentros entre los sectores. El dato de color es que ParTE fue creado para sostener a la figura de Alberto Fernández durante sus años de pelea con el Kirchnerismo.
Ahora llega para el peronismo la etapa de hacer una campaña con una estación intermedia que es en septiembre y con destino final a octubre. Habrá que ver cuántos actos conjuntos se darán. Hace pocas horas Kicillof visitó el territorio de uno de los históricos intendentes peronistas, Juan José Mussi, quien confirmó que será candidato testimonial, es decir, que no asumirá para ser concejal en su distrito, como era previsible.
Los intendentes que responden al gobernador encabezan las listas y difícilmente asuman. Resta saber que pasará, entre otros, con Magario o con el ministro Katopodis. Lo que es claro es que una de las diferencias entre los sectores fue el uso de esa estrategia. En La Cámpora aseguran que quienes son candidatos por esa fuerza, asumirán. Una de ellas será la jefa comunal quilmeña, Mayra Mendoza, quien dejará el control del distrito en manos Eva Mieri, la concejal que se encuentra procesada por el ataque a la casa del diputado José Luis Espert.

Mientras tanto, del otro lado de la vereda, el intendente marplatense Guillermo Montenegro anunció que él también asumirá el 11 de diciembre en La Plata. Lo propio hará el mandatario de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, que dejará la conducción de ese distrito en manos de Rodrigo 'Roco' Aybar, quien se desempeña como subsecretario de Vivienda en el Ministerio de Economía.
Finalmente, se conoció que actuales legisladores, impedidos de ser reelectos, buscarán un lugar en la Cámara vecina a través de un atajo legal: en la actualidad se establece que pueden ser reelectos una sola vez consecutiva en el mismo cargo, pero no dice nada sobre pasar de senador a diputado o viceversa. Entre ellos están Luis Vivona del PJ y Matías Ranzini del PRO.













