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El Gobierno confirmó hoy que este miércoles entregará formalmente una invitación especial al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, para que se sume a la cumbre de jefes de Estado de América del Sur y el Caribe (CELAC) que se realizará en Buenos Aires entre el 24 y 25 de enero.
El embajador argentino en Washington, Jorge Argüello, confirmó a El Cronista que ya está la decisión tomada en el gobierno argentino para emitir un gesto de buena voluntad a los Estados Unidos y convocar así a Biden a la reunión de presidentes de la CELAC.
La carta formal de invitación, que llevará la firma de Alberto Fernández, será remitida en los próximos días al Departamento de Estado por parte del embajador Argüello aunque no hay certezas de que Biden acepte el convite.
En la diplomacia norteamericana deslizaron hoy a El Cronista que no sería lógico que Biden forme parte de una cumbre de jefes de Estado en donde se sentarán en la misma mesa los presidentes de Cuba, Nicaragua y Venezuela, Miguel Díaz-Canel, Daniel Ortega y Nicolás Maduro, objetados duramente por Washington en su legitimidad. Aunque el presidente de Estados Unidos no dijo nada al respecto hasta ahora.
Además, Biden no convocó a estos presidentes cuando organizó la Cumbre de las Américas en Los Ángeles y mantiene un duro cuestionamiento por la violación a los derechos humanos en Venezuela, Nicaragua y Cuba.

DIPLOMACIA PENDULAR
La decisión de la Argentina de invitar a Biden forma parte de la "diplomacia pendular" que tiene la Casa Rosada y la Cancillería actualmente. Por un lado, busca el apoyo de Washington para los grandes trazos de relacionamiento con los organismos financieros internacionales aunque mantiene su apego con países cuestionados desde el punto de vista democrático como Venezuela, Cuba, Nicaragua y China.
Esta diplomacia a dos puntas se ve también con la invitación que harán a Biden para estar en la cumbre de la CELAC y al mismo tiempo entablar diálogo con Rusia como lo hizo el canciller Santiago Cafiero la semana pasada con su par ruso, Lavrov.
En el Gobierno creen que el gesto de invitar a Biden también sería una forma de forzar una definición de Estados Unidos a la región y al mismo tiempo darle a Alberto Fernández un protagonismo en la cumbre de la CELAC ahora que competirá cartel en los foros internacionales con el presidente de Brasil, Lula Da Silva.

A la vez, la relación de Biden con Alberto Fernández es "estrictamente formal" ya que no hubo hasta ahora oportunidad de avanzar con la invitación que le hizo el presidente de Estados Unidos a Washington el año pasado y que luego se tuvo que cancelar porque el mandatario norteamericano había contraído COVID.














