

Tras las declaraciones del vocero presidencial Manuel Adorni vía X, a través del Boletín Oficial el Gobierno confirmó que eliminará las retenciones para todos los granos hasta el 31 de octubre "con el objetivo de generar mayor oferta de dólares durante este período", marcado por la presión electoral.
En las últimas rondas, pese a que el BCRA desembolsó más de u$s 1100 millones -luego de que el dólar toque el techo de la banda ($ 1475,50 en el mayorista), el viernes la cotización oficial cerró cerca de los $1515.
A través del Decreto 682/2025 que lleva la firma de Javier Milei se estableció fijar en cero por ciento la alícuota del Derecho de Exportación (D.E.) para las mercaderías comprendidas en las posiciones arancelarias de la nomenclatura común del Mercosur que se consignan en el ANEXO".
Durante la tarde se confirmó que el beneficio alcanzará a la carne bovina y aviar, con menor impacto en exportaciones y recaudación pero mayor incidencia en precios en el mercado interno. Como referencia, desde el sector cárnico indicaron que en agosto las ventas al exterior alcanzaron a u$s 393,5 millones.
El incentivo a la liquidación del campo, estará en vigencia hasta el 31 de octubre de 2025, inclusive o "hasta la finalización del día en que se alcance la suma de registraciones de Declaraciones Juradas de Venta al Exterior (DJVE) por un importe equivalente a u$s 7000 millones", señala el texto oficial.
"Lo que ocurra primero", agrega el documento explicando la expectativa de máxima del gobierno en materia de atesoramiento de dólares.
Según datos del sector privado, la disponibilidad supera este monto ya que sólo en oleaginosa se estiman entre 14 y 15 millones de toneladas de soja por vender, que son equivalentes a u$s 5600/6000 millones, más 12 Mt de la campaña anterior que suman u$s 2400 millones.
El analista de mercados agrícolas y consultor en agronegocios Pablo Adreani, proyectó que la cantidad de producto por vender representa u$s 10.800 millones: u$s 2600 millones de maíz (13 Mt) y u$s 8200 millones de soja (20 Mt).

Si bien la medida representa alivio para frenar el salto del dólar antes y luego de las elecciones del octubre, los analistas advierten por los efectos nocivos de esta decisión que "no genera nuevos dólares" sino un anticipo con efecto a futuro.
Además, otro punto en debate es la propia compra de dólares que se activará al incentivar la liquidación de exportaciones; se espera que el récord de ventas al exterior de septiembre venga acompañado por la compra récord de divisa internacional, frente al riesgo de devaluación pos-elecciones.
A la par, el Gobierno "dilapida" la meta fiscal por el impacto negativo en la recaudación a partir de septiembre coinciden los tributaristas.
De cara al último cuatrimestre del año, la rebaja sobre la oleaginosa representa resignar masa fiscal lo que anticipa "más ajuste", alertó Javier Preciado Patiño, ex secretario de Mercados Agropecuarios.
"La baja de retenciones al 0% es, sin dudas, una medida positiva para el sector", indicó Antonella Semadeni, economista de FADA y marcó una mejora de los márgenes en 75 dólares por tonelada de soja y casi 20 dólares por tonelada de maíz.
Sin embargo, aclaró que "no genera nuevos dólares, sino que adelanta la liquidación" con un costo fiscal que ronda el 0,2% del PBI
Reacción y diálogo abierto
"Apoyamos toda medida que implique eliminar las retenciones aunque sean temporales. Falta ver los detalles de la forma de operar y cuando se hará operativo", expresó Gustavo Idígoras titular de la Cámara de la Industria Aceitera (CIARA-CEC).
El ministro Luis Caputo y su equipo recibieron esta mañana a CIARA-CEC, a fin de interiorizarlos en el régimen que salió publicado en el Boletín Oficial de hoy.
"La reunión se dio en un marco de total cordialidad y se revisaron los aspectos técnicos para su implementación en los próximos días. CIARA-CEC colaborará en su pronta implementación", se informó este lunes.
En cambio, desde la Federación Agraria (FA) alertaron por la improvisación del Gobierno nacional al implementar una medida de carácter "transitorio" que actúa de "parche".
En ese sentido, Andrea Sarnari, titular de FA, advirtió que la mayoría de los productores ya liquidó sus exportaciones y cuestionó que "se beneficia a los grandes jugadores del sector, los exportadores" que tienen espalda para guardar los granos, a diferencia de los productores.
Esta medida, además, representa un "cimbronazo" para sectores que consumen granos en el mercado local como insumo ya que el precio se empalma con el de exportación, dijo Sarnari y apuntó a la cadena de la carne y lácteos.
El campo ya había sido beneficiado con una reducción de retenciones del 20% para la cadena de granos y del 26% para la cárnica, en junio.
En febrero, Caputo había implementado una rebaja temporal de DEX hasta junio; la medida que sirvió para adelantar la venta de soja en el primer semestre, anticipó una sequía de dólares en la segunda parte del año.
A través del Decreto 526, en julio, se dispuso que las alícuotas de maíz y sorgo bajaban del 12% al 9,5%, mientras que para el complejo girasol los derechos de exportación quedaban en 5,5% para el grano (frente al 7% anterior) y en 4% para sus subproductos.
En el caso de la soja, la tasa sobre el grano pasaba del 33% al 26% y la de los derivados, del 31% al 24,5%. En tanto, el trigo y la cebada mantenían una alícuota del 9,5%.













