Rachel Reeves, ministra de Finanzas británica, presentó unos días atrás su presupuesto para nuestro gobierno, y quiero resaltar tres puntos sobre cómo el Reino Unido está mejorando su oferta para los negocios y la inversión internacionales.

En primer lugar, el crecimiento sigue siendo nuestra principal misión. Desde que asumió el cargo, el actual gobierno británico ha incrementado la inversión de capital en más de £120.000 millones en infraestructura, innovación y energía verde, propiciando las condiciones para que las industrias clave prosperen.

Este presupuesto confirmó la inversión pública en su nivel sostenido más alto en cuatro décadas, lo que significa que los inversores pueden tener confianza en la economía del Reino Unido a largo plazo.

Además, establece los siguientes pasos para fortalecer nuestra infraestructura, con el fin de impulsar el crecimiento y la productividad. Esto contempla la ubicación de los primeros reactores nucleares modulares pequeños del Reino Unido; la financiación para un nuevo cruce en el río Támesis, y nuevas zonas de crecimiento de Inteligencia Artificial que se extienden por todo el país.

El presupuesto se basa en compromisos anteriores, como la ampliación del aeropuerto de Heathrow, la central nuclear Sizewell C y mejoras en la infraestructura de transporte, así como en reformas regulatorias y de planificación para eliminar barreras a los acuerdos de inversión y comercio con socios principales.

Se trata de planes a largo plazo para construir una economía más fuerte y segura.

En segundo lugar, no pediremos préstamos más allá de nuestras posibilidades. Una ola de préstamos sin financiación es mala para la estabilidad, los negocios y la inversión.

Al tener un endeudamiento menor a cualquier otro país del G7 en lo que resta de esta década, nuestra ministra de Finanzas encamina a nuestro país para tener el mayor superávit presupuestario en 20 años, fortaleciendo nuestra capacidad de aprovechar al máximo las oportunidades de crecimiento ahora y en el futuro.

Al mismo tiempo, el presupuesto prevé directamente una reducción del 0,4 % de la inflación en 2026/27, para que el Reino Unido se alinee con sus pares mundiales hasta 2026 y se acerque al tipo objetivo del Banco de Inglaterra del 2%. Esto ayudará al Banco a seguir recortando los tipos de interés y a estimular la inversión.

Como resultado de este presupuesto, la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (organismo independiente de control fiscal del Reino Unido) ha mejorado su previsión de crecimiento en un 0,5 % desde marzo.

Mientras tanto, el Fondo Monetario Internacional prevé que el crecimiento del Reino Unido sea el segundo más rápido del G7 este año, y el más rápido entre las economías europeas del G7.

Todo esto se refleja en mejores condiciones para los servicios, manufactura, ciencias biológicas y la industria, y por ende, en mayores oportunidades de inversión y rentabilidad.

Por último, este presupuesto ha convertido al Reino Unido en un lugar aún más atractivo para invertir, con un importante paquete de medidas para ayudar a las empresas a crearse, expandirse y permanecer en nuestro país.

En los últimos años hemos facilitado inversiones de empresas argentinas en el Reino Unido por casi £300 millones, desde gigantes como Globant hasta startups innovadoras como SpaceAI con base en Cornwall Spaceport, en sectores que van desde tecnologías aplicadas a salud hasta el desarrollo inmobiliario sostenible.

El nuevo escenario planteado por este presupuesto abre las puertas para que esa presencia se expanda aún más.

Estas medidas incrementarán el fondo de capital disponible para las empresas que cotizan en la bolsa y allanarán el camino para la próxima generación de emprendedores y unicornios tecnológicos.

Se ha mejorado el crecimiento, se prevé que la inflación disminuya y recortaremos el endeudamiento más rápidamente que cualquier otro país del G7.