En pleno Villa Crespo, una tribu de hippies se reúne alrededor del fuego a cantar al compás de la guitarra. Divididos en grupos según la tonalidad de su voz -soprano, mezzo, barítono- le cantan al sol y a las estrellas. Primeros unos, después otros, hasta que al final las voces se funden en una sola. 

Pero no estamos en un bosque, no, sino en una sala de ensayo. Y los jóvenes tampoco son hippies, sino actores. Es un ensayo de la comedia musical Hair, estrenada hace 50 años en los Estados Unidos y que desde mayo está en el escenario del Centro Cultural Konex. Detrás de este revival de la obra que se estrenó en el país en 1971 (producida por Alejandro Romay y Daniel Tinayre, protagonizada por Valeria Lynch, Susan Ferrer, Horacio Fontova, Mirta Busnelli y Rubén Rada) está Pablo Gorlero, editor de Espectáculos en La Nación, investigador y director. Es co-creador de los Premios Hugo al Teatro Musical y ya dirigió Sr. Imaginación, Saltimbanquis y De eso no se canta, actualmente en cartel en el Teatro La Comedia.  

“Es un proyecto que viene desde hace 4 años. Estaba muy obstinado en hacer la obra: me gusta mucho, me parece que es el momento de hacerla, de traer a la memoria lo que decían estos hippies, esta comunidad que todavía creía que podía hacer la revolución a través de la paz y del amor , relata Gorlero. “Encontré a la gente que tenía ganas de hacerla, como Andy Ovsejevich (NdE: Director Ejecutivo del Konex) y Lino Patalano, quienes se asociaron. Y así estamos llevando a cabo esto que es un sueño hecho realidad , agrega.

 

 

 

¿Cuál es tu vínculo con Hair, un musical que tiene 50 años y sigue tan vigente?

La conocía mucho porque estudio el género desde hace tiempo; entonces, sabía acerca de su historia, de su música y demás. Vi versiones anteriores -no la original, por una cuestión de edad-, y me provoca cosas que no me provocan otras obras: me mueve a la emoción y a recordar que en algún momento hubo ideales pacifistas que fueron el motor para muchos movimientos de lucha que vinieron después. La obra está situada en 1968, en plena movida hippie, la Primavera de Praga, el Mayo Francés, las principales revueltas estudiantiles en todo el mundo y el peor año de la guerra de Vietnam. Después, también me vinculo a través de una anécdota personal: de chico estaba obsesionado con Hair. En casa había un disco de la versión de 1971 y sonaba mucho en el tocadiscos. Había una canción que decía la palabra culo y me causaba mucha gracia. Terminó, en el ’76, quemado en un tacho de basura junto a un montón de discos y libros que estaban prohibidos en la época.

Se considera que cambió la forma en que se hacía comedia musical. ¿Por qué?

Rompió con todas las formas: sus autores querían ir en contra de la tendencia de Broadway de hacer musicales pasatistas y optimistas para crear una obra conceptual donde la finalidad fuera transmitir un por qué y un para qué. Es el primer musical con canciones de rock: las letras, que escapaban a la forma tradicional de componerlas, no tienen rima. ¡Y es a propósito! 

 

 

¿Cuánto de la versión de 1968 se mantiene y cuánto se adaptó a los códigos de 2019?

Es una obra que no podría anclarse en la actualidad porque pensar en un movimiento que luche por la paz y amor sería un poco naif. Me parecía que había que seguir la historia de un muchacho que ingresa a esa comunidad hippie y se debate entre sus ideales y la moral impuesta por la sociedad de tener que ir a la guerra, como una gran metáfora. Respeté eso, pero hice mi adaptación siguiendo la traducción original local de 1971. Le saqué un par de canciones y le puse algunas que estaban en el olvido, incorporé algunas escenas. 

¿Por qué no hay figuras reconocidas del género ni famosos en el elenco?

El elenco salió de audiciones. Para honrar de alguna manera la obra, tenía que convocar a audiciones, no podía llamar gente específicamente. Se presentaron más de 500 personas y de ahí hicimos una mini selección. No hay famosos porque no sé trabajar bien con los egos desorbitados y, además, especialmente en esta obra no los puede haber porque la tribu realmente tiene que formarse como tal: si hay disonancias, no va a funcionar. Así que trabajé mucho en la integración que se generaba durante las audiciones y en encontrar el talento para cada personaje.

La obra incluye un desnudo que fue muy polémico en su época. ¿Cuál es el significado de esa escena hoy?

En su momento, la obra generó mucha polémica. Primero, por el desnudo, pero también porque era la primera vez que se utilizaban malas palabras. Fue muy provocativo para la época. Y en la Argentina fue muy polémica porque a los actores los perseguían por tener el pelo largo: cada tanto los agarraban en la calle y se los llevaban a la comisaría. De hecho, había tres actores por cada personaje porque era algo que pasaba muy seguido. La producción de Romay y Tinayre les había hecho como un carnet que certificaba que eran del elenco de Hair.

 

De periodista a director de musical

“Vengo de una familiaque me llevaba mucho al teatro. A los 14, mi mamá me anotó en una academia de barrio y a los 18, viendo que me gustaba mucho, me anoté en la escuela de Carlos Gandolfo y me lo empecé a tomar un poco más en serio. Me empecé a dar cuenta que había muchos métodos de actuación, y eso me llevó a interesarme en la investigación , relata Gorlero quien, pese a los años de estudio sobre las tablas, llegado el momento prefirió dirigir.

“Cuando se acercaban las muestras de fin de año me agarraba un pánico atroz. Después la vida me llevó al periodismo. Y cuando empecé a cubrir Espectáculos me di cuenta que no era compatible con la actuación , relata. Asegura que su vocación por la dirección nunca estuvo en sus planes. “Fue armando los Premios Hugo, junto a Ricky Pashkus, que empecé a darme cuenta de que estaba, de alguna manera, produciendo y dirigiendo un cuadro musical para la entrega de premios.  Después le propuse a Ricky hacer Primeras Damas del Musical, el espectáculo que dirigimos juntos durante cuatro años. Siguieron otros shows grandes que hicimos en el Gran Rex, hasta que me largué solo , explica.

“El musical es el género con el que más me identifico. El diluvio que viene fue el primero que vi pagándome la entrada y me quedé impresionado de que no alcanzasen las palabras y necesitaran expresarse a través de canciones. Eso hizo que comenzara a estudiar el género (NdR: en 2014 publicó Historia de la Comedia Musical en Argentina). Me pasaba 8 horas copiando material y empecé a enamorarme de esa forma de hacer teatro , relata. “Si te toca un musical muy malo, sonaste: no querés volver más. Pero si está bien hecho y la canción aparece porque tiene que aparecer, sin que te des cuenta, es cuando el mensaje se amplifica .

 

De Dona Summer a Valeria Lynch

Este año se cumplen 5 décadas del estreno de Hair, un musical que fue semillero de 
artistas en los Estados Unidos (de Donna Summer a Diane Keaton) y también en la Argentina (Valeria Lynch, Horacio Fontova, Rubén Rada), donde debutó en 1971 
con producción de Daniel Tinayre y Alejandro Romay.