Los avances en materia de Inteligencia Artificial atraviesan las propuestas de posgrado de las universidades y escuelas de negocio más importantes del país. Ya sea a través del lanzamiento de nuevos programas que giran en torno a ella o de contenidos relacionados en materias ya existentes. Esta tendencia, que ya se observaba en los últimos dos años, se profundizó al ritmo del interés y la adopción de esta innovación y también al calor de la buena respuesta que han tenido los cursos sobre ella diseñados en el último periodo. “La IA se integra de manera transversal en nuestra oferta académica”, ratifica Diego Bramajo, director Comercial de IAE Business School, la escuela de negocios de la Universidad Austral. Describe que está incluida de distintas maneras: como materia electiva sobre IA aplicada a los negocios en el Executive MBA (EMBA), como track de especializado en IA para la gestión empresarial en el Master in Management (MiM), y en programas ejecutivos, como los cursos AI for Business, IA: de la estrategia a la implementación, y Claves para una transformación digital exitosa. Asimismo –revela Bramajo– el equipo docente participa en un plan de formación continua en IA, lo que les permite integrar herramientas digitales en materias tradicionales, con el fin de enriquecer la experiencia de aprendizaje. Por su parte, la Universidad de San Andrés (UdeSA), incorporó esta innovación en lugares centrales de sus programas, como, por ejemplo, la materia obligatoria de Inteligencia Artificial Aplicada a los Negocios en el plan de estudios del Master in Management. “A su vez, sumamos una orientación específica con foco en Inteligencia Artificial, que permite a los estudiantes profundizar en esta área clave para el futuro de la gestión”, indica Matías Mella, director del Master in Management del centro de estudios. Mella aclara que no se trata sólo de formar sobre usos prácticos. “Muchos estudiantes se acercan a los programas buscando aprender herramientas de IA; sin embargo, nuestro objetivo es más ambicioso”, dice. Y se explaya: “Las herramientas se actualizan constantemente y pueden volverse obsoletas con rapidez. Por eso, lo que buscamos en la Escuela de Negocios es que los estudiantes desarrollen una forma de pensar los negocios con IA, aprendan a identificar oportunidades, comprendan sus limitaciones y, sobre todo, se entrenen en formular buenas preguntas más que en buscar respuestas rápidas”. En una línea similar se expresa Melani Machinea, decana Ejecutiva de la Escuela de Negocios de la Universidad Torcuato Di Tella: “Entendemos que la IA no es sólo una herramienta, sino el motor de una nueva era en la gestión en los negocios y, por ello, la hemos integrado de manera transversal en nuestra oferta académica”. Machinea ilustra con el caso del rebranding del Master in Management + Analytics, que ahora se llama Master in Management + AI (MiM+AI). “Este programa combina una sólida formación en gestión, con un enfoque riguroso en Analytics e Inteligencia Artificial, preparando a los líderes del futuro para tomar decisiones basadas en datos y tecnología”, apunta. Existen diferentes formas de ampliar los programas con contenidos de novedosa aparición. En el caso de la Escuela de Negocios y Administración Pública de la Universidad de Buenos Aires (ENAP), una de las formas es con la incorporación de expertos. “Durante este año, en todos los posgrados de ENAP, se incorporó el uso de la IA aplicada a cada temática, actividad e industrias/servicios en particular”, informa Luis Alberto Cowes, coordinador General Administrativo de la escuela de negocios. “En el MBA, participan profesores invitados especialistas en herramientas de IA que comparten sus experiencias en la aplicación de dichas herramientas en temas como la investigación de mercados, el comportamiento de los consumidores, las comunicaciones integradas de Marketing, la logística, el plan de negocios, entre otros”, agrega. Asimismo, en 2026 lanzará la diplomatura Gestión estratégica y herramientas de IA aplicada a los negocios. A la hora de describir los usos concretos en el aula, muchos establecimientos hacen referencia a su combinación con otras innovaciones tecnológicas. “Los estudiantes integran tecnologías como IA generativa, APIs y simuladores, programación en Python o Solidity para machine learning, bots o Smart contracts en finanzas, y herramientas digitales para investigación y creación de contenidos”, indica Eduardo Vázquez, decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Belgrano (UB). “En impuestos, algunos profesionales ya emplean IA para la redacción de recursos administrativos, gestión de proyectos o evaluación de procesos”, dice. De acuerdo con lo afirmado por Vázquez, en el MBA en concreto, los alumnos utilizan herramientas de IA integradas a sistemas como SAP para desarrollar dashboards y análisis estratégicos, además de ChatGPT o Gemini para procesar documentos y elaborar matrices de análisis (PESTEL, Porter, FODA). “En el caso de la Especialización de Impuestos, se analiza cómo la IA impacta en la función fiscal, la eficiencia de los procesos y la toma de decisiones”, añade. El año próximo, la UB comenzará a ofrecer programas vinculados específicamente con IA aplicada a la gestión, así como con transformación digital, fintech y análisis de datos. Al momento de optimizar los entregables y exposiciones, la IA ha demostrado efectividad. “Los alumnos utilizan IA para ampliar el research de los trabajos, precisar el diagnóstico, desarrollar prototipos y hacer videos para las presentaciones plenarias”, cuenta Juan Pablo Manzuoli, director de la Escuela de Negocios de la Universidad Católica Argentina (UCA). Su uso, en realidad, excede las áreas de economía y negocios. Paola Dellepiane, de la Facultad de Ciencias Sociales de la UCA, explica que en 2025 se lanzó la Diplomatura en Inteligencia Artificial en Ciencias Sociales, para responder a los desafíos de la educación, la investigación y la gestión. La incorporación transversal a toda la propuesta educativa también está presente en el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA). “En el ITBA consideramos a la IA como una herramienta imprescindible para lograr la excelencia en las organizaciones, para ganar productividad, mejorar la calidad de productos y procesos e innovar en nuevos modelos de negocios. En este sentido, cruza todos los sectores y contenidos temáticos”, expresa al respecto Juan Vidaguren, decano de la Escuela de Gestión y Tecnología del ITBA. Coincide además en que su uso práctico ya es una realidad: “LA IA es una herramienta para los alumnos, una palanca para desarrollar la eficiencia, calidad e innovación en las organizaciones”. Una alternativa educativa es la introducción de la IA como perfil de un posgrado tradicional, como es el MBA. Es el caso de la Universidad de Palermo (UP) que en 2026 sumará dos nuevas orientaciones a ese master: Inteligencia Artificial & Analytics, y Emprendimientos, Tecnología e Innovación Digital, que se suman a la ya existente en Marketing y Desarrollo de Negocios. Gabriel Foglia, decano de la Facultad de Negocios de la UP explica que esta decisión responde a la necesidad de “adaptar los programas a la evolución del mercado laboral, las tendencias globales y el avance tecnológico”. “En todas las carreras de la universidad se enseña a los profesionales como usuarios de IA”, amplía. Para Foglia, es preciso comenzar a utilizarla ya desde el aula. “Consideramos fundamental que nuestros estudiantes utilicen las herramientas tecnológicas disponibles para potenciar sus proyectos académicos y, sobre todo, sus habilidades profesionales. Hoy, un graduado que no integra la IA en su práctica está en desventaja frente al mercado”, enfatiza. Claudio Marcelo Flores, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad del Salvador (USAL), describe, entre otros usos, la elaboración de informes ejecutivos, la simulación de escenarios económicos, la optimización de modelos financieros y la redacción asistida y revisión de trabajos académicos. Aclara que su aprovechamiento está guiado por buenas prácticas. “Desde la Facultad promovemos un uso responsable, crítico y ético de estas tecnologías, integrándolas como herramientas complementarias en el proceso formativo”, asevera al respecto. De hecho, además de incorporar módulos sobre IA en el MBA y otros posgrados y sumar simuladores de negocios y elaboración de indicadores a través de ella, se realizan conversatorios interdisciplinarios sobre ética, derechos y responsabilidades sobre su utilización. La Universidad Siglo 21 también apunta a una mirada integral sobre esta tecnología. “Nuestro objetivo es que los profesionales se formen con una mirada técnica, estratégica y ética que les permita desenvolverse en un mundo donde la IA atraviesa a todas las industrias”, manifiesta Marcela Tello, vicerrectora de Innovación Investigación y Posgrado. Precisa, en el marco de las propuestas de Educación Continua –que está posicionada bajo el concepto de aprendizaje para la vida– la IA es clave. “Hemos diseñado una cartera integral que responde a los desafíos del presente y del futuro con la IA como eje central. Entre nuestras principales propuestas, se encuentra el Certificado de Habilidades para Trabajar con IA, dirigido a profesionales y empresas que requieren que sus colaboradores incorporen esta tecnología con estrategia, sentido y propósito”, continúa. Junto a programas y plataformas de IA en sus diferentes versiones, las universidades también invierten en equipamiento e infraestructura específica. “La inteligencia artificial atraviesa cada vez más nuestra propuesta académica, pero su aplicación no se limita a las aulas: también está presente en el Xperience, un espacio único ubicado en el piso 10 de nuestro Campus Buenos Aires, que integra cascos de realidad virtual y pantallas interactivas para enseñar y aprender mediante realidad virtual, realidad aumentada e inteligencia artificial”, explica Fausto Spotorno, director de UADE Business School. La adaptación de contenidos no siempre responde a emergentes tecnológicos, sino también a áreas de la economía que están en expansión. Es el caso del ITBA, que ha sumado opciones asociadas a los sectores Oil & Gas y Minería. “Las empresas buscan cada vez más perfiles especializados en esta industria”, recuerda Vidaguren. Y añade que la oferta está orientada tanto para atender la necesidad de perfiles gerenciales con conocimiento del sector, como para aquellos profesionales que, contando con los conocimientos técnicos específicos, necesitan profundizar en áreas como administración, sostenibilidad, finanzas o planificación estratégica. Es por ello que cuentan ahora con programas como la Especialización en Producción de Petróleo y Gas, Especialización en Reservorios no Convencionales, Maestría en Supply Chain Management o la Maestría en Desarrollo Energético Sustentable. Por su parte, Matías Pellegrino, coordinador académico de Programas Ejecutivos de la Escuela de Negocios UCA, señala que, en la institución los posgrados ejecutivos “se actualizan constantemente”. “Estamos planificando nuevas propuestas para lanzar 15 programas ejecutivos para 2026”, señala. En 2026, la Universidad de San Andrés lanzará dos nuevas orientaciones dentro de su Master in Management, una de sus propuestas educativas. “Una vinculada a tópicos de management avanzado, denominada Gestión de los Negocios, y la otra que combina neurociencias con management, bajo el nombre Neurociencias Aplicadas al Negocio”, revela Matías Mella. Además, la universidad inaugurará su nueva sede en Nordelta, donde ocupará dos pisos del edificio de Areabeta, en las que participarán el MBA, la Maestría en Finanzas y la Maestría en Marketing y Comunicación. La Universidad Siglo 21 incorporó nuevas propuestas estratégicas en logística, energías renovables, políticas públicas de seguridad y criminología, sumadas a una Maestría en Federalismo, que se presenta como única en el país. La financiación es una de las facilidades que ofrecen las universidades y centros de estudios para ampliar el acceso a sus propuestas educativas. Daniel Galiani, director Corporativo de la Escuela de Negocios de la Universidad del CEMA (UCEMA) señala que no se ha producido una variación significativa en los costos y que los posgrados pueden financiarse de manera mensual, en forma supeditada a la extensión del cursado, lo cual les permite ofrecer entre nueve y 24 pagos, según la especialización o maestría. La Escuela de Negocios cuenta con 20 propuestas de posgrados y maestrías entre las que se destacan el MBA, la Maestría en Finanzas, en Agronegocios, en Economía, la Especialización en Gestión de Proyectos y en Finanzas, entre otras. Los precios de los posgrados de la UCA dependen del tipo de programa, pero –indica Manzuoli– oscilan entre $ 120.000 y 18 millones. Para los residentes locales, todos los programas ejecutivos pueden financiarse en hasta seis cuotas sin interés con tarjeta de crédito o de un código QR, al tiempo que, en los posgrados y maestrías se puede abonar hasta en 18 cuotas. En el caso del IAE, los aranceles varían entre u$s 18.000 y u$s 35.000 y hay planes de financiación tanto para personas como para compañías (hasta 40 cuotas con refuerzos) y aranceles preferenciales de hasta 25% para alumnos fuera de Buenos Aires. La Universidad Torcuato Di Tella cobra $ 38 millones por el MBA y el Executive MBA, al tiempo que el MiM+AI cuesta $ 20,5 millones y la Maestría en Finanzas, $ 21,1 millones. Todas sus maestrías ofrecen planes de financiación que pueden ir de 12 a 40 cuotas ajustables, en todos los casos, adicionalmente se debe abonar una reserva de vacante de un millón de pesos. Los aranceles de la UB también varían en función del programa, pero, en general, se estructuran con una matrícula y entre ocho y nueve cuotas mensuales, actualizables. La institución ofrece planes de financiación, descuentos para graduados y becas especiales como la bautizada como su fundador Dr. Avelino Porto. Por su parte, UADE informó que el precio actual del MBA es de $ 19,9 millones, a pagar en 21 cuotas mensuales y consecutivas y sujetas a ajustes. Ofrece becas para graduados de la universidad, así como por méritos académicos y profesionales, al igual que beneficios por convenios con empresas e instituciones. En la Universidad de Palermo, el MBA tiene actualmente un arancel mensual de $ 810.000 y los valores se ajustan en función de la inflación argentina. En general, las universidades afirman que la deserción es baja y que responde a situaciones laborales y personales y, en menor medida, a dificultades de pago. Para contrarrestarlo, adoptan diferentes medidas. Así lo explica Flores, de la USAL: “Estamos trabajando en estrategias de retención, incluyendo tutorías personalizadas, flexibilización de cursadas y acuerdos de descuentos corporativos”. “La decisión de cursar un posgrado es, en la mayoría de los casos, un proyecto muy planificado y meditado por el profesional”, argumenta en tanto Machinea, de la Universidad Torcuato Di Tella. “Además, es común que los estudiantes cuenten con el apoyo de sus empresas, ya sea financiero o de tiempo, lo cual refuerza su compromiso y reduce la probabilidad de abandonar”. Por su parte, Galiani, de UCEMA, remarca que el trato personalizado “ayuda a contener y atender distintas situaciones”.