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Estados Unidos desplegó en el mar caribeño el USS Gerald R. Ford, un portaaviones de última tecnología que surca los mares en el contexto de una campaña antidrogas de la administración de Donald Trump.

El buque de guerra fue anunciado por el ejército en un comunicado de prensa como un instrumento esencial para combatir el narcotráfico.

¿Qué atributos posee el USS Gerald R. Ford?

El USS Gerald R. Ford representa la fusión de las más recientes innovaciones tecnológicas en el ámbito militar. Su denominación rinde homenaje al 38° presidente de Estados Unidos, quien ocupó el cargo de teniente comandante de la Marina durante la Segunda Guerra Mundial, a bordo del portaaviones ligero USS Monterey.

Con una eslora de 337 metros, este portaaviones tiene la capacidad de transportar hasta 90 aviones de combate y albergar aproximadamente 5.500 tripulantes.

Su desplazamiento de 100.000 toneladas a una velocidad de 56 kilómetros por hora se debe a su propulsión mediante dos reactores nucleares, lo que le confiere total autonomía en el mar.

Fue construido en los astilleros Newport News Shipbuilding en 2009, requiriendo la labor de 19.000 trabajadores y un costo total de 13.000 millones de dólares, convirtiéndose en el más costoso de la historia naval.

Zarpa el portaaviones más poderoso del mundo: tiene la altura de un rascacielos y puede llevar 90 cazas (foto: archivo).
Zarpa el portaaviones más poderoso del mundo: tiene la altura de un rascacielos y puede llevar 90 cazas (foto: archivo).

Fue entregado a la Marina de Guerra de Estados Unidos en 2017 y se prevé que tenga una vida útil de 50 años. Su principal propósito consiste en reemplazar a los 10 portaaviones más antiguos de la clase Nimitz.

En la misma línea, cuenta con un armamento que incluye un sistema de 15 radares de detección avanzada de última generación, destacándose un radar de doble banda (DBR). Además, carga 24 misiles RIM-7 Sea Sparrow y 4 misiles RIM-116 RAM.

Es capaz de operar aviones de última generación, como los F-18 Super Hornet, así como helicópteros y drones. Sus cuatro catapultas electromagnéticas, situadas en una cubierta de 333 x 78 metros, permiten un incremento del 25% en los lanzamientos de aeronaves por día.

La operación del portaaviones en el Caribe y su impacto en Venezuela

La llegada del portaaviones a aguas caribeñas fue anunciada por el ejército estadounidense en un comunicado como una operación antidroga, pero se considera una táctica de presión contra el presidente venezolano Nicolás Maduro.

Según el contralmirante Paul Lanzilotta, que dirige el grupo de ataque del portaaviones Ford, el armamento busca “proteger la seguridad y la prosperidad de nuestra nación contra el narcoterrorismo en el hemisferio occidental”.

El aumento de la vigilancia no se limita a detectar organizaciones criminales, sino que los documentos oficiales informan la lucha contra: