Ni yogur ni kombucha: el probiótico que puedes hacer en casa para aplanar el abdomen y evitar el estreñimiento
Según una nutricionista, este sorprendente alimento facilita la digestión y disminuye la inflamación.
El consumo de probióticos es clave para mantener una microbiota saludable, lo que influye directamente para mejorar la digestión, evitando la inflamación y el estreñimiento. Si bien el yogur y la kombucha son opciones populares en Estados Unidos, existe un probiótico que puedes hacer en casa.
Este alimento ayuda a aplanar el abdomen, mejora el bienestar en general y también aporta grandes beneficios para el organismo.
Cuál es el probiótico casero que mejora la digestión
El kéfir es un alimento fermentado que destaca por su alto contenido en probióticos, bacterias que favorecen la salud intestinal.
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Según la dietista y nutricionista Ingortze Zubieta Aurteneche, este producto es rico en calcio, magnesio, fósforo, vitaminas del grupo B, vitamina K, triptófano y proteínas fáciles de digerir.
El kéfir se puede elaborar en casa a partir de unos nódulos llamados búlgaros, que tienen la apariencia de pequeñas coles. Estos nódulos fermentan la leche o el agua azucarada, creando una bebida cremosa o efervescente, dependiendo del líquido utilizado.
Beneficios de los probióticos del kéfir
Consumir kéfir ayuda a mejorar la absorción intestinal, regula el tránsito digestivo y reduce la hinchazón abdominal, controlando el estreñimiento de forma natural.
Algunos beneficios clave del kéfir incluyen:
- Mejora la digestión y el tránsito intestinal.
- Reduce la hinchazón abdominal.
- Ayuda a equilibrar la microbiota.
- Aporta vitaminas y minerales esenciales.
Según Zubieta, los probióticos del kéfir no solo controlan el estreñimiento, sino que también reducen gases y mejoran los síntomas del intestino irritable. Es un hábito fundamental para tener una vida más saludable.
Una microbiota sana ayuda a prevenir infecciones del tracto urinario y disminuye el riesgo de enfermedades como el cáncer colorrectal. El kéfir actúa como una barrera defensiva en el intestino, manteniendo el pH bajo y dificultando la proliferación de bacterias dañinas.