Visas de EEUU para extranjeros: cuáles son las diferencias entre la H-1B y la H-2B

Restan tan solo algunos días para que se haga oficial la asunción de Donald Trump como nuevo presidente de los Estados Unidos y una de las principales temáticas que comienza a protagonizar la escena es la política migratoria.

Mientras el propio Trump apoya el programa de visas H-1B para el desarrollo de la industria tecnológica, otros dentro del núcleo republicano más dura están en contra del programa. Un ejemplo es Steve Bannon, quien las calificó de "estafa".

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A pesar de que Trump defendió las visas H-1B, las que le dieron resultados reales al propio presidente fueron las visas H-2B, permisos muy diferentes a los anteriores. 

Diferencias entre las visas H-1B y H-2B

Las políticas migratorias estadounidenses ofrecen dos principales alternativas para trabajadores extranjeros. Las visas H-B1 para no inmigrantes permiten a las empresas norteamericanas contratar temporalmente a aquellos que tengan calificaciones académicas avanzadas.

Por otro lado, el programa de visas H-2B permite a las compañías emplear a trabajadores extranjeros para trabajos temporales no agrícolas, como es el caso de la jardinería, hotelería y otros sectores. Además, permite contratar temporalmente a personal cuando no hay suficientes estadounidenses capaces, calificados o disponibles.

Mientras que la visa H-1B para trabajos especializados puede durar hasta seis años, la visa H-2B para trabajos no agrícolas tiene un "periodo de estadía máximo" de tres años, según el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos.

La influencia de las visas H-2B en los negocios de Trump

Aunque el reciente respaldo de Donald Trump al programa de visas H-1B ha captado la atención, sus negocios han dependido históricamente de manera significativa del programa de visas H-2B.

Datos del Departamento de Trabajo de Estados Unidos revelan que, desde 2008, las empresas del expresidente solicitaron y obtuvieron autorización para contratar a más de 2.100 trabajadores extranjeros. De estos, apenas 70 corresponden a profesionales altamente cualificados contratados bajo el programa H-1B, lo que equivale a un modesto 3%.

Esto subraya la predominancia de las visas H-2B en los negocios de Trump, utilizadas para contratar mano de obra para puestos temporales no especializados. La última contratación registrada bajo una visa H-1B en una de sus empresas fue en 2022, cuando Trump Media & Technology Group Corp incorporó a un analista de datos.

Sin embargo, esta estrategia de contratación choca con las posturas de algunos de sus aliados políticos. El Proyecto 2025, un documento conservador que busca establecer lineamientos para la próxima administración republicana, propone limitar las visas H-2B y reducirlas gradualmente, priorizando a los trabajadores estadounidenses.

Pese a distanciarse de este plan durante la campaña, Trump seleccionó a uno de sus autores para encabezar la Oficina de Gestión y Presupuesto. Ni la Organización Trump ni las empresas relacionadas con sus principales aliados respondieron a consultas sobre estas prácticas laborales.