Una de las propuestas más populares de la campaña presidencial de Donald Trump fue la eliminación del pago de impuestos federales sobre la renta para aquellas personas cuyos ingresos fueran inferiores a USD 150,000 dólares anuales. Ahora, con su regreso al poder, esta idea comienza a tomar forma y podría beneficiar a una gran parte de la población estadounidense.
De acuerdo con datos de la Oficina del Censo de Estados Unidos, aproximadamente el 93% de los estadounidenses mayores de 15 años estaban en este nivel de ingresos en 2022. Esto significa que, de aprobarse la medida, la mayoría de los contribuyentes quedarían exentos del pago de impuestos federales sobre la renta.
IRS: ¿Cómo recaudaría impuestos el gobierno sin estos pagos?
El gobierno de Trump ha planteado que los impuestos perdidos por esta exención se compensarían mediante la imposición de aranceles a países como China, Canadá y México. Esta estrategia busca fortalecer la economía interna y trasladar parte de la carga fiscal a las importaciones extranjeras.
"Es hora de que Estados Unidos regrese a un sistema que nos hizo más ricos y poderosos", declaró Donald Trump.
IRS podría no cobrarle más impuestos a ciertos contribuyentes por decisión del Gobierno. Fuente: Archivo.
La propuesta de Trump para bajar los impuestos de IRS
En febrero de 2025, la Cámara de Representantes aprobó una resolución presupuestaria republicana que incluye recortes de impuestos y reducciones del gasto. Ahora, esta propuesta espera ser debatida en el Senado de Estados Unidos.
La idea es extender y ampliar la Ley de Reducción de Impuestos y Empleos de 2017 (TCJA, por sus siglas en inglés), promulgada por Trump durante su primer mandato. Esta ley fue una de las reformas fiscales más importantes en la historia del país y buscó estimular la economía a través de la reducción de impuestos tanto para individuos como para empresas.
El único problema de la eliminación de impuestos de IRS
Si bien la exención de impuestos para la mayoría de los estadounidenses podría representar un alivio económico, los analistas advierten que depender de los aranceles como fuente principal de ingresos fiscales podría generar tensiones comerciales con otros países y afectar a sectores clave de la economía.
El debate aún está abierto y el futuro de la reforma fiscal dependerá de las negociaciones en el Congreso. Por ahora, la medida sigue siendo una promesa de campaña en proceso de evaluación.
