

La decisión de Lionel Messi de continuar o no jugando para la selección nacional no solo no es un tema menor a nivel futbolístico, sino también económico.
Es que además de perder al mejor jugador del mundo, el representativo albiceleste se quedaría sin el principal driver y generador de ingresos con que cuentan el equipo y la AFA.
La especulación de que el astro del Barcelona puede dejar de integrar al combinado dirigido por Gerardo Martino no es un chisme o un rumor sin fundamento: Antonio Cuccitini el abuelo de Messi acaba de revelar la posibilidad cierta de que su nieto se tome un "descanso" de la selección (ver recuadro).
Es sabido que Messi es uno de los futbolistas que más dinero ingresa por publicidades y esponsors, al punto que sus derechos de imagen se encuentran en permanente tira y afloje con los directivos del Barcelona. Obviamente su imán con las empresas también se ha trasladado a la Argentina, donde las compañías hacen fila por auspiciar las actuaciones de la celeste y blanca, por un lado para aparecer en la foto cerca de "La Pulga", y por el otro como un lugar donde mostrarse fuera del ámbito de la violencia del fútbol local y de las denuncias de corrupción vinculadas con la FIFA. Por eso, el sólo chisme de que Messi pueda dejar de jugar con la selección, aunque sea "solo" durante lo que queda 2015, ha puesto en alerta a las marcas. Argentina tiene un importante número de auspiciantes oficiales, que en promedio pagan u$s 2 millones anuales. Entre estos se encuentran Quilmes, Coca-Cola, ICBC, Tarjeta Naranja, Claro, SanCor Seguros, e YPF (Volkswagen se retira porque "el retorno de la inversión no es el esperado"). En tanto, los proveedores oficiales (Prevención ART, Easy, Aerolíneas Argentina, Gillette, Ariel, Head & Shoulders y Noblex) desembolsan casi u$s 1 millón por año cada uno.
Es que está claro para todos que la Argentina es una cosa con Messi en su plantel y una cosa muy diferente sin él, en lo futbolístico ni hablar y en lo comercial... lo mismo.
De hecho, su presencia en los partidos amistosos sube un gran porcentaje el cachet que cobra la Asociación de Fútbol Argentino por estos encuentros, y muchas veces el crack rosarino accede a jugarlos justamente por esta situación. La Argentina cobra entre un millón y un millón y medio de dólares por un encuentro amistoso, pero si juega Messi, ese precio se puede elevar hasta medio millón más, que no es poco. En diálogo con El Cronista, el promotor y agente Guillermo Tofoni explicó que si por ejemplo se juega un Argentina-Honduras en Miami y no va Messi es muy probable que no se llene la cancha. "Messi es Mickey Mouse en ese sentido. Lo quieren los chicos, los grandes, los abuelos" grafica Tofoni













