En diciembre del año pasado, Telecom Italia y el empresario mexicano David Martinez sellaron un acuerdo por el cual el grupo italiano le cedía sus acciones en Telecom Argentina al dueño del fondo inversor Fintech. El monto de la operación llega a los u$s 980 millones por el 68% del capital de Sofora, dueña de Telecom Argentina. En ese momento, el plazo estimado por ambos grupos para finalizar la transacción estipulaba como fecha límite el 12 de agosto. Es decir, hoy. ¿La razón?. Se creía plazo suficiente para que las autoridades regulatorias argentinas emitieran opinión sobre la transacción. Sin embargo, hasta ahora sólo hubo silencio. Ni la Secretaría de Comunicaciones (Secom). ni la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC), ni ninguna otra autoridad kirchnerista se refirieron públicamente a una de las pocas inversiones millonarias que la Argentina podría recibir en momentos de recesión y default.

La preocupación entre los involucrados por el silencio oficial es tal que la semana pasada Marco Patuano, CEO de Telecom Italia, advirtió que la fecha de caducidad del acuerdo vence hoy. Por eso, envió un mensaje directo al Gobierno al sostener que espera el aval de las autoridades regulatorias argentinas. Es que el grupo italiano aún no recibió un sólo dólar de los prometidos para dejar su filial local. Incluso, en junio pasado el propio Patuano estuvo en Argentina intentando acelerar los plazos, aunque regresó a Italia sin precisiones. En ese momento, hasta se resignó a admitir que no sabía cuándo se cerraría la venta. Nunca es posible tener una fecha cuando se trata con los reguladores, agregó y sugirió que la demora se encuentra en la Secom.

Cabe recordar que la salida de los italianos de Argentina fue impulsada por Telefónica, accionista de Telecom Italia, para evitar violar leyes de competencia local y porque la Argentina se convirtió en un mercado complicado para hacer negocios, en especial por la imposibilidad de girar dividendos al exterior. En ese contexto, César Alierta, CEO de Telefónica, impulsó a Patuano a presentar un plan de negocios que, entre otros aspectos, incluyó la salida de la Argentina.

Pero ya pasaron nueve meses y no hay señales de que el Gobierno esté pronto a emitir dictamen. El Cronista pudo saber que ante esta demora, el dueño de Fintech llegará a Buenos Aires para extender el plazo del acuerdo con Telecom. Una especie de waiver que le permitirá mantener su oferta y así seguir esperando la palabra oficial. De hecho, se asegura que en los próximos días se anunciará oficialmente esta ampliación del acuerdo cuyo análisis parece dormir en los cajones del organismo que preside el camporista Norberto Berner y de la entidad regulatoria bajo control del Ministerio de Economía.

De acuerdo a las informaciones, las autoridades de Fintech y de Telecom Italia están dispuestas a seguir esperando que las autoridades den a conocer las razones de la inexplicable falta de definiciones en una transacción que no debería tener muchos reparos de parte de los organismos regulatorios.

De hecho, el propio Martinez allanó más el camino cuando se mostró dispuesto a vender su participación accionaria del 40% en Cablevisión para que el Gobierno le autorice su desembarco en Telecom Argentina. Lo hizo para despejar una de las posibles trabas, ya que la Ley de Medios prohibe a un mismo grupo participar en el sector de telefonía y en el negocio audiovisual. La decisión evidencia la predicción de Martinez por el negocio de las telecomunicaciones más que el de los medios audiovisuales.

De ser aceptada su propuesta, Martinez pasará a controlar el 68% de Sofora Telecomunicaciones, holding propietario de Nortel Inversora, a su vez dueña del 54,74% de Telecom Argentina. El 32% restante de Sofora está en manos de la familia Werthein y otro 45,23% de Nortel cotiza en bolsa. En este marco, los derechos económicos de Telecom Italia en Telecom Argentina ascienden al 22,7%.

Con negocios también en el sector energético local a través de su participación accionaria en Genneia, la ex Emgasud, donde controla el 42% del capital, hasta hace unos meses, Martínez creía poder sostener su participación en Cablevisión sin que eso afectara su llegada a Telecom Argentina.

Pero desde el Gobierno le habrían advertido que no le podrían aprobar la compra de la mitad de la operadora telefónica que pertenecía a Telecom Italia si no dejaba el negocio del cable. Así y todo pasaron los meses y todavía su desembarco en Telecom Argentina sigue en veremos. Fuentes del mercado de todos modos anticipan que es de esperar que finalmente el Gobierno apruebe el ingreso del dueño de Fintech quien, además posee aceitadas relaciones con varios ministros fuertes del gabinete de Cristina Fernández, como Julio De Vido.