Aunque 2025 transita un segundo semestre más moderado y con una demanda afectada por la volatilidad de tasas, las automotrices que operan en la Argentina aseguran que la industria está atravesando un proceso de normalización que permitirá cerrar el año con números en línea con lo previsto y proyectar un 2026 de crecimiento, incluso con un mercado más competitivo.

La visión quedó expuesta en el Encuentro de los Líderes, el evento que organizaron este miércoles El Cronista y la revista Apertura; una jornada que inauguró el ministro de Economía Luis Caputo y que contará con el cierre del presidente Javier Milei.

Pablo Sibilla, presidente y director General de Renault Argentina, indicó: “Este va a ser un buen año para el sector. Que esa dinámica continúe en 2026 es fundamental para todos los jugadores de la industria”. Y destacó que las mejoras fiscales impulsadas por el Gobierno resultan determinantes para las exportaciones del sector: “Más de la mitad de los autos que producimos se exportan. Hay que seguir trabajando en competitividad”.

En tal sentido, adelantó que proyectan un crecimiento de entre el 5% y el 7% para el año que viene, con un volumen estimado de 620.000 unidades y con posibilidades de crecimiento. De hecho, la automotriz francesa encaró una de sus inversiones industriales más relevantes en la Argentina. Con un desembolso de u$s 350 millones para producir una pick up de media tonelada en el país, el Rombo se prepara para un nuevo capítulo para su fábrica de Santa Isabel.

Pablo Sibilla, presidente y director General de Renault Argentina
Pablo Sibilla, presidente y director General de Renault Argentina

Por su parte, Raúl Barcesat, presidente y CEO de Mercedes-Benz Camiones y Buses, dijo: “Da mucha esperanza planificar el 2026 como dijo el ministro (Luis Caputo) con crecimiento para el próximo año, teniendo en cuenta todo lo logrado: las bases de la macroeconomía, el equilibrio fiscal y hablar de un crecimiento por arriba del 4 por ciento, impulsado por las inversiones y el apoyo de Estados Unidos”. Y anticipó que la marca proyecta un crecimiento de entre 10% y 15% en un mercado de 20.000 unidades. “Lo vemos apoyado en tres motores: el agro, Vaca Muerta y la minería. Vamos a iniciar el año con producción en una nueva casa y con expectativas de una Argentina más sólida”, dijo.

La compañía inició el traslado de sus operaciones a un nuevo centro industrial en Zárate, un proyecto que representó una inversión total de u$s 110 millones y que tiene previsto iniciar su funcionamiento en febrero del año que viene.

Raúl Barcesat, presidente y CEO de Mercedes-Benz Camiones y Buses
Raúl Barcesat, presidente y CEO de Mercedes-Benz Camiones y Buses

En tanto, Ricardo Flammini, presidente y director General de Nissan para Argentina, Chile y Perú, analizó el cambio de ciclo para la industria. “Nuestra industria fue la gran ganadora. Hace tres años éramos los grandes perdedores. La recuperación es clara. Todavía hay mucho por hacer para que ese crecimiento sea consistente y llegar a los 700.000 patentamientos por año, pero somos optimistas y, en este nuevo panorama, el gran beneficiado es el consumidor”, sostuvo.

Por su parte, Ivana Dip, CEO de BMW Group Argentina, subrayó la normalización del contexto regulatorio. “Nos genera mucha credibilidad lo que ha venido haciendo el Gobierno en estos dos años de gestión. Con casa matriz es clave mostrar mejoras graduales. Primero se pudo importar, después se bajó el impuesto interno y el año que viene se van a poder girar dividendos. Se nota que se está haciendo lo que se dice, y eso no siempre es fácil de encontrar”, expresó.

Ricardo Flammini, presidente y director General de Nissan para Argentina, Chile y Perú
Ricardo Flammini, presidente y director General de Nissan para Argentina, Chile y Perú

La segunda mitad del año, sin embargo, mostró un freno en el ritmo de ventas. Barcesat explicó que Mercedes-Benz había comenzado 2025 con una fuerte expansión y un crecimiento por arriba del 60 por ciento. “Sin embargo, cuando aparece el ruido político, la incertidumbre del tipo de cambio y las tasas, se produce un freno. Este año vamos a terminar con un crecimiento de alrededor del 50%, pero no con la misma velocidad que durante el primer semestre”, dijo.

Y remarcó el peso del financiamiento en el segmento de camiones y buses: “En cualquier país del mundo, el 99% se compra con financiación; en Argentina es un 65%. Necesitamos que las tasas terminen de acomodarse”.

Ivana Dip, CEO de BMW Group Argentina
Ivana Dip, CEO de BMW Group Argentina

Sibilla describió una tendencia similar para el mercado de autos: aunque Renault esperaba cerrar 2025 con un crecimiento del 70% respecto del año anterior, la proyección finalmente quedará en torno al 50%. Según explicó, la volatilidad del segundo semestre -particularmente por el impacto de las tasas- frenó el ritmo de ventas y noviembre se convirtió en el primer mes que quedó por debajo del mismo período de 2024.

En el segmento premium, sin embargo, la dinámica fue diferente. Dip señaló que, si bien se trata de una categoría especialmente sensible en momentos de crisis, también es una de las primeras en recuperarse. Este año, el premium creció por encima del mercado total y BMW lo hizo incluso por encima del segmento. La marca prevé duplicar sus ventas respecto del año pasado, impulsada por un contexto más previsible, la baja del impuesto interno y la posibilidad de ofrecer nuevamente su gama completa.

“Hasta hace dos años, teníamos la mitad de la gama para ofrecer, ahora tenemos la gama completa. La X3 se lanzó en la Argentina antes que en los países vecinos, y el M2 volvió después de ocho años de ausencia”, destacó la ejecutiva.

Los ejecutivos también evaluaron el impacto de los nuevos cupos de importación libre de arancel, de u$s 16.000 FOB por unidad, y la presencia de nuevos jugadores en el sector.

En el caso de Renault, Sibilla destacó que el cupo permitirá el ingreso del Arkana mild hybrid y valoró que el esquema apunte a una apertura gradual y controlada. “El objetivo del cupo era no repetir el error de Brasil que abrió indiscriminadamente y permitió una invasión china. El objetivo es abrir con control. Se trata de una medida muy positiva”, señaló.

Dip, por su parte, recordó que BMW fue la única automotriz premium que accedió al cupo y que eso posibilitó el arribo de la X1. Consideró, además, que avanzar hacia rangos de aranceles diferenciados ampliaría la participación de más jugadores.

Flammini coincidió en que una mayor competencia es positiva para el mercado y remarcó que la Argentina todavía se encuentra por detrás de otros países de la región en términos de apertura y variedad de oferta.

En ese sentido, los número uno coincidieron en que las marcas chinas podrían alcanzar el 10% del mercado argentino el año próximo, un nivel similar al de Brasil.