Hacen ciencia casi de ficción en la Argentina y crean negocios de escala global

Física nuclear, biotecnología y nanotecnología son disciplinas de avanzada en las que investigadores argentinos están emprendiendo. El Instituto Balseiro analizó los mejores planes de negocios

Hacer ciencia en la Argentina no es fácil, y tampoco lo es crear una empresa. Sin embargo, científicos y emprendedores argentinos se destacan en el mundo por el grado de innovación de sus emprendimientos. Al menos cuatro firmas tecnológicas fundadas hace menos de 20 años son consideradas "unicornios" por tener una valuación de más de u$s 1000 millones (MercadoLibre, Despegar, Globant y Olx) y estas historias inspiran a la creación de nuevas empresas.

El Instituto Balseiro, cuna del desarrollo físico-nuclear argentino dependiente de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y la Universidad de Cuyo (Uncuyo), comenzó hace siete años a impulsar la creación de compañías de alto impacto a partir del conocimiento generado en sus aulas y laboratorios. Lo hizo con la creación del premio IB50k, un concurso que ofrece hasta u$s 50.000 a los mejores planes de negocios de base tecnológica.

En la última edición del concurso, cuyos premios se entregaron el viernes 17 en la sede de Bariloche, el proyecto ganador fue el del joven físico Lucas Neñer, y su profesor, Martín Sirena, quienes diseñaron un equipo de "litografía óptica" para fabricar dispositivos a escala nanométrica. Los emprendedores se alzaron con u$s 30.000 más servicios de mentoreo e incubación en Cites, la incubadora de empresas tecnológicas del grupo SanCor e Invap. "Nuestro dispositivo permite imprimir objetos muy pequeños a muy alta resolución para hacer aplicaciones de microelectrónica; es algo que antes llevaba meses porque había que hacerlo en el exterior, y nosotros lo resolvemos en días, a un costo cuatro veces menor", aseguró Lucas, y contó que el premio "será invertido en materiales para la empresa".

El segundo premio fue para el proyecto "Sofc", que produce pilas de combustible de óxido sólido para generar electricidad con alta eficiencia y bajas emisiones contaminantes en instalaciones alejadas del sistema de interconexión. Este emprendimiento, creado por ocho investigadores de las universidades de Buenos Aires (UBA), el Litoral (UNL), la del Comahue y el Balseiro, recibió una mención especial en la categoría "Tecnología Energética" por parte de Y-Tec, la empresa tecnológica de YPF.

El tercer puesto fue para el equipo de "nanoencapsulación", integrado por Julio Laurenza y Marcelo Mignone, de la Universidad de Morón, que utilizan "nanovehículos" un millón de veces más pequeños que una hormiga para aplicar agroquímicos y fertilizantes de forma precisa con dosis 50% menores que las habituales.

También recibieron menciones un kit para detección del rotavirus, principal causante de diarrea infantil, que utiliza nanoanticuerpos VHH patentados por el INTA; y el "re-licuefactor", un dispositivo que permite reutilizar el nitrógeno que conserva las muestras biológicas para hacer inseminación artificial en ganado, evitando que se contaminen o pierdan.

Desde 2010, numerosos emprendimientos premiados se convirtieron en compañías de alto impacto como MZP, creadora de un micro-sensor de viscosidad sanguínea que detecta problemas circulatorios en bebés. La firma surgida en el Balseiro fue elegida por Singularity University para participar de su programa de incubación y financiamiento. Y RadSafeLabs, ganadora el año pasado por desarrollar tecnología para la detección de radiación ionizante, ya está exportando sus servicios a varios países.

Temas relacionados
Más noticias de ciencia
Noticias de tu interés