Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la enfermedad de Alzheimer representa entre un 60% y 70% de los casos de demencia que se registran a nivel mundial, en su mayoría, en adultos mayores.
Al ser un trastorno cerebral progresivo e irreversible, la principal afectación se produce en la memoria de los individuos y las habilidades de pensamiento, conduciendo a que quienes los padecen experimenten problemas en su comportamiento y ciertas dificultades a la hora de realizar las tareas más simples.
Durante años se ha buscado desarrollar una cura para tratar esta enfermedad. El avance más próximo se ha encontrado recientemente con el desarrollo de un nuevo medicamento a partir de una investigación que lideraron un grupo de científicos cubanos.
¿Qué es lo primero que olvida una persona que sufre Alzheimer?
Entre los principales signos que advierten al entorno de un individuo sobre el padecimiento de esta enfermedad se destacan los problemas de memoria en torno a acontecimientos recientes. Esto hace referencia a los contextos espacio temporal actuales.
Algunas circunstancias que ejemplifican este tipo de padecimiento pueden estar asociadas a haberse olvidado de conversaciones que se hayan tenido por la mañana o a no recordar si se tomó o no el almuerzo.
A medida que se complejiza el cuadro, se comprometen aún más los datos que se tienen almacenados con mayor antigüedad, ya sea como no recordar en qué casa vivieron o a qué escuela asistieron.
¿De qué se trata el nuevo fármaco contra el Alzheimer?
Si bien es una enfermedad que no tiene cura, existen diversos tratamientos a partir de los cuales es posible mejorar la calidad de vida de las personas que la padecen.
Respecto a esto, recientemente en Cuba desarrollaron un medicamento que demostró su eficacia para frenar la progresión de este tipo de demencia.
Según informó Héctor Vera Cuesta, director del Centro Internacional de Restauración Neurológica (Ciren), el fármaco ya fue autorizado por el Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (Cecmed) de la isla.
Se tratan de gotas que se administran por la nariz y están indicadas para quienes se encuentran en las primeras etapas del padecimiento. El profesional detalló que al aplicarse la sustancia, esta atraviesa la barrera hematoencefálica y llega al cerebro con un efecto de neuroprotección, evitando el daño celular.
Cabe destacar que la progresión de la enfermedad continúa a pesar del tratamiento, pero de forma más lenta.