El mito de que tomar una copa de vino mejora la saludha estado presente en la cultura popular y ha sido objeto de varios estudios científicos a lo largo del tiempo. Desde hace varios años se cree que esta acción podría tener beneficios en el corazón, dado los antioxidantes presentes en las uvas.
Su consumo saludable se asocia comúnmente cuando se mantiene en cantidades adecuadas al día. Sin embargo, ten en cuenta que no todos los tipos de vino ofrecen los mismos beneficios.
Checa los detalles sobre cómo mejorar la salud y vivir más tiempo, teniendo en cuenta cuál es la bebida que ayuda a prevenir las enfermedades.
¿Cuáles son los beneficio de tomar vino?
Los expertos en salud han sugerido que el consumo de vino tinto puede contribuir al tratamiento de diversas dolencias y trastornos, como la diabetes, la demencia y la osteoporosis.
Esta bebida alcohólica cuenta con antioxidantes naturales que desempeñan un papel importante en la neutralización de los radicales libres del colesterol malo.
Desde el sector indican que los polifenoles hacen que el colesterol malo sea menos soluble, dificultando su absorción intestinal y, por ende, su ingreso al torrente sanguíneo, lo que impide su acumulación en las arterias.
Por otra parte, el alcohol mismo, debido a su alta volatilidad, actúa como un dilatador arterial una vez en la sangre. Este proceso ensancha el diámetro de las arterias, facilitando así la circulación sanguínea y propiciando el desprendimiento del colesterol malo que podrían haberse formado.
Sin bien el vino es una de las bebidas con alcohol más antiguas del mundo, estas ventajas no fueron descubiertas hasta años atrás. Anteriormente, su consumo se limitaba principalmente a actividades de ocio y relajación.
¿Cuánto vino hay que tomar al día para mejorar la salud?
Los médicos aseguran que beber una copa de vino tinto al día mejora la calidad de vida, así como también aporta los siguientes beneficios.
Reduce el riesgo de fallecer
En Europa, los estudios indican que el consumo diario de entre 22 y 32 gramos de alcohol tiene un efecto protector para la salud, reduciendo la mortalidad por diversas causas.
Disminuye el efecto del cigarro
Se sugiere que podría regular los daños causados por el tabaco en los vasos sanguíneos, contribuyendo tanto a la relajación como a la vasodilatación.
Principalmente, se destacan los efectos positivos en el endotelio, una capa de células que disminuye la fricción entre los vasos linfáticos y sanguíneos, así como en el corazón.
Previene enfermedades cardiovasculares
Se destaca la capacidad para reducir el riesgo de enfermedades del corazón.
Según los científicos, el vino tinto disminuye la producción de colesterol LDL (considerado perjudicial) y aumenta los niveles de colesterol HDL (considerado beneficioso).
Equilibra la presión arterial
Aunque es conocido que el consumo excesivo de alcohol puede ocasionar hipertensión, consumir una copa diaria de vino tiene el efecto opuesto en personas que padecen este problema, ya que reduce la presión arterial después de las comidas.
Evita el Alzheimer
Las investigaciones han demostrado que el resveratrol, un compuesto presente en el vino tinto, posee previene:
- Demencia
- Artritis reumática
- Gripe y resfriados
- Cáncer de garganta
- Diabetes
Además, facilita la digestión y mejora la circulación sanguínea.
Ten en cuenta que lo mejor será beber una copa de vino durante la cena o el almuerzo. Así podrás potenciar cada uno de sus beneficios.
¿Cuáles son las consecuencias del consumo excesivo de alcohol?
Un consumo excesivo de alcohol puede tener efectos negativos en la salud, como problemas hepáticos, aumento de riesgo de enfermedades cardiovasculares y daño cerebral.
Asimismo, se puede afectar la función cerebral, provocando problemas de memoria, concentración y toma de decisiones. También puede contribuir al desarrollo de trastornos mentales, como la depresión y la ansiedad.