Los expertos en salud recomendaron mejorar los hábitos diarios, con el objetivo de tener una mejor calidad de vida. En particular, los adultos mayores deben tener en cuenta una serie de consejos que le permitirán prevenir el Alzheimer y mejorar la memoria.
La mejor manera de incrementar el bienestar personal es a través de la lectura, la cual tiene múltiples beneficios para la salud. Desde mejorar la función cerebral hasta aliviar el estrés, sumergirse en un buen libro puede ser tanto un ejercicio mental como un alivio físico.
La lectura se asocia comúnmente con el desarrollo intelectual y el entretenimiento, pero esta antigua práctica ofrece muchos más beneficios para la salud, algunos de ellos poco conocidos.
En detalle, la Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló que la lectura es una de las actividades culturales que benefician tanto la salud física como mental. En cualquier formato y extensión, los libros pueden ser excelentes aliados en la búsqueda de una vida más sana, equilibrada y consciente.
El punto a favor es que estos pueden disfrutarse en diversos formatos: papel, libro electrónico (e-book) y audiolibros. Además, es posible leer libros digitales en varios dispositivos electrónicos, como celulares y tablets.
¿Cuáles son los beneficios de la lectura?
La lectura ofrece numerosos beneficios para la salud, según los expertos del Instituto de Neurología Cognitiva (INECO), quienes destacan sus impactos neurocientíficos positivos en el funcionamiento del cerebro:
Estimulación cerebral
Estimula la actividad neuronal, fortaleciendo las conexiones sinápticas y mejorando las funciones cognitivas. Esta actividad puede ayudar a prevenir el deterioro cognitivo y reducir el riesgo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
Además, activa varias áreas cerebrales asociadas con la comprensión del lenguaje, la memoria y la atención, manteniendo así el cerebro activo y saludable.
Desarrollo de habilidades cognitivas
La lectura crítica y analítica mejora las habilidades de pensamiento crítico y análisis. Los lectores deben evaluar información, seguir tramas complejas y entender conceptos abstractos, lo que fortalece las funciones cognitivas.
Prevención del deterioro cognitivo
La actividad mental continua, como la lectura, se ha relacionado con un menor riesgo de deterioro cognitivo en la vejez. Mantener la mente activa a lo largo de la vida puede contribuir a la salud cerebral a largo plazo.
Mejora de la memoria
Promueve un mejor rendimiento en pruebas de memoria. Recordar detalles de tramas, personajes y eventos contribuye al ejercicio de la memoria.
Para Samantha Henry, profesora asistente de neurología en el Colegio de Medicina Baylor en Houston, la lectura como una práctica de atención plena ayuda a redirigir los pensamientos al momento presente, reduce el estrés y mejora la concentración.
¿Cuántas horas por día es recomendable leer?
Aunque no existe una cantidad fija de horas de lectura que sea universalmente recomendada, los expertos sugieren que leer al menos 30 minutos al día -y entre 2 y 3 horas a la semana- puede ofrecer importantes beneficios para la salud mental y el bienestar general.
Cabe destacar que esto varía según los factores individuales como el estilo de vida, la capacidad de concentración, los objetivos de lectura y la disponibilidad de tiempo.
Henry señala que leer con regularidad puede incluso disminuir las probabilidades de desarrollar demencia. En tanto, sugiere integrar la lectura en la rutina diaria comenzando con solo 15 minutos al día, sin necesidad de establecer un horario fijo para ello.
Kristen Willeumier, neurocientífica y autora del libro Biohack Your Brain, asegura que "cuanto más leas a medida que envejeces, tu cerebro se mantendrá en forma".
¿Es mejor leer en papel o digital?
Leer un libro en papel en comparación con hacerlo en una computadora presenta diferencias significativas que afectan la experiencia de lectura, la salud visual y la economía.
Los libros impresos ofrecen una experiencia táctil y tradicional, mientras que el contacto físico con el libro contribuye a una sensación de inmersión y conexión personal con el texto.
Por otro lado, los libros electrónicos implican una exposición a la luz azul de las pantallas, lo que puede provocar fatiga visual y alterar los patrones de sueño si se lee durante períodos prolongados. Este efecto es menos predominante en la lectura de materiales impresos.
Sin embargo, la lectura digital también ofrece ventajas, tales como:
- Acceso inmediato a una amplia gama de contenidos
- Capacidad de personalizar la experiencia de lectura ajustando el tamaño del texto, el contraste y el brillo
- Facilita la lectura para personas con dificultades visuales
Desde el punto de vista ambiental, estos son una
alternativa sostenible
al reducir la
demanda de papel
y el
transporte
. Además,
las ediciones digitales suelen costar entre un 30% y un 50% menos que los libros impresos
.