Pese a la tragedia de la segunda ola, la economía brasileña parece haber resistido mejor de lo que se esperaba: sólo en abril se crearon casi 121.000 empleos formales, lo que elevó a casi un millón los nuevos puestos de trabajo generados en los primeros cuatro meses del año.

Si bien las cifras del mercado laboral parecerían estar empezando a ralentizarse -abril fue el segundo peor mes en casi un año, sólo superado por el último diciembre- el ministro de economía, Paulo Guedes, dijo que en comparación con el año pasado, cuando la primera ola arrasó con casi un millón de empleos, el panorama era positivo.

En abril se crearon 1,38 millones de puestos de trabajaron pero también se recortaron otros 1,26 millones. El sector de servicios (que representa cerca del 60% del PBI brasileño) fue el que más contribuyó con 57.610 nuevos empleos, cerca de la mitad del total. Le siguen la construcción (22.224) y la industria (19.884) en tercer lugar.

"La solución es seguir adelante con las reformas económicas y la vacunaciónmasiva, a fin de garantizar el retorno seguro al trabajo", dijo Guedes en una conferencia de prensa online. "Es sumamente importante mantener este ritmo de crecimiento de empleos para garantizar que no haya un descarrilamiento económico", agregó.

Guedes es optimista: días atrás el ministro estimó que la economía podría crecer entre 4,5% y 5% este año, bastante por arriba de las últimas proyecciones del FMI (3,7%) y del Banco Mundial (3%). En un evento virtual, el jefe de la cartera económica adelantó que el gobierno está estudiando un impuesto negativo sobre la renta y está elaborando un paquete de medidas para reducir el desempleo.

Pero la estrategia de Guedes depende de varios factores. Uno de los más importantes es la campaña de vacunación contra el coronavirus, que sigue presentando varios obstáculos. Hasta ahora cerca del 24% de la población objetivo (menos de la mitad de la población total de Brasil) está completamente vacunada y elgobierno recortó en 12 millones su previsión de stock para junio, luego de que el instituto carioca Fiocruz tuviera que frenar temporalmente la producción de la vacuna de AstraZeneca por falta de insumos.

Mientras tanto, el número de contagios de Covid-19 se volvió a acelerar en los últimos días -se reportaron 80.486 casos nuevos en las últimas 24 horas y el promedio móvil de contagios subió un 10% desde comienzos de mayo- y el país ya supera las 450.000 muertes por Covid-19.

Guedes también depende de que el congreso brasileño destrabe la reforma fiscal que el ministro viene impulsando desde el año pasado. Los presidentes de la Cámara de Diputados, Arthur Lira, y del Senado, Rodrigo Pacheco, acordaron esta semana acelerar la aprobación del proyecto (dividido en cinco partes) que, entre otras cosas, modifica el impuesto a la renta y une dos impuestos federales en un nuevo IVA de 12%.

Con las elecciones presidenciales cada vez más cerca, el gobierno está presionando para que la reforma sea aprobada, al menos de forma parcial este año.