

Las diferentes complejidades mentales son una de las causas principales de discapacidad en muchos países. En muchos casos, más del 30% de las bajas producto de estas enfermedades tienen que ver con dolencias cerebrales, lo que se convirtió en un gran enigma para la ciencia.
El Parkinson es una de las causas de demencia neurodegenerativas más influyentes del mundo. Si bien se desconoce qué es lo que desencadena el trastorno, los avances a los que se llegaron son de extrema relevancia.
Desde hace más de 40 años se vienen realizando diferentes estudios científicos para ayudar a las personas con enfermedades neurológicas sin solución.
El nuevo método científico que pretende mejorar la calidad de vida y la memoria de las personas con Parkinson
Desde 1980, los científicos trabajan incansablemente para encontrar soluciones a las enfermedades cognitivas. En medio de muchos estudios lograron comprender que por medio del implante de electrodos en zonas muy precisas del cerebro es factible medir su actividad.

Un equipo del Imperial College de Londres, liderados por Nir Grossman, publicó los resultados de una técnica similar a la estimulación cerebral profunda (ECP) sin necesidad de tener que abrirle la cabeza al paciente.
Se trata de una inferencia temporal, que no requiere insertar electrodos en el cerebro, bastando solo con colocarlos sobre el cuero cabelludo para generar campos eléctricos capaces de actuar como un grupo de neuronas en zonas del cerebro.
El estudio fue aplicado en 20 voluntarios, estimulando el hipocampo, una zona del cerebro alejada de la superficie que tiene un papel vital en la memoria, logrando resultados alentadores en la recuperación y sin necesidad de cirugía ni efectos secundarios.













