

La vacuna Moderna contra el COVID-19 podría conducir a un mayor riesgo de inflamación cardíaca en ciertos grupos de edad en comparación con la vacuna rival de Pfizer/BioNTech, según datos presentados este martes ante la Administración de Drogas y Alimentos (FDA).
Esta lectura se produjo luego de que se analizara el contenido de una base de datos del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, que mostró un exceso de casos de inflamación cardíaca de 4,41 por cada 100.000 que recibieron la inyección de Pfizer/BioNTech en personas de 18 a 39 años frente a un exceso de casos de 6,27 por cada 100.000 de Moderna.
Los resultados fueron presentados por un grupo de investigadores independientes ante la FDA. Uno de sus funcionarios, según relevó la agencia Reuters, le dijo al panel de expertos que si bien los datos mostraban un mayor riesgo para la inyección de Moderna, los hallazgos no eran consistentes en varias bases de datos de seguridad y no eran estadísticamente significativos, lo que significa que podrían deberse al azar.
Algunos países de Europa tienen un uso limitado de la vacuna de Moderna para grupos de edad más jóvenes después de que la vigilancia sugiriera que estaba relacionada con un mayor riesgo de inflamación cardíaca, y la FDA retrasó su revisión de la inyección de Moderna para evaluar el riesgo de miocarditis.

El sistema Vaccine Safety Datalink (VSD) indica 97,3 casos por millón de dosis de la vacuna Moderna para hombres de 18 a 39 años después de la segunda dosis, en comparación con 81,7 casos por millón de dosis de la vacuna de Pfizer.
Mientras tanto, los expertos de la FDA evaluaron, momentos antes de la reunión con el grupo independiente de expertos, la viabilidad del uso de la vacuna Moderna contra el COVID-19 para personas de 6 a 17 años.
Las subvariantes de omicrón BA.4, BA.5 representan el 21% de casos de COVID en EEUU
Las subvariantes BA.4 y BA.5 de Ómicron constituyen cerca del 8,3% y el 13,3% de las variantes de coronavirus en Estados Unidos hasta el 11 de junio, informaron el martes los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Los dos sub-linajes de rápida propagación se añadieron a la lista de vigilancia de la Organización Mundial de la Salud en marzo.

"Estoy muy preocupado", dijo el Dr. Gregory Poland, jefe del grupo de investigación de vacunas de la Clínica Mayo de Minnesota, y añadió que los datos de Sudáfrica muestran que las subvariantes tienen mayor capacidad para eludir la inmunidad de las vacunas e infecciones previas.
La BA.4 representó el 5,4% de las variantes en Estados Unidos durante la semana del 5 de junio, según las estimaciones de los CDC, mientras que la BA.5 representó el 7,7% de las variantes; aumentando la media móvil de siete días de casos de COVID-19 en un 6,7% más que la semana anterior.













