Ahora el Gobierno cuenta con el visto bueno del Congreso para emitir deuda en el mercado internacional y suma una herramienta adicional para evitar el default. Que esperan los analistas sobre el futuro de los bonos.
Festejando el presupuesto
Tanto la deuda como las acciones transcurren una de las últimas jornadas del año en positivo. Los activos locales reaccionan a la aprobación del Presupuesto 2026 por el Congreso.
Los bonos soberanos cotizan en positivo. El Global 2029 y el Global 2030 suben 0,26% y 0,37%, respectivamente. En el tramo medio de la curva, los títulos a 2035 y 2038 registran ganancias de 0,29% y 0,04 por ciento. Finalmente, los bonos mas largos muestran subas de 0,28% y 0,41% en los títulos a 2041 y 2046 respectivamente.
Mientras tanto, el riesgo país se mantiene estable en 580 puntos.

En lo que respecta a las acciones, también operan con ganancias.
Las mayores mejoras se dan en BBVA Argentina, que sube 2,3%, seguida por Central Puerto, Grupo Supervielle, Loma Negra y Banco Macro, que ganan entre 1,3% y dos por ciento.
Otros papeles como Vista, Mercado Libre, Cresud, TGS, Edenor, Grupo Financiero Galicia, YPF y Telecom también suben, avanzando entre 0,3% y 1,2 por ciento.
El S&P Merval en dólares sube 1,2%, y acumula una baja de 3,4% en el 2025. Sin embargo, registra un impresionante rally desde el piso previo a las elecciones, acumulando ganancias de más del 100% desde octubre a la fecha.

La aprobación de la Ley de Presupuesto de 2026 en el viernes por la tarde trae un buen clima de negocios al mercado local.
Concretamente, el Senado aprobó el Presupuesto con 46 votos a favor, 25 en contra y una abstención.
Por primera vez desde que Milei asumió la presidencia, el bloque peronista se dividió en el Senado, con tres senadores del bloque Convicción Federal votando a favor del Presupuesto. El proyecto fue aprobado con todas las modificaciones introducidas por la Cámara de Diputados, convirtiéndose así en ley. Es la primera ley de Presupuesto aprobada tras dos años de prórrogas del Presupuesto 2023.
Emisión de deuda
Según detallaron desde Max Capital, “el aspecto clave del Presupuesto es la autorización para emitir hasta u$s 35.000 millones de deuda externa, en base a los supuestos de tipo de cambio e inflación incluidos en el proyecto”.
Por esta razón, la deuda mantiene su tendencia alcista ya que se elevan las chances de que el Gobierno encuentre los recursos para pagar la deuda que vence en enero por u$s 4300 millones.
En esa línea, desde PPI indicaron que la buena performance de la deuda responde a la aprobación del presupuesto, dándole herramientas al Gobierno para emitir deuda.
“El desempeño de los bonos antecede a un evento político clave. El viernes, ya con el mercado cerrado, el gobierno logró un resultado ampliamente favorable tras una sesión maratónica en el Senado. El oficialismo consiguió un respaldo holgado para aprobar el Presupuesto 2026 (con 46 votos a favor, 25 en contra y 1 abstención), con la restitución de la facultad del Poder Ejecutivo para acceder a los mercados internacionales sin pasar por el Congreso (la denominada Ley Guzmán)”, dijeron.
Desde Grupo SBS resaltaron que tal como se aprobó el Presupuesto, “se habilita al Tesoro a poder emitir deuda bajo ley extranjera”.
Menor riesgo de default
Con la aprobación del Presupuesto se reducen más las chances de un default de la deuda ya que el Gobierno cuenta con nuevas herramientas para hacer frente a sus compromisos.
Los títulos dentro de la curva soberana experimentaron grandes ganancias este año, tanto en los bonos de ley local como de legislación Nueva York.
En el tramo corto, los bonares a 2029 y 2030 subieron 13% y 14%, mientras que los títulos al mismo plazo en la curva de globales evidenciaron ganancias de 18% y 19% respectivamente.
En el tramo medio, los títulos a 2035 y 2038 de ley local suben 18% y 16% respectivamente, mientras que los globales a ese tramo avanzan 21% cada uno.
Finalmente, en el caso de los bonos más largos, estos muestran subas de 17% en lo que va del año.
El fuerte avance de este año, sumado al avance que se evidenció en los últimos años, hizo que la deuda local opere en zona de máximos históricos.
Dado que el precio de los bonos opera de manera inversa a la tasa, los rendimientos de los bonos se encuentran en mínimos.

Así, hoy la probabilidad de default de la deuda es la más baja desde que los nuevos bonos salieron a cotizar.
Los analistas de Portfolio Personal Inversiones resaltaron las bajas tasas de interés con los que operan los bonos locales, haciendo que tenga un correlato de menores probabilidades de default.
“Este buen desempeño de los soberanos también se reflejó en el mercado de CDS. Las probabilidades acumuladas de default implícitas se desplomaron hasta mínimos desde la última reestructuración de deuda de Guzmán. En particular, la probabilidad de default acumulada a 1 año cayó ayer al 7,9%, lo que implica una compresión de 2,2 pp. en lo que va de la semana”, dijeron.
Asimismo, desde PPI agregaron que “la probabilidad de default acumulada a 4 años se redujo de 36,6% a 33,6% en el mismo período, reflejando el renovado optimismo del mercado tras los anuncios del BCRA y el avance en el programa de acumulación de reservas”.

Existieron distintos factores que empujaron al alza a los bonos.
Entre ellos se destacan el hecho de que el Gobierno anunció un cambio en el actual esquema cambiario, dentro del cual también incluyó un plan para comprar divisas.
El Gobierno estima que, con el nuevo esquema planteado, se podrán comprar entre u$s 10.000 millones a u$s 17.000 millones.
De esta manera, si el Gobierno acumula dólares, los riesgos de default son menores y por ende, el mercado le exige menos tasa a la deuda, haciendo que baje el riesgo país y que la curva se siga desplazando a la baja.
Javier Casabal, Sr Fixed Income Strategist de Adcap Grupo Financiero, coincidió en que a partir del anuncio de la compra de reservas, que fue bienvenido por el fondo, el riesgo país ya perforó los mínimos de enero de 2025 y Argentina empieza a quedar más cerca de salir al mercado con una emisión en el mercado internacional.
A su vez, Casabal agregó que la emisión del Bonar 2029 en Ley local fue un primer paso que a su vez dio lugar a la mejora de la calificación crediticia por parte de S&P y podrían venir nuevos upgrades de otras calificadoras.
Todo ello hace que Casabal mantenga su visión optimista sobre la deuda local.
“En este contexto, vemos más valor en el tramo largo de la curva de dólares, como el GD35 que tiene mayor retorno potencial en caso de una compresión del riesgo país, por su mayor duration. De hecho, estos últimos días después del anuncio, los bonos más largos estuvieron bastante más firmes que los cortos y este comportamiento debería continuar”, sostuvo Casabal.

Curva normal y potencial alcista
La mejora en los bonos hizo que la curva ahora opere con forma normal, es decir, que los títulos más cortos operan con rendimientos más bajos, los inversores deben buscar oportunidades en títulos de mayor plazo.
Es decir, para alcanzar retornos más elevados, el atractivo hoy se encuentran en bonos más largos, los cuales operan con rendimientos más altos respecto de sus pares con menor vencimiento.
De esta manera, la clave pasa por determinar si conviene (o no) alargar duration en las carteras de bonos.

Alejo Rivas, Estratega en Balanz, explicó que mantiene una visión constructiva con la deuda en dólares argentina, en particular con los bonos más largo.
A su vez, advirtió que parte importante del rally que esperaba ya se materializó, pero aun así, ve margen adicional apoyado en un ancla fiscal que se mantiene firme, un contexto político algo más favorable el próximo año y la expectativa de acumulación de reservas y avances en reformas.
“Seguimos posicionados en deuda soberana y, aun con la curva ya por debajo del 10%, creemos que todavía hay valor en extender duration. Recomendamos particularmente el GD41 que, en nuestra opinión, ofrece mayor upside si la curva continúa comprimiendo hacia niveles compatibles con un crédito B-”, dijo.
El mercado sigue viendo potencial alcista en los bonos de cara a 2026.
Los analistas de Research Mariva señalaron que mantiene una visión sobre-ponderada en bonos soberanos.
“El anuncio del banco central de que comenzará a comprar divisas en el mercado cambiario en 2026 para reconstituir las reservas internacionales netas representa una señal política constructiva y contribuye a calmar las preocupaciones de los inversores”, indicaron.
En esa línea, detallaron que el Tesoro ha comenzado a acumular reservas, sumando aproximadamente u$s 2000 millones en las últimas dos semanas, incluyendo u$s 910 millones de la emisión del AN29.
“Junto con las reformas estructurales en curso, estas medidas deberían impulsar una mayor compresión del riesgo soberano, actualmente en 559 puntos básicos. En un escenario a tres meses en el que la curva soberana se normaliza a una calificación crediticia B- (con rendimientos cercanos al 8%), los bonos GD35 y GD41 ofrecen el mayor potencial de crecimiento, en torno al 12%”, detallaron desde Research Mariva.















