

S&P Global Ratings elevó este lunes la calificación soberana en moneda local de Argentina a 'CCC-' tras corroborar que el país subsanó incumplimientos relacionados con su deuda. En tanto, confirmó que la calificación en moneda extranjera es 'CCC+'.
"Subimos nuestras calificaciones soberanas en moneda local de largo y corto plazo de Argentina a 'CCC- y C' de 'SD y SD', respectivamente, y afirmamos nuestras calificaciones en moneda extranjera de largo y corto plazo de 'CCC+ y C', respectivamente", indicó la calificadora de riesgo a través de un comunicado.
S&P explicó que el canje de deuda en pesos de la semana pasada, en el que Economía consiguió postergar $ 3 billones que operaban en el primer trimestre del año, sobre un total de $ 4,3 billones, fue clasificado como de "condiciones desventajosas (distressed)" dadas las pronunciadas vulnerabilidades macroeconómicas del soberano y su capacidad muy limitada para extender vencimientos y colocar deuda en el mercado local sin depender continuamente de estos instrumentos.

"Con las elecciones que se avecinan en un contexto de tensiones macroeconómicas y políticas, en nuestra opinión, el Gobierno depende de los canjes para gestionar la mayoría de sus vencimientos en pesos, los cuales complementa con subastas para refinanciar cantidades menores de deuda próximas a vencer", agregaron.
Ahora, como los nuevos instrumentos bajo el canje fueron entregados a los tenedores de los bonos, la calificadora consideró el "incumplimiento subsanado" de acuerdo con sus criterios.

Perspectiva negativa
S&P mantuvo, no obstante, su perspectiva negativa de las calificaciones de largo plazo y añadió que "refleja los riesgos relacionados con los desequilibrios económicos pronunciados y la incertidumbre política antes y después de las elecciones nacionales de 2023".
En esa línea agregó: "Los mercados de capitales internacionales están cerrados a Argentina. Además, los desacuerdos dentro de la coalición de gobierno y los desacuerdos internos de la oposición limitan la capacidad del soberano para implementar cambios oportunos en la política económica".
"Con las elecciones que se avecinan en un contexto de tensiones macroeconómicas y políticas, en nuestra opinión, el Gobierno depende de los canjes para gestionar la mayoría de sus vencimientos en pesos, los cuales complementa con subastas para refinanciar cantidades menores de deuda próximas a vencer".
Finalmente, en relación a la deuda en moneda extranjera, la agencia advirtió que podría bajar las calificaciones en los próximos seis a 12 meses en caso de que se presenten políticas negativas inesperadas o acontecimientos políticos negativos que socaven el ya limitado acceso a la financiación.
"Los significativos retrocesos en la ejecución en el marco del Servicio Ampliado del FMI (SAF) complicarían el acceso a la financiación del Fondo Monetario Internacional (FMI) y, potencialmente, de otras instituciones multilaterales de crédito", concluyó.












