Despejado el riesgo político, los analistas creen que revivirá las estrategias de carry trade y ven oportunidades en bonos en pesos más largos.
Volatilidad cambiaria contenida
El mercado cambiario sigue tensionado a pesar de que los activos financieros hayan evidenciado un fuerte rally.
El riesgo país colapsó gracias a la fuerte suba en los bonos, los cuales alcanzaron nuevos máximos históricos.
Por su parte, las acciones evidenciaron su mejor mes en su historia, con muchos ADR argentinos teniendo su mejor mes desde que salieron a cotizar.
Sin embargo, el tipo de cambio se mantuvo cerca del techo de la banda, sin evidenciar una apreciación significativa. Dado el rally de los activos, el mercado cambiario debería haber evidenciado una apreciación mucho mayor respecto de la que se evidenció.
El hecho de que el dólar se haya mantenido cerca de sus máximos y en la banda superior, la volatilidad cambiaria se mantiene alta.
La volatilidad cambiaria a 5 días en el contado con liquidación se mantiene en niveles de 60% anualizado, mientas que, en el tipo de cambio oficial, la volatilidad a 5 días es del 40% anualizado.

Dado este nivel de volatilidad cambiaria, el mercado sigue en la búsqueda de mayores pistas sobre el futuro del esquema cambiario.
Nicolas Max, director de Criteria, remarco que el sorpresivo resultado de las elecciones legislativas del 26 de octubre disipó en buena medida las tensiones que se venían acumulando en el frente político y ofreció una semana con una performance históricamente sobresaliente.
Hacia adelante, Max remarca que uno de los interrogantes es qué es lo que ocurrirá en el frente cambiario.
“Si bien el Poder Ejecutivo mantiene su compromiso con el actual esquema de bandas, persisten las especulaciones acerca de la necesidad de migrar hacia un sistema alternativo, que propicie la convergencia hacia un tipo de cambio de equilibrio determinado por la libre interacción entre oferta y demanda. Tal transición, aun con el riesgo de un overshooting inicial y su consiguiente impacto sobre los precios, podría dotar al Gobierno de una posición más holgada para participar en el mercado libre de cambios con el objetivo de recomponer reservas internacionales”, dijo Max.

De cualquier manera, y dado el contexto de fuerte suba en los activos financieros, llamó la atención que el tipo de cambio no haya evidenciado una apreciación mayor.
Matías Waitzel, socio de AT Inversiones, explicó que actualmente el dólar se ve influido por factores más estructurales que especulativos.
“La mejora de expectativas y la caída del riesgo país provocaron una fuerte recomposición de portafolios hacia activos en pesos, en un contexto donde la política monetaria mantiene el equilibrio entre oferta y demanda de dinero. En los últimos meses, la base monetaria se contrajo y el nivel de liquidez real se encuentra en mínimos históricos, lo que refuerza la estabilidad cambiaria de corto plazo “, indicó.
Se espera que las estrategias de carry se reactive
El mercado fue a las elecciones con una histórica demanda y posicionamiento de cobertura cambiaria, atemorizado de evidenciar nuevamente un evento como el que se había visto tras las elecciones de Provincia de Buenos Aires, en la que el tipo de cambio se disparó.
O peor aún, el mercado tenía en la memoria colectiva el temor de volver a ver un escenario cambiario como el post PASO de 2019, en el que el dólar saltó 35% el lunes siguiente a la derrota de Macri.
Con esos eventos en mente, y atemorizado ante una derrota electoral del Gobierno que pueda hacer disparar el tipo de cambio, los inversores fueron con una cobertura cambiaria excesiva.
Sin embargo, desde el resultado electoral fue sorpresivo y la presión cambiaria se desinfló.
Según estimaciones de Portfolio Personal Inversiones, la demanda de cobertura cambiaria bajó u$s 4300 millones tras las elecciones.
En cuanto a la demanda por cobertura, desde PPI dijeron que, en total, estiman una caída de u$s 4300 millones en la semana posterior a las elecciones de medio término, pasando de u$s 15.300 millones a u$s 11.000 millones.

Lo positivo del escenario post electoral es que, si bien la volatilidad se mantiene elevada, la misma se encuentra debajo de los picos que supo alcanzar en septiembre, tras el resultado electoral de Provincia de Buenos Aires.
Por lo tanto, ante un escenario de volatilidad cambiaria mas reducida en el margen, los analistas ven espacio para volver a apostar al carry trade y que las inversiones en pesos vuelvan a tener protagonismo, luego de meses de alta tensión.
Los analistas de Adcap Grupo Financiero señalaron que superado el riesgo electoral y en un contexto de mayor confianza, la menor volatilidad cambiaria ofrece un entorno propicio para el carry trade mediante bonos en pesos, reduciendo los riesgos extremos.
Bajo este panorama, desde Adcap Grupo Financiero esperan que los bonos en pesos superen el rendimiento de los bonos en moneda dura entre un 7% y un 18% hasta junio de 2026.
“En experiencias previas, esta ventaja se concentró en las primeras etapas, en un contexto de apreciación del peso. Esta vez, dado que el principal catalizador es la recuperación del acceso al mercado, el ritmo podría ser considerablemente más lento y requerirá paciencia”, remarcaron.
El tipo de cambio se mantuvo alto pero el contexto del mercado en general fue positivo ya que el dólar siguió elevado mientras los demás activos subían.
A su vez, el mercado buscó reducir su exposición a cobertura cambiaria luego de las elecciones.
Auxtin Maquieyra, Gerente Comercial de Sailing Inversiones, espera que el actual esquema de bandas cambiarias se mantenga hacia adelante, por lo que la demanda de cobertura debería mantenerse baja.
“El triunfo en las elecciones y el respaldo del Tesoro de EEUU le dan al gobierno una alta cuota de credibilidad política y económica, fortaleciendo su capacidad para defender la estrategia de bandas cambiarias. Este lo que genera es una reducción del riesgo cambiario y favorece las estrategias de carry trade, dado el reaseguro que brinda la estabilidad del dólar”, indicó Maquieyra.

Finalmente, desde Research Mariva sostuvieron que esperan que el escenario de tasas en Argentina siga apuntando a la baja, tal como se viene evidenciando desde el domingo post electoral.
“Consideramos que, con el riesgo político prácticamente disipado y la política monetaria encaminándose hacia la normalización, es probable que las tasas de interés nominales disminuyan drásticamente, impulsando la actividad económica tras varios meses de estancamiento”, indicaron.
En este contexto, desde Research Mariva agregaron que la reafirmación de las bandas cambiarias por parte del Ministro Luis Caputo, junto con las expectativas de una fuerte caída de las tasas de interés, podría reactivar la demanda de posiciones de carry trade.
Por lo tanto, ven potencial alcista en los títulos en pesos, sobre todo los de mayor plazo.
“Actualmente, observamos un mayor valor en la curva CER, particularmente en los segmentos de mediano y largo plazo. El bono TZXD7 ofrece actualmente un rendimiento del 10%. A corto plazo, creemos que, si las curvas se normalizan, su rendimiento podría converger hacia el 8,5%, nivel promedio que este bono registró a principios de año antes del desmantelamiento de los LEFI”, dijeron.
Alargando duration
Tras el resultado electoral se evidenció una fuerte compresión de tasas en pesos, tanto a tasa fija como en la tasa CER, es decir, ajustable por inflación.
En el caso de la tasa CER, la curva pasó de niveles de 50% de tasa real en el tramo corto antes de las elecciones a niveles de 10% de tasa real post electoral.
En el tramo medio y largo, operaba con tasas de 35% a 20% de tasa real antes de las elecciones, pasando a niveles de 10% actualmente.
Es decir, la curva a tasa CER no solo se desplazó notablemente a la baja, sino que además, se normalizó, dejando de tener una pendiente extremadamente invertida para tener una curva plana.
Algo similar se evidenció en la curva a tasa fija y en la que, tras las elecciones, la misma tuvo un fuerte corrimiento bajista.
Antes de la contienda electoral, la curva a tasa fija operaba con tasas de 4,5% (TEM) en el extremo más corto y de 3,5% a 3% (TEM) en el tramo medio y largo.
Tras el resultado electoral, la curva se desplomó, es decir, los bonos en pesos subieron.
Ahora la curva a tasa fija rinde 2,5% (TEM) en el extremo mas corto y 2% (TEM) en el extremo medio y largo en promedio.
Con el actual escenario de tasas más bajas, el mercado vuelve a tomar una estrategia que se llevaba a cabo durante 2024, momento en el que el mercado mostraba un fuerte anclaje en las expectativas.

Los analistas de Adcap Grupo Financiero consideraron que, dado que el mercado continúa posicionado en bonos de duración más corta, creemos que los de plazo más largo aún tienen margen para seguir superando.
“Favorecemos los bonos ajustados por inflación, ya que las expectativas de breakeven podrían ser demasiado optimistas, al suponer que la inflación caerá por debajo del 2% demasiado pronto. Por ello, recomendamos posicionarse en el extremo largo de la curva, como los Boncer TZXD6 y TZXD7”, sostuvieron desde Adcap Grupo Financiero.
En cuanto al posicionamiento, desde Facimex Valores consideran que luce conveniente alargar duration en Boncer e instrumentos a tasa fija.
“Con el aplanamiento de la curva CER en zona de 9% a 10%, asignamos un porcentaje de la cartera en Boncer el tramo medio y largo, donde destacamos al Boncer de diciembre de 2026 (TZXD6) en CER+9,5% y el Discount (DICP) en CER+9,7%, ambos en niveles atractivos”, sostuvieron.
Adicionalmente, dentro del posicionamiento en pesos, desde Facimex Valores complementan la cartera restante con Boncap largos.
“Destacamos al Boncap de junio de 2026 en 31,6% TEA y 2,3% TEM y al nuevo Boncap de abril de 2027 (T30A7) La exposición a Boncap largos permitirá capturar cualquier compresión adicional en las tasas reales o en los break-evens de inflación”, indicaron.
Juan Manuel Franco, economista jefe de Grupo SBS, resaltó que el resultado electoral impulsó la demanda de pesos, favoreciendo también a los papeles denominados en pesos, que mostraron retornos muy elevados.
A su vez, Franco coincide en que, dado el nivel de tasas de interés en pesos, parece atractivo extender algo de duration aun pese al rally post electoral, pensando en la normalización de cuestiones monetarias que redundarían en cierto relajamiento de las condiciones de liquidez.
“Papeles cortos para carry trade de corto plazo pueden ser atractivos para perfiles dispuestos a asumir el riesgo cambiario, pero destacamos que el otro riesgo a considerar será el de reinversión al vencimiento”, dijo.
Finalmente, los analistas de Cohen consideraron que el escenario de baja de tasas podría empujar a los inversores a buscar posicionarse en los tramos más largos.
“Anticipamos que las tasas deberían bajar en todos los tramos. Portfolios que busquen rendimiento en pesos atractivos, estirar los vencimientos para apostar a bajas de tasas es una alternativa con sustento”, dijeron.












