

El magnate Paul Singer, titular del fondo buitre NML Capital que lidera el litigio contra el país en las corte del juez Thomas Griesa, finalizó el vínculo con la consultora de la ex secretaria de Estado Madeleine Albright, indicó ayer el periódico New York Post (NYP). Fue contratada para lograr un acuerdo con las autoridades argentinas en el pago de la sentencia a su favor, pero recogió una mala reacción por parte del gobierno argentino.
Albright, que ha convertido sus amplias relaciones diplomáticas tanto en una empresa de consultoría como en un fondo de cobertura que invierte en mercados emergentes, fue contratada por Singer para ayudar en la rencorosa disputa de su deuda con Argentina, dijo NYP.
Singer esperaba que Albright sería capaz de reunirlo con funcionarios de Argentina a la mesa de negociaciones.
Pero el rechazo de Argentina condujo a Singer y Albright a terminar su asociación, al menos por ahora, dijo NYP.
La asignación de la ex funcionaria fue contraproducente, ya que la presidente Cristina Kirchner atacó públicamente a la firma de Albright por entrometerse en los asuntos del país.
La Presidente afirmó que la consultora dijo que Singer tenía un plan de cinco puntos para desestabilizar al gobierno argentino si no se sentaba a negociar con los holdouts liderados por Singer, que ganaron un juicio por su tenencia de títulos argentinos en default por 1.600 millones de dólares.
Cristina dijo que el ex secretario de Comercio del segundo gobierno de Bush y socio de Albright, Carlos Gutiérrez, planteó a los funcionarios que los holdouts: desgastarían la figura de la Presidente con ataques mediáticos y denuncias sistemáticas a nivel internacional; propiciarían ataques especulativos en la variación del tipo de cambio marginal; impedirían el acceso de Argentina al financiamiento internacional; propiciarían una estrategia para lograr un acuerdo favorable a los fondos buitres en 2016, y contratarían a medios de comunicación para esmerilar al gobierno.
Albright Stonebridge Group, la consultora acusada, negó tener un plan de este tipo. Pero la unión entre Singer y Albright dejó de tener sentido, por ahora.
Singer retuvo a la diplomática de 77 años en una tarea a corto plazo, que se canceló debido a que los argentinos no parecen estar interesados en lo que ella está diciendo, dijo una fuente cercana al inversor multimillonario, según NYP.
Hace un mes y medio
A fines de agosto, el NYP había informado la contratación de la funcionaria de la presidencia de Bill Clinton por parte de Singer para fortalecer su poder de lobby en el conflicto que mantiene con Argentina por los títulos defaulteados que tienen en su poder y con sentencia firme de la Justicia de Estados Unidos, y que el país aún no pagó.
El mismo periódico había revelado que también el ex secretario de Comercio durante la presidencia de George Bush Gutiérrez estuvo en la Argentina para intentar impulsar la oposición al Gobierno.
Desde julio pasado, Argentina se niega a negociar con los fondos buitre por la vigencia de la cláusula Rufo, que obliga a pagar lo mismo al resto de los bonistas que entraron al canje y vence en 2015. Mientras tanto, el país deposita los vencimientos aunque los fondos no lleguen a los bonistas, por trabas que impone Griesa.













