Microsoft lanzó ayer al mercado su primera computadora laptop en un intento por avanzar basándose en el éxito de sus tablets y competir con Apple, si bien la iniciativa amenaza con debilitar su relación con los fabricantes de PC, de quienes depende para vender su sistema operativo.


"Esta es la PC más delgada y potente que se haya creado", afirmó Panos Panay, vicepresidente corporativo de Microsoft, durante el lanzamiento de Surface Book, que ya está a la venta y su precio es de u$s 1.499.
Al igual que las tablets Surface Pro de la compañía, la nueva laptop tiene una pantalla desmontable que se puede usar como una tablet.


La Surface Book se parece mucho a la MacBook Pro de Apple, la laptop del fabricante del iPhone, en términos de precio y peso. Sin embargo, Microsoft afirma que su máquina es dos veces más rápida y cuenta con una batería con autonomía para 12 horas continuas.


Los analistas aplaudieron al nuevo aparato de Microsoft. "Surface Book demuestra que la innovación en las computadoras personales no nace sólo en el campus de Apple en Cupertino", dijo Geoff Blaber de CCS Insight, el grupo de investigación.


Microsoft corre el riesgo de generar enojo entre los fabricantes de PC que descargan en sus máquinas los sistemas operativos de Microsoft. Pero Daniel Ives, analista en FBR Capital Markets, describió el potencial conflicto como "mínimo". "En este momento, Microsoft debe avanzar en este mercado con la palanca de cambios en quinta", afirmó.


Según Blaber, "los fabricantes mayormente aceptan el rol de Microsoft en el segmento de hardware y se está aportando nueva innovación a un mercado de PC herido. Surface ayuda al mercado de PC en general más de lo que entorpece a los socios de Microsoft."


La laptop fue la pieza central del lanzamiento de una serie de aparatos nuevos con Windows 10, la nueva versión del sistema operativo Windows que fue instalada en 110 millones de aparatos desde que se puso a la venta hace ocho semanas.


La compañía quiere usar el nuevo sistema operativo para hacer una nueva jugada en el mercado de los dispositivos portátiles, el cual está fuertemente dominado por aparatos que corren los sistemas operativos iOS de Apple o Android de Google.


"Más y más gente vuelve a casa con Windows", dijo Satya Nadella, CEO de Microsoft. "Ahora empezamos un nuevo capítulo con nuevos dispositivos armados para Windows 10 fabricados por nosotros o por nuestros socios".


El Surface es un extraño éxito para Microsoft porque le permitió adelantarse a sus principales rivales tecnológicos en una categoría de hardware nueva. Apple y Google lanzaron imitaciones el mes pasado.
"Surface tuvo un modesto éxito, y ahora el objetivo para Microsoft es usar ese impulso para elevar la demanda de los consumidores e idealmente comenzar a cambiar la percepción de Microsoft".


Microsoft también reveló el Pro4, la cuarta renovación de su tablet Surface, con la que pretende cerrar la brecha entre las laptops convencionales y tablets. Según la compañía, la Pro4 es 50% más rápida que la MacBook Aire, la laptop ultraliviana de Apple. Muchas de las características de Surface como el teclado retroiluminado y su capacidad de almacenamiento de hasta un terabyte normalmente son propias de las laptops de alta gama.
En julio, Microsoft pasó a perdida cercana a u$s 8.000 millones por la compra de los teléfonos Nokia y anunció fuertes despidos, en una medida que fue interpretada como el reconocimiento de que nunca se convertirá en un fabricante de smartphones líder.


La compañía también presentó ayer un nuevo dispositivo para vestir, Microsoft Band 2, y mostró un videojuego para el que se usan sus anteojos HoloLens de realidad virtual.