En los últimos años, internet ha visto surgir teorías de dudosa veracidad que, no obstante, han captado un creciente interés. Una de estas teorías sugiere que no fueron los egipcios, sino seres extraterrestres, quienes construyeron las pirámides de Egipto.

Esta noción, que gana adeptos impulsada por programas de pseudociencia televisiva, se basa en la "hipótesis de los antiguos astronautas". Esta teoría postula que los humanos son descendientes o creaciones de extraterrestres que visitaron la Tierra hace milenios, y que muchas deidades y seres mitológicos serían fruto de estas visitas.

Hace no mucho, un artículo de Vice destacó que muchos jóvenes, y hasta figuras como Elon Musk, parecen simpatizar con esta hipótesis. A pesar de evidencias históricas que contradicen estas ideas, como los registros deHeródoto sobre la construcción de las pirámides, persiste el escepticismo sobre la capacidad de los antiguos egipcios para erigir tales estructuras. Las dudas incluyen cuestionamientos sobre cómo se transportaron los pesados bloques de piedra y por qué estas construcciones se alinean con el cinturón de Orión.

Para investigar más, desde El Confidencial se contactaron a Rosa Pujol, presidenta de la Asociación Española de Egiptología. Pujol reconoce que aún no se sabe con exactitud cómo se construyeron las pirámides, descartando teorías como la de las rampas de arena y -claro-, a los extraterrestres. Destaca que, a pesar de las grandes dimensiones de las pirámides, estas eran simplemente tumbas faraónicas. Además, corrige el mito de que fueron construidas por esclavos, explicando que los trabajadores eran principalmente campesinos reclutados durante las inundaciones del Nilo.

Otra curiosidad es la presencia de pirámides similares en culturas distantes, lo cual Pujol atribuye a un deseo universal de las culturas antiguas de alcanzar la inmortalidad. Contrariamente a la idea de que las pirámides son estructuras simples, Pujol señala la complejidad de su construcción, incluyendo la precisión en su orientación y alineación con constelaciones como Orión, lo cual refleja el avanzado conocimiento astronómico de los antiguos egipcios.

En suma, la fascinación por las pirámides de Egipto ha alimentado muchas hipótesis alternativas, pero los expertos como Pujol enfatizan la importancia de apreciar los logros de las culturas antiguas y reconocer su avanzado ingenio y conocimientos, en lugar de atribuir sus creaciones a influencias extraterrestres.