

La Administración Federal de Ingresos Públicos, a través de la Dirección General de los Recursos de la Seguridad Social, denunció a 8 encargados de tres talleres textiles de la Ciudad de Buenos Aires, quienes fueron detenidos y procesados por los delitos de trata de personas y reducción a la servidumbre. A raíz de esta investigación se citaron como imputados a los 9 dueños de las marcas de ropa M51, Narrow, Berry Blue y Zurah Jeans.
‘Hemos detectado condiciones de trabajo inadmisibles. Al no registrar a estos empleados se están evadiendo las cargas sociales y se están condenando a estas personas a no tener un trabajo digno, cobertura médica y acceso a una futura jubilación‘, evaluó el administrador federal, Ricardo Echegaray.
Los trabajadores explotados eran de nacionalidad boliviana y los talleres se encontraban todos en el barrio de Parque Chacabuco. La AFIP, constituida como parte querellante en la causa, consideró que el reproche penal no se limitaba a los encargados de los talleres clandestinos y solicitó al Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 4, a cargo del Dr. Ariel Lijo, hacer extensivo el mismo a los dadores de trabajo que fomentaban esta situación de esclavitud para la producción de prendas textiles, solicitando la citación a indagatoria para los próximos días de febrero.
La indagatoria alcanza a Silvia Bollada y Silvio D’Amore, presidente y accionista de Vidatex, y a Sergio Alejandro Garber y César Fernando Fucks, socios gerentes de Research Textil. Ambas firmas fabricantes de la marca Narrow.
También a Aldo Mario Rodríguez, presidente de Indu Jeans, que comercializa la marca M51 de jeans y camisas; a Rodrigo Garro, socio gerente de Hermanos Garro; a Juan Carlos Paravicini y Ernesto Ponzini, socios gerentes de Kroppo, que venden Zurah Jeans y a Yim Chamg Yul, titular de la marca Berry Blue.













