

En las últimas horas, el Departamento del Tesoro de EE. UU. rechazó una apelación de 18 legisladores demócratas que quieren que el Fondo Monetario Internacional (FMI) ponga fin a su práctica de cobrar recargos significativos, en su mayoría a los países de ingresos medios y bajos, a los préstamos más grandes que no se pagan rápidamente.
El Fondo Monetario estimó que los países prestatarios pagarán más de $ 4 mil millones en recargos además de los pagos de intereses y tarifas desde el comienzo de la pandemia hasta fines de 2022.

Por su parte, el subsecretario del Tesoro para asuntos legislativos de la administración Biden, Jonathan Davidson, le expresó a los legisladores que los recargos estaban destinados a abordar el mayor riesgo para los accionistas involucrados en prestar grandes sumas a los países miembros.
No se aplican a los países más pobres del mundo, agregó Davidson, y los préstamos otorgados a menudo tenían tasas muy por debajo de las tasas de mercado.
"Los ingresos de los recargos para aquellos países que los pagan ayudan a crear equilibrios precautorios para proteger a los accionistas del FMI contra pérdidas potenciales", escribió Davidson en su respuesta a una carta del 10 de enero de los legisladores, una copia de la cual fue vista por Reuters.
"Desde el punto de vista del Tesoro, los recargos deben considerarse en el contexto del balance general del FMI, lo que es más importante, su capacidad para absorber pérdidas potenciales por la falta de pago de sus préstamos", dijo.
Cabe mencionar, que la opinión de Washington es vital ya que Estados Unidos es el mayor accionista de la institución crediticia global, que es financiada por sus estados miembros; aunque Alemania, Francia y Gran Bretaña se han mostrado abiertos a revisar la política de recargos.
En cuanto a Argentina, que se espera que gaste unos 3.300 millones de dólares en recargos entre 2018 y 2023, ha pedido en repetidas ocasiones un alivio temporal de los recargos dada la crisis de la COVID-19, pero los miembros de la junta ejecutiva del FMI siguen divididos sobre el tema en general.
Los miembros de la junta ejecutiva del FMI revisaron el papel de los recargos, ahora la mayor fuente de ingresos del fondo, a fines del año pasado, sin llegar a una decisión final, consigna U.S. News.












