

En el marco de la crisis policial en la que se produjeron saqueos en distintas provincias, con ocho muertos y numerosos episodios de violencia, y a pesar del pedido de un puñado de dirigentes opositores, el Gobierno sigue preparándose para los festejos de esta tarde en la Casa Rosada y la Plaza de Mayo por los 30 años de democracia.
En la Casa de Gobierno se acondicionó especialmente un salón, literalmente de punta en blanco, para el acto al que fueron invitados los ex presidentes de la democracia y otros dirigentes políticos. En el VIP está prevista una merienda y, más tarde, una cena para 1.600 invitados.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner tiene previsto dar un discurso desde el Museo del Bicentenario.
A los festejos no asistirían ni Ricardo Alfonsín, invitado en representación de su padre, ni Eduardo Duhalde ni el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri. El vicegobernador del Chaco, Juan Carlos Bacileff Ivanoff, a cargo del Poder Ejecutivo desde que Jorge Capitanich asumió como jefe de Gabinete, dijo que irá porque se lo pidió Cristina, pero que no tiene “ánimos para festejar nada” luego de que en su provincia los saqueos dejaran por lo menos dos muertos.
Además de la celebración dentro de la Casa Rosada, habrá un enorme festejo afuera, en un escenario montado al frente de la casa de Gobierno, de cara a la Plaza de Mayo.
Allí actuarán hoy, entre otros, León Gieco, Kapanga, El Choque Urbano, Cacho Castaña y el grupo humorístico los Ramoestones. El Gobierno seguía convocando por televisión a la plaza, dirigentes kichneristas replicaban la convocatoria por Twitter y el tránsito por el microcentro seguía interrumpido.













