

Una nueva marcha de caceroleros denominada ‘8N‘ se realizará mañana en el Obelisco. La diferencia con la manifestación anterior, cuya masividad tomó de sorpresa a la clase política, es que en esta oportunidad el apoyo de dirigentes de la oposición y el repudio de los oficialistas es explícito.
Del lado opositor, adhieren el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri; su fundación ‘Pensar‘; el gobernador cordobés, José Manuel de la Sota; el dirigente gastronómico, Luis Barrionuevo; el gremialista ruralista Gerónimo Venegas; el empresario agrario Eduardo Buzzi; el miembro del Consejo de la Magistratura, Alejandro Fargossi; el radical Rodolfo Terragno, y el ex candidato a presidente del FAP, Hermes Binner.
Macri formalizó el último sábado su convocatoria a la marcha del jueves, al expresar que se “siente representado” por los ciudadanos que organizan la marcha al Obelisco y llamó a concurrir “con una sola bandera, la Argentina”.
Además se sumaron al 8N los diputados de lo que alguna vez conformó en el Congreso el denominado ‘Grupo A‘, como el titular del bloque de la UCR en diputados, Ricardo Gil Lavedra; Ricardo Alfonsín, el empresario y diputado bonaerense Francisco De Narváez; la ex candidata a presidenta Elisa Carrio, los legisladores del duhalismo Eduardo Amadeo, del Pro Laura Alonso y Federico Pinedo, y la ex diputada menemista y ex ministra de Trabajo del gobierno aliancista, Patricia Bullrich.
Bullrich publicó en el sitio web de su partido (Unión por Todos) una serie de carteles con frases contra el Gobierno, para que los manifestantes impriman y lleven a la plaza.
En esa misma línea, Federico Pinedo dijo en declaraciones periodísticas que ‘yo voy a ir porque ya fui las tres veces. A mí me molesta es que uno vive en un sistema democrático, uno elige a sus gobernantes y después los gobernantes se creen que tienen derecho para tener más poder ellos y quitarles los derechos a los demás, no‘.
Por otra parte, después de confesar que volvió a dialogar con su añejo enemigo, Hugo Moyano, el sindicalista Luis Barrionuevo también le dio impulso a esta manifestación, convocada desde el 14 de septiembre, un día después de la última protesta, por Twitter y Facebook.
Desde otro lugar de la oposición, la otrora candidata a presidenta Carrio señaló que ‘esta semana aparecerá el protagonista fundamental que es el pueblo y que el pueblo va poniendo una agenda a futuro. Ahora es la oportunidad y deben ir todos a Plaza de Mayo‘ y les pidió ‘a los políticos que no vayan‘
Mientras tanto, del lado oficialista, el titular de la agrupación kirchnerista MILES, Luis D’Elía, calificó de ‘tilingos‘ a las personas que participarán mañana del cacerolazo en contra del Gobierno en distintos lugares del país, y sostuvo que “comenzará la diatriba golpista”.
Por su parte, la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela Carlotto, dijo que el cacerolazo “no le sirve a nadie”. Estas expresiones se suman a las críticas que lanzó anteayer el senador Aníbal Fernández, quien sostuvo que el cacerolazo iba a ser protagonizado mayormente por la “ultraderecha paga”.
El jefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina le respondió vía Twitter a Mauricio Macri, luego de que el jefe de Gobierno porteño posteara en su cuenta de la red social que mañana había que ir a la movilización "con una sola bandera, la argentina". Abal Medina le respondió: "Basura amontonada, semáforos rotos, negocios inundados, salud, educación. Que tal una bandera que diga Gobernantes a laburar?", y luego remató con: "Todo bien, pero, de onda, ¿que tal si te dedicás un ratito a gobernar?".












