

Los argentinos perciben un horizonte de cada vez más preocupante y oscuro de la economía del país para el futuro inmediato: según el último Índice de Incertidumbre Económica UCA, en el año 2021, el valor del indicador fue 45,9, es decir, se produjo un aumentó de un 59,6% respecto de diez años atrás.
El trabajo del Centro de Analítica Económica y Empresarial de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Católica Argentina (UCA) se basa en Big Data y describe las opiniones económicas transmitidas por usuarios argentinos en la red social Twitter.
La incertidumbre es un aspecto clave que impacta sobre las decisiones de consumo de las familias, la inversión por parte de empresas y las condiciones en los mercados financieros.
El valor del Índice de Incertidumbre de la UCA del año 2011 fue 28,8. Es decir, de cada 10.000 palabras, 28,8 estuvieron asociadas con cierta inquietud o desasosiego. Luego de transitar una trayectoria con tendencia ascendente, en el año 2021, el valor del indicador fue 45,9. Es decir, se produjo un aumento de un 59,6.

El valor más reciente del indicador corresponde a febrero de 2022. En este mes, el valor del estimador fue 45,1, marcando un descenso con respecto al mes anterior. Sin embargo, este valor es cercano al máximo registro anual observado que corresponde al año 2021.
Daniel Aromí, director del Centro de Analítica Económica y Empresarial a cargo del índice de la UCA e investigador de la UBA, especializado en aplicaciones de la economía conductual en contextos macroeconómicos, explicó a El Cronista que "la incertidumbre puede originarse en factores exógenos (el clima, factores externos), a impulso de política económica o a la forma en que los actores privados coordinan sus comportamientos (corrida bancaria/cambiaria, pánico financiero, burbujas en mercados de activos)".
De esta manera, Aromí comentó que en el caso de Argentina hay una combinación de factores. "En parte, importan las políticas públicas y su margen de acción (déficit público y su financiamiento), las condiciones externas (precio de la energía), y también la conducta de los actores (fluctuaciones en los niveles de confianza, ajuste de precios, corrida al dólar)".
La metodología propuesta para elaborar el monitoreo de la UCA, que utiliza herramientas de procesamiento de lenguaje natural, es transparente y de fácil interpretación. La evaluación cualitativa de los resultados indica que este indicador provee información valiosa sobre la trayectoria de las opiniones económicas y sobre su vínculo con las cambiantes condiciones de la economía. El índice anticipa información sobre los niveles de actividad económica, la confianza del consumidor y los mercados de activos financieros.
¿Persistirá la incertidumbre de los argentinos sobre su futuro económico en los próximos años o habrá manera de revertirla?
Aromí responde tajante: "Hay motivos para creer que este escenario persistirá. Está claro que salir de este régimen de alta incertidumbre es difícil".
De esta manera, el investigador a cargo del relevamiento evaluó que para modificar la visión pesimista que hoy tienen los argentinos del futuro "se requiere que múltiples condiciones jueguen a favor: el rumbo de las políticas públicas, la percepción del público de estas políticas, el nivel de nerviosismo manifestado por actores del sector privado, el contexto internacional (tasas de interés internacional, el ciclo global, el flujo de fondos a países emergentes, precios de la energía)". Nada sencillo en una Argentina cuya economía cada vez está más estancada y el contexto internacional no ayuda de mucho.

La metodología usada por el Índice de la UCA establece que para identificar mensajes sobre economía se usaron un modelo de detección de temas para construir una lista de palabras clave. De esta forma, se partió de una colección inicial de 210 millones de mensajes para el período 2011-2022 y se seleccionaron 7 millones de mensajes económicos.
"No esperaría caídas abruptas en el nivel de incertidumbre en el futuro cercano. La experiencia sugiere que la salida de un régimen como el actual lleva tiempo y monitoreo constante del escenario cambiante", añadió Aromí al evaluar el futuro inmediato.














