Un duro contrapunto se produjo hoy en Diputados, cuando legisladores de la oposición cuestionaron el precio de las acciones de YPF expropiadas a Repsol, a lo que el ministro de Economía respondió que el valor es “razonable y justo” y repudió además a quienes “con ignoracia y malicia” pusieron en duda esa tasación.

“Estamos completamente seguros de la idoneidad con que se ha tasado esta compañía”, dijo, tajante, Axel Kicillof.

Quienes cuestionaron el valor que le puso el Tribunal de Tasación a los papeles de la compañía expropiados a Repsol fueron los diputados nacionales del radicalismo, encabezados por el jujeño Miguel Guibergia, y Claudio Lozano, integrante del bloque Unidad Popular. Desde la UCR, en tanto, aseguraron que la posición del bloque es que se realice "una revaluación del YPF".

Guibergia hizo un repaso por los conceptos que el bloque radical considera controversiales, como la estimación de que la valuación es "superior a lo que es el Patrimonio Neto" de la empresa, y concluyó que “el valor de la empresa está inflado en 800 millones de dólares y si vemos el total de las previsiones, las mismas se han incrementado aproximadamente 1.100 millones de dólares con posterioridad a la expropiación”.

"Esto es un argumento más que válido para proceder a una revaluación de la empresa por parte del Tribunal de Tasación de la Nación”, pidió el secretario general del bloque, posición que fue defendida también por el cordobés Mario Negri, presidente del bloque de la UCR, a través de su cuenta de Twitter.

"#Repsol El precio superará los U$S 10.000M comprometiendo a futuras generaciones y gobiernos con altísimos intereses", escribió Negri en su cuenta personal, y luego sentenció: "#Repsol La tasación sobrevalua los activos y subvalúa los pasivos. Tampoco considera el costo ambiental ni por reclamos judiciales".

Este mismo planteo fue también sostenido por Claudio Lozano, del bloque Unidad Popular, que se preguntó si las autoridades de las provincias habían sido "consultadas en el proceso de valuación".

"El tema no es la diferencia entre capital e interés, sino ver el valor de la operación financiera, y eso implica tener en cuenta los intereses", indicó Lozano y luego siguió: "Si se cumpliera la hipótesis de máxima estaríamos ante una emisión de deuda de entre 7500 y 8500 millones de dólares. Ese es el valor que se le está poniendo a la empresa".

El ministro de Economía, en tanto, repudió sistemáticamente los cuestionamientos sobre el valor de las acciones e indicó que "se ha hecho un trabajo técnicamente impecable" y lo rescató de los ataques "con ignorancia y malicia" de que fue objeto el Tribunal de Tasaciones, ya que señaló que el valor al que llegó "es comparable con lo que reclamó Repsol judicialmente ante el CIADI".

La forma en que el funcionario nacional argumentó a favor del acuerdo con la compañía europea fue que el valor de los u$s 5.000 millones "pueden compararse con lo que se ha ahorrado" en el país en importación de gas en los últimos dos años.

Kicillof resaltó a los diputados que "llegar a un acuerdo culmina cualquier polémica en torno del precio abonado".

La reunión se volvió especialmente tensa cuando el ministro cuestionó, en la exposición que brindó a las comisiones de Energía y Presupuesto y Hacienda de la Cámara, a quienes afirmaron que por las acciones expropiadas se terminarán pagando entre 10 mil y 11 mil millones de dólares.

Kicillof aseguró que entiende que los diputados "pueden no ser economistas y no entender la diferencia entre capital e interés", por lo que explicó con tono docente que "el monto de avenimiento está conformado por el capital e intereses" y, para graficar la situación, citó que "nadie se cae de espalda" cuando ve el costo final de un producto que adquiere financiado.

Informe: Noelia Barral Grigera